00:00¿Qué tal, queridos hermanos? Nuevamente, para saludarlos y ayudar a contestar algunas de las preguntas que nos hacen sobre temas relacionados a la fe y la vida cristiana.
00:12Estamos contestando una pregunta que nos hizo nuestro hermano Luis sobre el tema del ayuno, que me ha permitido ampliar sobre el tema de la cesis.
00:30Decíamos cómo dentro del tema del ayuno está la experiencia necesaria de la cesis o la penitencia.
00:49Pues bien, para que la penitencia sea verdaderamente una ayuda para el crecimiento espiritual, es necesario quitarle toda esa carga negativa que por años ha tenido,
01:02para redescubrirla como un momento privilegiado de encuentro con la misericordia de Dios, que conoce nuestras miserias y que a pesar de ellas nos ama y nos ha llamado a la santidad más elevada.
01:14Esto nos llevará, sin lugar a dudas, a experimentar el poder que sana el interior del hombre y que le impulsa a reemprender el camino de la felicidad, la alegría, el gozo y la paz,
01:28ya que, como bien decía Climaco, es mediante la penitencia como nos libramos de la tiranía de las pasiones.
01:36Así, la cesis es la cruz benéfica que nos ayuda a renunciar a nosotros mismos, a los excesos y exageraciones,
01:46y para preparar el camino para que Dios desarrolle en nosotros la vida divina, la vida según el Espíritu.
01:53Sin embargo, debemos ser conscientes de que la falta de prudencia puede también desordenar la misma penitencia,
02:01con lo cual nos causamos o se causan graves daños, sobre todo al alma,
02:07ya que la práctica de la mortificación debe de ser siempre un acto de templanza.
02:13Santo Tomás, citando a San Jerónimo, decía,
02:16Ahora sí, teniendo en cuenta lo que te he dicho sobre la penitencia,
02:44veamos un poco más de cerca el tema del ayuno.
02:48El ayuno, desde la vida espiritual, nos ayuda en dos áreas de nuestra vida.
02:54Por un lado, es la forma como la voluntad se entrena a la renuncia de las cosas buenas,
03:00para que en su momento podamos rechazar las malas.
03:03Por otro lado, ejerce una acción misteriosa que permite al alma abrirse de una manera particular a la gracia y a la presencia de Dios.
03:12Cuando nos privamos de cualquier cosa relacionada con nuestros apetitos,
03:18especialmente orientados al placer, comer, beber, oír, sentir,
03:23estamos acostumbrando a nuestra voluntad a recibir órdenes directamente de nosotros y no de nuestras pasiones.
03:31Nos lleva a ser dueños de nosotros mismos.
03:34De esta manera, una persona habituada a ayunar, será una persona habituada a la renuncia,
03:42y tendrá sometidas sus pasiones a la voluntad,
03:46de manera que el cuerpo come, duerme, y hace lo que la voluntad le indica.
03:52Si la voluntad está orientada a Dios, buscará evitar todo lo que lo separe de Dios,
03:58y orientará todas sus acciones y todas sus potencias hacia Dios mismo.
04:04Por otro lado, como te decía, el ayuno, especialmente el de la comida,
04:10nos abre de una manera misteriosa a la presencia de Dios.
04:13Parecería como si el hambre corporal se fuera convirtiendo en hambre de Dios, algo misterioso.
04:21Ahora bien, para que esto se realice, el ayuno debe de estar unido a la oración.
04:27Sin la oración, el ayuno se convierte en dieta, o en un estoicismo sin sentido,
04:33que poco o nada ayudan a la vida espiritual.
04:36En nuestra próxima reunión, en nuestra próxima catequesis, y última catequesis sobre este tema,
04:42quiero proponerte algunos elementos básicos, que estoy seguro te ayudarán grandemente
04:48para iniciar una vida de penitencia, teniendo a la base de ella el ayuno corporal.
04:54Hasta entonces, y bueno, pues si esto fue de utilidad para tu vida,
04:58compártelo con otros hermanos en tus redes sociales,
05:01y haz que otros también conozcan para que amen más al Señor.
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