A sus 75 años, don José Refugio Esquivel Jiménez enfrenta el invierno solo. Su esposa vive con uno de sus hijos debido a problemas de salud, y él, con una lesión en la columna desde su juventud, ya no puede trabajar.
Vive de la venta de ropa y del apoyo que sus hijos pueden darle, pero hoy el frío de Mexicali le está pegando más fuerte que nunca.
“Me hace mucho daño el frío, casi no puedo caminar…”, comparte con tristeza. Aunque tiene un par de cobijas, no son lo suficientemente gruesas para enfrentar las bajas temperaturas.
Aun así, don José agradece cada día con lo que tiene… y sueña con pasar una Navidad digna, calientita y sin dolor.
El Cobertón Navideño de LA CRÓNICA está recibiendo cobijas, cobertores, tamales, ropa o cualquier gesto que pueda hacer la diferencia en estas fechas.
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