01:00¿No había de venir antes que el Mesías? Pues bien, Jesús dice, Elías había de venir y poner orden, mas el Mesías debía sufrir y ser despreciado, por eso Marcos presenta en la misma línea a Elías y al Hijo del Hombre.
01:19Con Elías hicieron lo que quisieron, refiriéndose al Bautista, y con el Hijo del Hombre harán lo mismo. De este modo, hace Jesús que el Hijo del Hombre glorioso que había de venir en las nubes, sea también el siervo sufriente que da su vida y sufre la muerte.
01:41El endemoniado epiléptico
01:44Sin ningún anuncio de cambio de escenario, Marcos nos presenta un texto rico en detalles.
01:52Unos discípulos impotentes, un padre desesperado, un niño que sufre y una multitud sorprendida de la presencia de Jesús.
02:04Marcos ya había puesto en claro que los discípulos gozaban del poder para proclamar el reino, curar enfermos y expulsar demonios, pero ahora hay un caso en el que no tiene capacidad para obrar un exorcismo.
02:22El contexto es de ausencia de fe, tanto en los discípulos como en el padre del niño, y en la gente que rodea a Jesús.
02:33El breve pero intenso diálogo entre Jesús y el padre del niño es la cumbre doctrinal del pasaje porque en su desesperación no sabe cómo actuar.
02:46Él tiene fe, pero tal vez no suficiente. Por eso le pide a Jesús que con su milagro haga crecer su fe en Dios.
02:57Segundo anuncio de la pasión y la enseñanza sobre el más grande
03:02Jesús dedica tiempo a sus discípulos cuando les habla nuevamente de su pasión y su muerte.
03:10Ahora los discípulos tienen miedo, pero su miedo no impide que tengan preocupaciones temporales.
03:18Jesús habla de muerte mientras caminan hacia Cafarnaúm.
03:23Ellos discuten quién de ellos es el más importante.
03:28Jesús no da un sermón, solo se sienta.
03:32Les dice que el primero es aquel que toma el último lugar, y quien sea el mayor se ha de mostrar en el servicio y para dejar más clara la idea, toma a un niño.
03:46Lo pone en medio de los doce y les dice que hay que recibir a un niño para recibirlo a él.
03:54Y al recibirlo a él, ¿recibirá quién?
03:56Ha enviado a Jesús.
03:58El niño era en la sociedad judía antigua lo que son los ancianos en nuestras culturas actuales.
04:08Personas que nada aportan, que todo consumen, que exigen mucho, que poco se puede obtener de ellos,
04:17y que consumen nuestro tiempo y esfuerzos, que los bienes que aportan son nada comparado con lo que se invierte en ellos.
04:27Juan sigue preocupado por su situación como seguidor de Jesús,
04:56Juan no habla de ser seguidor de Jesús, que sería lo propio, sino ser seguidor del grupo, como si el grupo de discípulos fuera el punto de referencia.
05:16Por eso Jesús les recuerda que la aceptación de su maestro es un modo de aceptar también a sus seguidores.
05:26Tan grandes son los discípulos en cuanto seguidores de Jesús, que cualquier detalle que se tenga por ellos, por el hecho de ser de Jesús, obtendrá una recompensa.
05:39Y la dignidad de Jesús es tan grande que el cristiano se ha de cuidar de escandalizar a cualquier hermano sencillo.
05:51No podemos escudarnos en nuestra sabiduría para obrar como si fuéramos el centro de la vida cristiana.
06:00Ahora un grupo de fariseos pregunta a Jesús sobre el divorcio.
06:16Probablemente ya habían escuchado que Jesús se oponía a esta venerable institución judía por cuanto tenía de machista y unilateral.
06:28Una de las preocupaciones de los fariseos, como ya vimos, era lo relativo al divorcio, su licitud, las condiciones y la entrega del acta de divorcio a la esposa repudiada.
06:43Pero hermanos, ¿en qué se basaba Jesús para rechazar el divorcio?
06:49Los fariseos querían averiguar su postura y le preguntan sobre el mismo.
06:55Jesús no responde directamente, sino que les pregunta sobre las prescripciones de Moisés.
07:04Por supuesto, Moisés había dejado en claro que era posible y legítimo que el marido, nunca la esposa, repudiara a su esposa y le concediera la libertad de poder volver a casarse mediante el acta de divorcio.
07:22Jesús declara que si Moisés permitió esta acción es por la dureza del corazón del pueblo.
07:30Porque originalmente, cuando Dios creó a la primera pareja, al momento de cohabitar, se convirtió en una sola carne, de tal manera que ya no se pueden separar.
07:44La unidad de carne en el matrimonio es una unión que ningún hombre puede romper.
07:52Y concluye diciendo que quien usa del privilegio de separarse de su esposa, comete un pecado que va contra la misma ley que ellos tanto aprecian, cometer adulterio.
08:06Jesús y los niños
08:09En un apartado que enriquece la visión de Jesús sobre los niños, les dice a sus discípulos que sólo los que son como los niños tienen capacidad para entrar en la dinámica del reino de Dios.
08:26Si Dios es padre, el cristiano ha de ser un permanente niño, no en la ingenuidad o en la inmadurez, sino en la confianza ilimitada en su padre.
08:40El hombre rico
08:41Jesús había tenido éxito llamando a sus primeros seguidores, y éstos no habían tenido miedo de abandonarlo todo para ir tras Jesús.
08:54Ahora se les acerca un hombre que quiere mucho más de lo que ha conseguido con la herencia de su padre.
09:02Él quiere saber cómo puede heredar la vida del cielo.
09:05Jesús remite al hombre a los mandamientos que Dios le dio a Israel en el Sinaí, y el hombre afirma que todos esos mandamientos los ha cumplido fielmente desde que era joven.
09:20Pero hermanos, ¿cómo no amar a alguien así?
09:24Jesús mismo queda impresionado en la integridad de aquel hombre, alguien valioso.
09:31Pero hermanos, para seguir a Jesús, no hay que tener ninguna atadura.
09:39Jesús le pide que deje aquello que le puede impedir darlo todo, sus riquezas.
09:47Pero si el hombre renuncia a sus riquezas, tendrá un tesoro en el cielo, un cambio que bien vale la pena.
09:56Pero al parecer, para este hombre era mejor la seguridad de sus bienes que la promesa de bienes mejores.
10:06Mal de todos los seres humanos.
10:09Preferimos gozar el presente que merecer un futuro mejor y más prometedor.
10:17Peligros de las riquezas
10:19La riqueza siempre fue, para los judíos, un signo de la complacencia de Dios, pues era el modo en que Dios mostraba a los hombres que una persona era buena y fiel.
10:35La riqueza era una bendición de Dios, ni más ni menos.
10:40Pero ahora, Jesús afirma que quienes confían o tienen riquezas, no pueden entrar en la dinámica del reino de Dios.
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