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VALLE SALVAJE CAPÍTULO 299: Pepa se ENTREGA por LUISA…pero ACABAN PRESAS JUNTAS por ORDENdel CAPITÁN
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CortometrajesTranscripción
00:00Prepárense porque lo que están a punto de presenciar en este capítulo de Valle Salvaje
00:04les partirá el corazón en mil pedazos.
00:06Una hermana dispuesta a sacrificarlo todo,
00:09una pelea que romperá lazos de sangre
00:11y una alianza que promete destruir el poder de los duques.
00:15Esto va a ser devastador.
00:17Todo comienza en el lugar más oscuro y desesperado de Valle Salvaje, la prisión.
00:22Las celdas de la Santa Hermandad son un infierno en la tierra,
00:26húmeda, frías,
00:27donde la luz del sol apenas se filtra entre los barrotes oxidados.
00:30Y es allí, en ese lugar de pesadilla,
00:33donde Luisa lleva días encerrada,
00:35acusada de un crimen que no cometió.
00:37Su rostro está pálido, demacrado,
00:39con ojeras profundas que delatan las noches sin dormir.
00:42Ha perdido peso.
00:43Su ropa cuelga de su cuerpo como un saco.
00:46Y sus manos tiemblan constantemente por el frío y el miedo.
00:49Pero lo que más duele no es el hambre ni el frío.
00:52Lo que más duele es la soledad.
00:54Porque Luisa ha tomado la decisión más dolorosa de su vida.
00:58Ha ordenado que no dejen pasar a Alejo.
01:00No puede verlo.
01:01No puede soportar la idea de que él la vea así,
01:04destruida,
01:05acusada de ladrona.
01:07Refiere que él piense que lo ha traicionado,
01:09que ella es culpable,
01:10antes que verlo sufrir intentando salvarla,
01:13cuando sabe que no hay salvación posible.
01:15Los pasos en el pasillo la hacen levantar la cabeza.
01:18Reconoce ese caminar decidido,
01:20esos tacones firmes contra la piedra.
01:22Es Pepa.
01:23Su hermana menor ha venido a visitarla otra vez.
01:26Pero esta vez, algo es diferente.
01:28Pepa no viene sola.
01:30Viene acompañada del capitán de la Santa Hermandad.
01:32Y su expresión no es de tristeza ni de preocupación.
01:35Es de determinación absoluta,
01:37de decisión irreversible.
01:39Luisa se pone de pie lentamente,
01:41aferrándose a los barrotes.
01:42Algo está pasando.
01:44Algo terrible está a punto de suceder.
01:46El capitán se detiene frente a la celda,
01:48y la mira con esa expresión impasible
01:50que solo los hombres de la ley pueden tener.
01:53Pepa está a su lado,
01:54con la barbilla en alto,
01:55los puños apretados,
01:57respirando profundamente como quien está a punto de saltar al vacío.
02:00Y entonces lo dice,
02:02esas palabras que cambiarán todo para siempre.
02:05A mí me va a encerrar usted,
02:07pero sola.
02:08El capitán la mira con el ceño fruncido.
02:10¿Disculpe?
02:11Fui yo quien robó la talla de la duquesa de Valle Salvaje.
02:14¡Dios mío!
02:15¡Santa madre de Dios!
02:17¿Escucharon eso?
02:18Pepa acaba de confesarse culpable del robo.
02:21Acaba de sacrificarse por su hermana.
02:23Luisa siente cómo las piernas le fallan.
02:26Se aferra con más fuerza a los barrotes para no desplomarse.
02:28¿Qué estás diciendo, Pepa?
02:30No digas tonterías.
02:31Pero Pepa no la mira.
02:33Mantiene sus ojos fijos en el capitán,
02:35su voz firme y clara.
02:36No es ninguna tontería.
02:38Yo robé esa talla.
02:39Mi hermana no tiene nada que ver.
02:41El capitán analiza la situación.
02:43Durante unos segundos que parecen eternos,
02:45estudia el rostro de Pepa,
02:47buscando señales de mentira,
02:49de duda,
02:50de vacilación.
02:51Pero no encuentra nada.
02:52La joven está completamente seria,
02:54completamente convencida de lo que está diciendo.
02:56Y entonces,
02:57da la orden que romperá el corazón de Luisa en mil pedazos.
03:01Abran la celda.
03:02Ella entra también.
03:03¡No!
03:04Grita Luisa desde dentro.
03:05¡No, por favor!
03:07Ella está mintiendo.
03:08Ella no hizo nada.
03:10Los guardias no la escuchan.
03:11O si la escuchan,
03:12no les importa.
03:14Toman a Pepa por los brazos con rudeza,
03:16más fuerza de la necesaria,
03:17como si ya la consideraran una criminal convicta.
03:20Pepa no opone resistencia.
03:22Deja que la arrastren hacia la celda,
03:24sus pies apenas tocando el suelo.
03:26La puerta de hierro chirría al abrirse.
03:29Es un sonido espantoso,
03:30como el grito de un animal moribundo.
03:32Pepa es empujada dentro con violencia,
03:34tropezando y casi cayendo.
03:36Luisa la atrapa antes de que se golpee contra el suelo de piedra.
03:39Y entonces, la puerta se cierra.
03:41El golpe metálico resuena en todo el pasillo.
03:44Definitivo, absoluto, terrible.
03:46Las dos hermanas están ahora encerradas juntas,
03:49en ese espacio minúsculo,
03:50que apenas mide tres metros de largo por dos de ancho.
03:53El aire está viciado.
03:55Huele a humedad y a desesperación.
03:57Hay un catre destrozado en una esquina,
03:59un balde en el otro que sirve para necesidades básicas,
04:02y nada más.
04:03Nada más que piedra, hierro y oscuridad.
04:06Durante unos segundos, ninguna de las dos se mueve.
04:09El silencio es denso, pesado,
04:11cargado de mil emociones que pugnan por salir.
04:14Y entonces, explota.
04:16¿Por qué has dicho eso?
04:17¿Qué pretendes?
04:18Luisa está furiosa, completamente furiosa.
04:22Agarra a Pepa por los hombros y la sacude con desesperación.
04:25Su hermana menor, su bebé,
04:28la niña a la que prometió proteger toda su vida,
04:31acaba de arruinarse el futuro por ella.
04:33Sus manos tiemblan,
04:34mientras sujeta a Pepa,
04:36sintiendo cómo la adrenalina y el terror
04:38recorren cada fibra de su cuerpo.
04:41¡Suéltame!
04:42Pepa se libera del agarre con violencia,
04:44empujando a Luisa hacia atrás.
04:46Lo hice por ti, ¿no lo entiendes?
04:48Para que salieras de aquí.
04:50Pero claro, tú siempre tan santa,
04:52tan perfecta, tan mártir.
04:54¿Perfecta?
04:55Luisa siente cómo la rabia hierve en sus venas,
04:58cómo la sangre late con fuerza en sus sienes.
05:00Esto no ayuda a nadie, Pepa.
05:02Esto nos hunde a las dos.
05:03¿Cómo puedes ser tan estúpida?
05:06¿Cómo puedes pensar que sacrificar te resuelve algo?
05:09Porque tenía que hacer algo.
05:11Pepa grita ahora,
05:12su voz rebotando contra las paredes de piedra.
05:15No podía quedarme de brazos cruzados
05:16viendo cómo te destruían día tras día,
05:19viendo cómo te consumías en esta celda inmunda,
05:22mientras todos nos daban la espalda.
05:24Adriana no nos dio la espalda.
05:26Mercedes está ayudando.
05:27Alejo está moviendo cielo y tierra.
05:30Luisa camina de un lado a otro como un animal enjaulado.
05:33Pero ahora, ahora tú también estás aquí.
05:36Ahora las dos estamos condenadas.
05:38Alguien tenía que hacer algo.
05:40Pepa se acerca, las dos ahora cara a cara,
05:43sus respiraciones agitadas chocando entre ellas.
05:46El espacio reducido hace que la confrontación sea aún más
05:49intensa, más claustrofóbica.
05:51Tú no te defendías.
05:53Estabas esperando a que te aplastaran.
05:55Como siempre, aceptando tu destino como una mártir.
05:58Como si no merecieras luchar por tu propia vida.
06:01Porque no puedo luchar contra todos, grita Luisa.
06:04Las lágrimas comenzando a rodar por sus mejillas,
06:07dejando líneas limpias en su rostro sucio.
06:10La santa hermandad tiene evidencia.
06:12José Luis tiene poder.
06:14¿Y ahora tú estás encerrada por tu impulsividad?
06:17Por tu estúpida, infantil, imprudente impulsividad.
06:21¿Infantil?
06:22Pepa suelta una risa amarga, desprovista de cualquier alegría.
06:26Un sonido que suena más a un sollozo quebrado.
06:28Tú me tratas como si todavía fuera una niña.
06:31Pero no lo soy, Luisa.
06:33Hace años que no lo soy.
06:34Hace años que dejé de ser esa niña,
06:36que necesitaba que me protegieras de todo.
06:39Entonces, deja de actuar como una.
06:41Las palabras salen como un latigazo.
06:43El golpe es verbal, pero duele como si fuera físico.
06:46Pepa retrocede como si la hubieran abofeteado,
06:49tropezando contra el catre.
06:50Sus ojos se abren de par en par.
06:52Primero por la sorpresa.
06:54Luego por el dolor.
06:55Y finalmente por una rabia que ha estado fermentando durante años.
06:58¿Sabes qué, Luisa?
07:00La voz de Pepa es peligrosamente baja ahora,
07:02temblando con emoción contenida.
07:04Tienes razón.
07:05Soy una niña.
07:06Una niña que tuvo que criarse sola
07:08porque su hermana mayor estaba demasiado ocupada jugando a ser santa.
07:12Demasiado ocupada con sus propios problemas
07:14para ver que yo también sufría.
07:16¿Mis propios problemas?
07:18Luisa siente como algo se quiebra dentro de ella.
07:21Como si un dique que había estado conteniendo años de dolor
07:24finalmente cediera.
07:26¿Te refieres a cuando me violaron, Pepa?
07:28¿Te refieres a esa noche horrible en que un monstruo destrozó mi vida?
07:32¿O tal vez te refieres a cuando tuve que criar sola a un bebé,
07:35a Evaristo, sin tener idea de cómo ser madre?
07:38¿O quizás te refieres a cuando estuve a punto de morir de hambre
07:41tratando de conseguir comida para las dos?
07:43¿A cuál de esos problemas te refieres exactamente?
07:46Cada palabra es como un puñal.
07:48Cada pregunta una herida abierta.
07:51El aire en la celda se vuelve denso, casi imposible de respirar.
07:55Yo también estuve allí, Luisa.
07:57Las lágrimas ruedan ahora por el rostro de Pepa, incontrolables.
08:00Yo también pasé hambre.
08:02Yo también sufrí.
08:03Yo también tuve miedo cada maldita noche.
08:06Pero siempre fuiste tú la víctima.
08:08Siempre tú la que necesitaba protección, la que necesitaba salvación,
08:13la que necesitaba que todos la consolaran.
08:15¿Y yo qué?
08:16¿Quién me protegió a mí?
08:18¿Quién me consoló cuando tenía pesadillas?
08:20¿Quién me abrazó cuando lloraba de hambre?
08:22Las palabras son como puñales, cada una más afilada que la anterior.
08:26Años de resentimiento acumulado, de dolor guardado, de cosas nunca dichas,
08:30salen a la superficie como lava hirviente que había estado bajo presión durante demasiado tiempo.
08:35Yo te protegí.
08:37Luisa está llorando abiertamente ahora, su cuerpo temblando con la fuerza de sus sollozos.
08:42Todo lo que hice fue por ti.
08:44Cada robo, cada mentira, cada sacrificio, cada vez que puse mi vida en riesgo,
08:50cada vez que hice cosas que me avergüenzan hasta el día de hoy,
08:53todo fue para que tú tuvieras una vida mejor,
08:56para que tú no tuvieras que hacer las cosas terribles que yo tuve que hacer.
09:00No te pedí que lo hicieras.
09:02Pepa también está llorando.
09:03Su voz ronca de tanto gritar.
09:06Nunca te pedí que te sacrificaras por mí.
09:08Nunca te pedí que robaras.
09:10Nunca te pedí que mintieras.
09:12Lo que quería era una hermana, no una mártir.
09:15Quería que me hablaras, que me preguntaras cómo me sentía,
09:18que me vieras como algo más que una responsabilidad.
09:21Eras mi responsabilidad, grita Luisa.
09:24Cuando mamá murió, cuando papá nos abandonó, tú eras todo lo que me quedaba.
09:29Tenías seis años, Pepa.
09:31¡Seis años!
09:32Alguien tenía que cuidarte.
09:33Ux, pero nadie tenía que tratarme como si fuera invisible.
09:37La voz de Pepa se quiebra.
09:38Nadie tenía que tomar todas las decisiones por mí, sin preguntarme.
09:43Nadie tenía que hacer que sintiera que era una carga.
09:46El silencio que sigue es devastador.
09:48Luisa retrocede como si la hubieran golpeado físicamente.
09:51¿Pensabas que eras una carga?
09:53¿Qué otra cosa podía pensar?
09:55Las palabras de Pepa salen entre sollozos ahogados.
09:58Todo lo que hacías, cada sacrificio que mencionabas, cada vez que decías, lo hice por ti.
10:03Lo que yo escuchaba era, mi vida sería mejor si no existieras.
10:08Cada vez que hablabas de lo difícil que era mantenerme con vida.
10:10Lo que yo oía era, eres un problema que tengo que resolver.
10:14Luisa siente como su corazón se parte en mil pedazos.
10:17Se deja caer contra la pared fría, deslizándose hasta quedar sentada en el suelo de piedra húmeda.
10:22No, Pepa.
10:23No.
10:24Nunca fue así.
10:25Tú nunca fuiste una carga.
10:27Tú eras, tú eres mi razón de vivir.
10:30Entonces, ¿por qué siempre me hacías sentir como si te debiera algo?
10:33Pepa se sienta en el catre, su cuerpo sacudido por los sollozos.
10:37¿Por qué cada conversación incluía una lista de todo lo que habías hecho por mí?
10:41Luisa levanta la cabeza, sus ojos rojos e hinchados encontrándolos de su hermana.
10:46¿Por qué?
10:46Porque tenía tanto miedo.
10:48Miedo de que si no te recordaba todo lo que habíamos pasado, tú te olvidarías.
10:52Tú seguirías adelante y me dejarías atrás.
10:55¿Dejarte atrás?
10:56Pepa se limpia las lágrimas con el dorso de la mano.
10:59Luisa, eso nunca hubiera pasado.
11:01Eres mi hermana.
11:02Eres mi familia.
11:03Eres todo lo que tengo en este mundo.
11:05Pero tú tienes tanto más que yo, dice Luisa.
11:08Su voz apenas un susurro.
11:10Tienes a Martín.
11:11Tienes amigos.
11:12Tienes una vida aquí en Valle Salvaje.
11:13Yo solo tenía...
11:15Tenía mi pasado vergonzoso y mis errores.
11:17Y tenía miedo de que cuando te dieras cuenta de eso, cuando vieras realmente quién soy,
11:22me abandonarías como todos los demás lo hicieron.
11:25Pepa se desliza del catre y se arrastra por el suelo hasta quedar frente a su hermana.
11:30Toma las manos de Luisa entre las suyas, apretándolas con fuerza.
11:34Luisa, nunca te abandonaría.
11:36Nunca.
11:37¿Me escuchas?
11:38Nunca.
11:39Entonces, ¿por qué viniste aquí, Luisa Solloza?
11:42¿Por qué te condenaste a ti misma?
11:44¿Por qué confesaste un crimen que no cometiste?
11:46Porque cuando te miraba en esta celda, cuando veía cómo te consumías día a día, me recordaba
11:52a mí misma.
11:53Explica Pepa.
11:53Las lágrimas corriendo libremente ahora.
11:56Me recordaba a esa niña pequeña, que se sentaba en una esquina esperando que su hermana mayor
12:01volviera de hacer lo que fuera necesario para sobrevivir.
12:04Me recordaba cuántas veces me sentí impotente, incapaz de ayudarte cuando me necesitabas.
12:09Tú me ayudaste, insiste Luisa.
12:12Tú estabas allí.
12:13Tu presencia.
12:14Tu existencia.
12:15Era lo que me daba fuerzas para seguir adelante.
12:18Pero no era suficiente, ¿verdad?
12:19Pepa sonríe tristemente.
12:21Porque mira dónde estamos ahora.
12:23Encerradas en una celda, acusadas de un crimen que ninguna de las dos cometió.
12:27Separadas de las personas que amamos.
12:29Un nuevo silencio cae sobre ella.
12:31Pero este es diferente.
12:33No es el silencio cargado de rabia de antes, sino uno más contemplativo, más triste.
12:38Pepa.
12:39Dice Luisa finalmente.
12:40Cuando éramos niñas, después de que mamá muriera, ¿recuerdas lo que te prometí?
12:44Pepa asiente lentamente.
12:46Me dijiste que siempre me protegerías.
12:48Que no importara qué pasara, estaríamos juntas.
12:51Y rompí esa promesa.
12:52Luisa cierra los ojos, dejando que las lágrimas caigan.
12:55Te protegí físicamente.
12:57Te mantuve viva.
12:58Pero no te protegí emocionalmente.
13:00No te di lo que realmente necesitabas.
13:03Una hermana con quien hablar.
13:04Con quien reír.
13:05Con quien simplemente estar.
13:07Y yo, dice Pepa, su propia voz quebrándose.
13:10Yo me volví resentida.
13:12En lugar de hablar contigo, de decirte cómo me sentía, guardé todo dentro.
13:16Dejé que la amargura creciera, hasta que explotó de esta manera horrible.
13:21Somos un desastre, ¿verdad?
13:23Luisa intenta reír, pero sale como un sollozo.
13:25El peor desastre.
13:27Concuerda Pepa.
13:28Y esta vez su risa tiene un toque más genuino.
13:30Pero somos nuestro desastre.
13:32Las dos hermanas se miran.
13:33Realmente se miran.
13:35Quizás por primera vez en años.
13:37Y ven no solo los errores y los dolores, sino también el amor.
13:40El amor profundo, inquebrantable, que existe entre hermanas que han sobrevivido juntas a lo imposible.
13:46Lo siento, susurra Luisa.
13:49Siento haberte hecho sentir como una carga.
13:51Siento no haberte escuchado cuando necesitabas ser escuchada.
13:54Siento haber sido tan egoísta en mi dolor que no pude ver el tuyo.
13:58Y yo siento haber sido tan dura contigo, responde Pepa.
14:02Siento no haber reconocido todos los sacrificios que hiciste.
14:05Siento haber guardado tanto resentimiento en lugar de hablarte.
14:09Y siento...
14:10Siento haber venido aquí.
14:12Y haber hecho esta confesión estúpida que nos tiene a ambas encerradas.
14:15A pesar de todo.
14:16A pesar de las lágrimas y el dolor.
14:18Ambas ríen.
14:19Es una risa pequeña.
14:21Quebrada.
14:21Pero genuina.
14:22¿Sabes?
14:23Dice Luisa.
14:24Si vamos a estar encerradas juntas.
14:26Al menos podemos intentar hacer las cosas bien esta vez.
14:28Sin resentimientos.
14:30Sin cosas no dichas.
14:31Me gustaría eso.
14:33Pepa aprieta las manos de su hermana.
14:34Me gustaría mucho.
14:36Entonces empecemos de nuevo.
14:38Propone Luisa.
14:39Hola.
14:39Soy Luisa.
14:40Soy tu hermana mayor.
14:41Y he cometido muchos errores.
14:43Pero te amo con todo mi corazón.
14:45Pepa sonríe a través de sus lágrimas.
14:47Hola.
14:48Soy Pepa.
14:49Soy tu hermana menor.
14:50Y también he cometido muchos errores.
14:52Pero tú eres la persona más importante en mi vida.
14:55Se abrazan entonces.
14:56Allí en el suelo frío de la celda.
14:58Aferrándose la una a la otra como si sus vidas dependieran de ello.
15:02Y en cierto modo.
15:03Así es.
15:04Porque sin el amor de la otra, sin ese lazo de hermandad, ninguna de las dos sería quien es.
15:09Vamos a salir de aquí.
15:11Dice Luisa, con una determinación que no había sentido antes.
15:14Las dos juntas.
15:15Y cuando lo hagamos, vamos a construir algo mejor.
15:19No solo una relación de hermanas, sino una amistad verdadera.
15:22Sí, concuerda Pepa.
15:24Y voy a conocer realmente a Alejo.
15:27Voy a conocer al hombre que te ama tanto, que está dispuesto a mover montañas por ti.
15:31Y yo voy a conocer realmente a Martín.
15:34Dice Luisa.
15:35Voy a ser la hermana que celebra tu felicidad, en lugar de la que te recuerda constantemente los sacrificios del pasado.
15:41Se quedan así por largo rato, abrazadas en ese catre destartalado, en esa celda horrible, pero junta.
15:47Porque al final, lo único que realmente importa es que están juntas.
15:51Y esta vez, están juntas de verdad.
15:53Sin barreras emocionales.
15:55Sin resentimientos ocultos.
15:57¿Luisa?
15:58Pregunta Pepa después de un rato.
15:59¿Sí?
16:00Cuando salgamos de aquí, ¿podemos comer todo el pan que queramos?
16:04Como soñábamos cuando éramos niñas.
16:06Luisa ríe.
16:07Una risa genuina esta vez.
16:09Todo el pan que queramos.
16:10Te lo prometo.
16:11¿Y podemos tener una casa?
16:13Una casa pequeña, pero cálida, donde no tengamos que usar toda nuestra ropa para dormir en invierno.
16:18Una casa con una chimenea enorme.
16:20Añade Luisa entrando en el juego.
16:22Y con cortinas en las ventanas.
16:24Y con flores en el jardín.
16:25Continúa Pepa.
16:26Y con una cocina donde puedas hacer esos pasteles deliciosos que haces.
16:30Y donde tú puedas cocinar esos guisos que tanto le gustan a Alejo.
16:33Se quedan en silencio otra vez.
16:35Pero ahora, están soñando juntas.
16:37Planeando un futuro que ambas esperan, con todo su corazón, que puedan tener.
16:42Pase lo que pase, dice Luisa finalmente.
16:45Estoy agradecida de que estemos juntas en esto.
16:48Sé que suena extraño, estar agradecida en una celda.
16:51Pero lo estoy.
16:52Porque por primera vez en mucho tiempo, siento que te tengo de vuelta.
16:55A mi verdadera hermana.
16:57Y yo a ti, responde Pepa.
16:59A mi verdadera hermana.
17:00No a la mártir.
17:01No a la protectora.
17:02Solo a Luisa.
17:03Mi Luisa.
17:04Las lágrimas han secado finalmente.
17:06Dejando rastros alados en sus mejillas.
17:08El aire en la celda sigue siendo frío.
17:11El espacio sigue siendo pequeño.
17:13La situación sigue siendo desesperada.
17:15Pero algo ha cambiado fundamentalmente.
17:17La pared que había entre ellas, construida con años de palabras no dichas y resentimientos acumulados,
17:23se ha derrumbado.
17:24Y en su lugar, hay algo más fuerte.
17:26Hay comprensión.
17:28Hay perdón.
17:29Hay amor.
17:30Pues ahora tienes una compañera de celda.
17:32Las palabras de Luisa, dichas antes en rabia, ahora suenan diferentes en su mente.
17:37Porque sí, Pepa es su compañera de celda.
17:39Pero más que eso, es su hermana.
17:41Su verdadera hermana.
17:43Y juntas van a superar esto.
17:45De alguna manera.
17:46Juntas.
17:46El silencio que sigue es devastador.
17:49Ambas hermanas se miran, respirando con dificultad.
17:52Las lágrimas corriendo libremente por sus rostros.
17:55Pueden escuchar los latidos de sus propios corazones.
17:58El goteo constante de humedad en algún lugar de la celda.
18:01El murmullo lejano de otros prisioneros.
18:03Pepa se deja caer en el catre, enterrando su rostro entre las manos.
18:07Sus hombros se sacuden con sollozos silenciosos.
18:10Luisa se queda de pie.
18:11Apoyada contra la pared fría.
18:13Sintiendo como toda su fuerza se drena de su cuerpo.
18:17No debiste hacerlo.
18:18Dice Luisa finalmente.
18:19Su voz apenas un susurro.
18:21Tenías un futuro, Pepa.
18:23Tenías a Martín.
18:24Tenías una oportunidad de ser feliz.
18:26Y tú tenías a Alejo.
18:28Responde Pepa sin levantar la cabeza.
18:30Tenías un hombre que te ama.
18:32Una familia que te acogió.
18:33Una vida que valía la pena vivir.
18:35Crees que iba a quedarme de brazos cruzados viendo cómo te destruían.
18:39Pero ahora estamos las dos destruidas.
18:41Al menos, estamos juntas.
18:43Luisa siente como un sollozo escapa de su garganta.
18:46Se desliza por la pared hasta quedar sentada en el suelo frío.
18:49No quería esto para ti.
18:50Nunca quise esto para ti.
18:52Lo sé.
18:53Pepa finalmente levanta la cabeza.
18:55Sus ojos rojos e hinchados.
18:57Y yo tampoco quería esto para ti.
18:59Por eso lo hice.
19:00Las dos hermanas se miran a través de la penumbra de la celda.
19:03Y en ese momento, a pesar de la rabia, a pesar del dolor,
19:06a pesar de todas las palabras y dientes que se dijeron,
19:09comprenden algo fundamental.
19:11Se aman.
19:12A pesar de todo, se aman profundamente.
19:15Luisa se arrastra por el suelo hasta llegar al catre.
19:18Se sienta junto a Pepa.
19:20Y sin decir palabra, la abraza.
19:22Pepa se derrumba en sus brazos,
19:24llorando con la intensidad de quien ha estado guardando lágrimas durante años.
19:27Lo siento, susurra Pepa entre sollozos.
19:31Siento todo lo que dije.
19:32Yo también lo siento, responde Luisa, acariciando el cabello de su hermana como cuando eran niños.
19:38Tienes razón en muchas cosas.
19:40No he sido la hermana que merecías.
19:42Fuiste la mejor hermana que podías ser, dice Pepa, aferrándose a ella con fuerza.
19:46Y yo fui una desagradecida.
19:49No, no lo fuiste.
19:50Tenías derecho a tener tus propios sentimientos, tu propia vida.
19:54Y yo, yo siempre te traté como si fueras mi responsabilidad en lugar de mi hermana.
19:59Se quedan así por largo rato, abrazadas en ese catre destartalado, en esa celda horrible, pero juntas.
20:06Porque al final, lo único que realmente importa es que están juntas.
20:10Finalmente, Luisa se separa suavemente y mira a Pepa a los ojos.
20:14Ahora escúchame bien y escúchame con atención.
20:18Cuando venga el capitán, cuando nos interroguen, tú vas a retractarte de tu confesión.
20:23Vas a decirles que mentiste, que estabas desesperada, que querías salvarme.
20:28Y yo voy a mantener mi confesión.
20:30No, Pepa sacude la cabeza violentamente.
20:33No voy a dejarte sola en esto.
20:34No estaré sola.
20:36Adriana está investigando.
20:38Mercedes está buscando la manera de ayudarnos.
20:40Y Alejo.
20:41Su voz se quiebra al mencionar su nombre.
20:43Alejo hará lo que sea necesario para encontrar la verdad.
20:47¿Y mientras tanto?
20:48¿Mientras tanto qué, Luisa?
20:49¿Te quedas aquí pudriéndote por un crimen que no cometiste?
20:52Luisa sonríe tristemente.
20:54Si es necesario, sí.
20:56Pero tú no.
20:57Tú tienes que salir de aquí.
20:58Tienes que tener la vida que yo nunca pude tener.
21:01No es justo.
21:02La vida nunca es justa, hermanita.
21:04Eso lo aprendimos hace mucho tiempo.
21:06Un ruido en el pasillo las hace callar.
21:08Pasos firmes se acercan.
21:10Las dos hermanas se ponen tensas, preparándose para lo que sea que venga.
21:14Pero quien aparece no es el capitán.
21:16Es Adriana, la señora de la casa.
21:18Luisa, con su elegante vestido ahora cubierto de polvo del camino, su rostro pálido pero determinado, se acerca a los barrotes.
21:25Un guardia la acompaña, manteniendo una distancia respetuosa.
21:29Luisa, dice Adriana con voz suave pero firme.
21:32Necesito que me digas la verdad.
21:34Toda la verdad.
21:35Sé que no robaste esa talla.
21:37Sé que alguien te está incriminando.
21:39Y necesito saber quién.
21:40Luisa se levanta lentamente, acercándose a los barrotes.
21:43Mira a Adriana, a esta mujer que ha sido más que una señora para ella, que ha sido una amiga, una confidente, casi una hermana mayor.
21:51Y toma una decisión.
21:53Fue Tomás, dice finalmente, su voz clara y firme.
21:56Tomás robó la talla.
21:58Él me obligó a ayudarle.
21:59Me chantajeó con revelar mi pasado.
22:02Pero yo no tomé nada.
22:03Yo solo, yo solo mantuve a la gente distraída mientras él entraba a la habitación de la duquesa Victoria.
22:08Adriana cierra los ojos, sintiendo una mezcla de alivio y rabia.
22:12Alivio porque finalmente tiene un nombre.
22:14Una pista que seguir.
22:15Rabia porque ese maldito Tomás jugó con la vida de Luisa como si fuera un juguete.
22:20¿Y Pepa?
22:21Pregunta Adriana mirando a la hermana menor.
22:23Pepa no tiene nada que ver, dice Luisa rápidamente.
22:26Ella solo intentó protegerme.
22:28Su confesión es falsa.
22:29Adriana asiente.
22:31Lo sé.
22:32Y voy a sacarte de aquí, Luisa.
22:33A las dos.
22:34Te lo prometo.
22:35Doña Adriana, dice Luisa con lágrimas en los ojos.
22:38Dígale a Alejo que, que yo, él lo sabe.
22:41Interrumpe a Adriana con gentileza.
22:43Él sabe que lo amas y está desesperado por ayudarte.
22:46Pero necesitas dejar que te vea.
22:48Necesitas dejar que te apoye.
22:50Luisa niega con la cabeza.
22:52No puedo.
22:52No puedo dejar que me vea así.
22:54Ese hombre te ama con cada fibra de su ser, dice Adriana con firmeza.
22:59Y tú le estás rompiendo el corazón al rechazarlo.
23:02¿Crees que a él le importa cómo te veas?
23:05¿Crees que le importa dónde estés?
23:06Lo único que le importa es estar contigo.
23:10Las palabras penetran en el corazón de Luisa como flechas.
23:13Porque sabe que Adriana tiene razón.
23:15Sabe que está lastimando a Alejo innecesariamente.
23:18Pero el miedo es más fuerte que la razón.
23:20Tengo miedo.
23:21Admite finalmente en un susurro.
23:23Tengo miedo de que cuando me vea aquí, cuando vea lo que realmente soy, deje de amarme.
23:28Eso nunca va a pasar, asegura Adriana.
23:31Pero si sigues rechazándolo, si sigues alejándolo, eso sí lo destruirá.
23:36No el lugar donde estés, sino tu rechazo.
23:39Pepa toma la mano de su hermana.
23:41Adriana tiene razón, Luisa.
23:43Deja que te ayude.
23:44Deja que te ame.
23:45Luisa mira a su hermana, luego a Adriana, y finalmente asiente lentamente.
23:49Está bien.
23:50La próxima vez que venga, lo recibiré.
23:52Adriana sonríe.
23:53Bien.
23:54Ahora, necesito que seas fuerte un poco más.
23:57Voy a encontrar a Tomás.
23:58Y cuando lo haga, va a pagar por todo lo que les hizo.
24:01Con esas palabras de promesa y esperanza, Adriana se marcha, dejando a las dos hermanas
24:06solas nuevamente en la celda.
24:07¿Crees que realmente nos sacará de aquí?
24:10Pregunta Pepa en voz baja.
24:11Si alguien puede hacerlo, es ella.
24:14Responde Luisa con convicción.
24:16Adriana nunca rompe sus promesas.
24:18Las dos se sientan nuevamente en el catre.
24:20Esta vez más cerca, más unidas.
24:22La pelea las ha drenado emocionalmente, pero también las ha limpiado.
24:26Han dicho cosas que necesitaban decirse.
24:29Han llorado lágrimas que necesitaban ser derramadas.
24:32Luisa, dice Pepa después de un largo silencio.
24:35Cuando salgamos de aquí y vamos a salir, ¿podemos empezar de nuevo?
24:39¿Como hermanas de verdad?
24:40Luisa la abraza con fuerza.
24:42Ya somos hermanas de verdad, tonta.
24:45Pero sí, podemos empezar de nuevo.
24:47Sin secretos, sin resentimientos.
24:49Solo nosotras dos, apoyándonos mutuamente.
24:52Me gustaría eso.
24:53A mí también.
24:53Y en ese momento, a pesar de estar encerradas en la peor celda de Valle Salvaje,
24:58a pesar de estar acusadas de un crimen que no cometieron,
25:01las hermanas sienten algo que no habían sentido en mucho tiempo.
25:05Esperanza.
25:06Mientras tanto, en un rincón oscuro del pasillo,
25:09el capitán de la Santa Hermandad ha estado observando y escuchando todo.
25:13Y ahora, tiene información muy interesante.
25:16Un hombre, Tomás, se aleja silenciosamente, dirigiéndose a su oficina.
25:20Necesita enviar hombres a buscar a este tal Tomás.
25:23Porque si lo que dice Luisa es verdad, y él tiene la fuerte sensación de que lo es,
25:28entonces, tienen al verdadero ladrón.
25:31Y la justicia, aunque a veces lenta, siempre llega.
25:35Pero la tragedia de las hermanas en la celda,
25:37no es el único drama que se desarrolla hoy en Valle Salvaje.
25:40Porque mientras Pepa y Luisa luchan por sobrevivir en la prisión,
25:45en la casa pequeña se está gestando una alianza
25:47que podría cambiar el equilibrio de poder para siempre.
25:51Damaso, el fantasma del pasado que regresó para atormentar a Victoria y José Luis,
25:56está sentado en la sala de la casa pequeña con Mercedes.
25:59La duquesa de Miramar lo observa con cautela,
26:02como se observa a una serpiente venenosa,
26:04fascinada pero lista para atacar si es necesario.
26:07Damaso es un hombre apuesto.
26:08De eso no hay duda. Alto, de cabello oscuro,
26:12con algunas canas que le dan un aire distinguido.
26:15Ojos penetrantes que parecen ver a través de las personas.
26:18Viste con elegancia, aunque su ropa muestra señales del largo viaje que ha hecho para llegar hasta aquí.
26:24Duquesa Mercedes comienza Damaso con una voz suave pero cargada de intención.
26:29No he venido aquí solo para atormentar a mi querida esposa Victoria y a su...
26:33¿amante? ¿esposo?
26:35¿Cómo lo llamamos ahora?
26:36Mercedes sonríe fríamente.
26:37Yo lo llamo usurpador, porque eso es lo que José Luis ha sido siempre.
26:42Exactamente.
26:43Damaso se inclina hacia adelante, sus ojos brillando con intensidad.
26:47Y es por eso que necesito su ayuda.
26:49O más bien, usted necesita la mía.
26:51¿Mi ayuda?
26:52Mercedes arquea una ceja elegantemente.
26:54¿Para qué exactamente?
26:55Para destruirlos.
26:57Las palabras son simple, directas, devastadoras.
27:00Para quitarles todo lo que tienen.
27:02Su poder, su riqueza, su posición.
27:04Quiero verlos caer tan bajo que nunca puedan levantarse.
27:08Mercedes lo estudia cuidadosamente.
27:10Venganza, entonces.
27:11¿Es eso lo que busca?
27:12Venganza, justicia, llámelo como quiera.
27:16Responde Damaso encogiéndose de hombros.
27:18Victoria me abandonó.
27:19Me dejó creer que estaba muerto mientras ella se casaba con ese...
27:22Ese tirano me robó años de mi vida.
27:25Y José Luis, bueno, él sabía que yo existía.
27:28Y aún así se casó con mi esposa.
27:30Los dos me traicionaron.
27:31Y los dos van a pagar.
27:33Sus razones son personales.
27:35Observa Mercedes.
27:36¿Por qué debería involucrarme yo?
27:38Porque usted también tiene sus razones.
27:40Dice Damaso con una sonrisa conocedora.
27:42Su hermana Pilara.
27:44Victoria la envenenó.
27:45¿No es cierto?
27:46El rostro de Mercedes se endurece.
27:47¿Cómo sabe usted eso?
27:49Tengo mis fuentes.
27:50Y también sé que José Luis ha sido un tirano en este valle durante demasiado tiempo.
27:54Ha abusado de su poder.
27:56Ha destruido vidas.
27:57Ha actuado como si fuera un dios.
27:59Es hora de que alguien lo ponga en su lugar.
28:01Mercedes permanece en silencio por un momento, considerando.
28:04Es verdad que odia a Victoria con cada fibra de su ser.
28:07Es verdad que desea ver a José Luis despojado de su arrogancia.
28:10Pero aliarse con este hombre, un hombre que claramente tiene sus propios motivos oscuros,
28:15¿es realmente lo correcto?
28:17¿Y qué propone exactamente?
28:18Pregunta finalmente.
28:20Una sociedad.
28:22Damaso se recuesta en su asiento, completamente relajado ahora que tiene la atención de Mercedes.
28:27Quiero poner todo mi dinero al servicio de esta casa.
28:30Juntos podríamos conseguir grandes logros.
28:33Quiero que seamos socios.
28:34¿Socios?
28:35Mercedes repite la palabra con escepticismo.
28:37¿Y qué gana usted con esto?
28:38¿Satisfacción?
28:39Responde Damaso simplemente.
28:41Ver a Victoria perder todo lo que construyó sobre mentiras.
28:44Ver a José Luis reducido a nada.
28:46Y además, añade con un brillo calculador en los ojos,
28:49tengo entendido que usted controla ahora gran parte de las tierras de este valle.
28:53Con mi capital y sus recursos, podríamos construir un imperio que haría parecer insignificante el poder de los galves de Aguirre.
29:01Es tentador.
29:02Mercedes debe admitirlo.
29:03Con el dinero de Damaso, podría expandir sus operaciones.
29:06Podría consolidar su poder hasta el punto en que José Luis no sería más que una nota al pie en la historia de Valle Salvaje.
29:14Pero hay algo que no encaja.
29:16¿Por qué yo?
29:16Pregunta Mercedes directamente.
29:18¿Por qué no simplemente usar su dinero para destruir a Victoria y José Luis por su cuenta?
29:23Porque usted conoce este lugar.
29:25Responde Damaso.
29:26Sus ojos estudiando cada reacción de Mercedes.
29:29Conoce a su gente.
29:30Conoce sus secretos.
29:31Conoce cómo funciona el poder aquí.
29:34Conoce quién debe a quién.
29:35Quién guarda rencores.
29:37Quién puede ser comprado.
29:39Y quién no.
29:40Yo soy un extraño que acaba de regresar después de años de ausencia.
29:43Necesito su conocimiento.
29:44Sus conexiones.
29:45Su legitimidad como duquesa de Miramar.
29:47Y usted, mi querida Mercedes, necesita mi dinero.
29:51Mucho dinero.
29:52Es lógico.
29:53Dolorosamente lógico.
29:55Y Mercedes es una mujer práctica.
29:57No permite que las emociones nublen su juicio.
30:00Esta alianza podría ser exactamente lo que necesita
30:03para asegurar el futuro de la casa pequeña.
30:05Para garantizar que nunca más estará bajo el talón de los galves de Aguirre.
30:10Para vengar a Pilara de una vez por todas.
30:13¿Y Victoria?
30:14Pregunta Mercedes.
30:15Su voz tomando un tono más calculador.
30:17¿Qué planea hacer con ella específicamente?
30:20Porque si vamos a ser socios en esto,
30:22necesito conocer todos los detalles de su plan.
30:25Damaso sonríe.
30:26Y es una sonrisa que no llega a sus ojos.
30:28Es la sonrisa de un depredador que ha acorralado a su presa.
30:32Victoria es técnicamente todavía mi esposa.
30:34Su matrimonio con José Luis es nulo e inválido ante la ley de Dios y de los hombres.
30:39Lo cual significa que todo lo que ella adquirió durante ese matrimonio fraudulento
30:43me pertenece legalmente a mí.
30:45Interesante.
30:46Murmura Mercedes, su mente ya trabajando en las implicaciones.
30:50Muy interesante.
30:51Eso incluiría su posición como duquesa de Valle Salvaje, sus joyas, sus propiedades personales.
30:57Todo, confirma Damaso con satisfacción.
31:00Cada vestido, cada brazalete, cada moneda que ha tocado desde que se casó con José Luis
31:05es legalmente mío.
31:07Y tengo abogados listos para presentar los documentos que lo prueban.
31:10Documentos que incluyen nuestro certificado de matrimonio original.
31:14Testimonios de personas que nos vieron casarnos.
31:16Evidencia de que nunca hubo divorcio ni anulación.
31:19Mercedes se inclina hacia adelante, ahora completamente enganchada en la conversación.
31:24Pero José Luis peleará esto.
31:26Él tiene influencia en la corte.
31:27Tiene jueces que le deben favores.
31:29¿Qué es exactamente por eso que la necesito?
31:32Responde Damaso.
31:33Necesito que use las conexiones de su esposo Bernardo para contrarrestar esa influencia.
31:38Necesito que hable con los nobles que José Luis ha ofendido a lo largo de los años.
31:42Y créame, son muchos.
31:43Necesito que construyamos una red de apoyo tan fuerte que cuando golpeemos, José Luis no tenga donde esconderse.
31:51Mi esposo está ausente, dice Mercedes cautelosamente.
31:54Pero tiene razón en que sus contactos permanecen.
31:57Y yo misma he cultivado mis propias alianzas.
32:00Hay familias nobles que me deben favores.
32:02Merciantes que dependen de mis contratos.
32:04Funcionarios que he ayudado discretamente en el pasado.
32:07Perfecto.
32:08Damaso se frota las manos con anticipación.
32:09Entonces, aquí está lo que propongo como primer paso.
32:13Necesitamos documentar cada crimen que Victoria y José Luis han cometido.
32:18Cada uno.
32:19Asesinatos, conspiraciones, fraudes, abusos de poder, todo.
32:24Eso llevará tiempo, observa Mercedes.
32:26Y requerirá que convenzamos a testigos de hablar.
32:29Muchos tienen miedo de la venganza de José Luis.
32:32Por eso empezaremos ofreciendo protección, explica Damaso.
32:35Cualquier persona que testifique contra ellos, recibirá nuestra protección completa.
32:40Si son sirvientes, les ofreceremos mejores posiciones en nuestras casas.
32:44Si son nobles menores, les ofreceremos alianzas matrimoniales ventajosas.
32:48Si son comerciantes, les daremos contratos exclusivos.
32:52Mercedes asiente lentamente.
32:54Impresionada por la exhaustividad del plan.
32:56Está pensando en todo.
32:58He tenido mucho tiempo para planear esto, dice Damaso con una sonrisa amarga.
33:02Años de creer que mi esposa me lloraba, solo para descubrir que estaba construyendo una nueva vida sin mí.
33:08Años de imaginar mi venganza.
33:10Y ahora finalmente, tengo la oportunidad de ejecutarla.
33:14Y hay más, continúa Damaso, inclinándose conspiratorialmente.
33:18Tengo información que podría enviar a Victoria a la prisión por el resto de su vida.
33:22Información que he estado recopilando meticulosamente.
33:24¿El asesinato de Pilara?
33:26Pregunta Mercedes, su corazón acelerándose.
33:29Esta es la información que más le importa.
33:31La venganza que más desea.
33:33Entre otras cosas, Damaso saca un pequeño fajo de papeles de su chaqueta.
33:37Tengo aquí testimonios de tres sirvientes que estuvieron en la casa grande la noche que murió Pilara.
33:42Testimonios que declaran haber visto a Victoria manipulando la bebida de su hermana.
33:46Testimonios que describen el veneno que usó.
33:49Cómo lo obtuvo.
33:50Cómo lo administró.
33:52Mercedes toma los papeles con manos temblorosas.
33:55Por fin, después de tanto tiempo, tiene evidencia real del crimen que quitó a su hermana.
33:59Lágrimas amenazan con caer, pero las contiene.
34:03Ahora no es momento para llorar.
34:05Ahora es momento para actuar.
34:07¿Estos testigos están dispuestos a declarar públicamente?
34:10Pregunta.
34:11¿Con la protección adecuada?
34:12Sí.
34:13Responde Damaso.
34:14Uno de ellos ya no trabaja en Valle Salvaje y está seguro en mis tierras.
34:18Los otros dos necesitarán ser trasladados antes de que hagamos pública la acusación.
34:23Puedo arreglar eso, dice Mercedes con determinación.
34:27Puedo darles posiciones en propiedades que controlo fuera del valle.
34:30Lugares donde José Luis no tiene influencia.
34:33Excelente.
34:34Damaso sonríe.
34:35Entonces, estamos de acuerdo en el objetivo principal.
34:38Exponer a Victoria como asesina.
34:40Y a José Luis como su cómplice en encubrir el crimen.
34:43Absolutamente.
34:44Mercedes aprieta los papeles contra su pecho.
34:46Mi hermana merece justicia.
34:48Y finalmente, la tendrá.
34:50Pero hay que ser estratégicos sobre el timing, advierte Damaso.
34:54No podemos simplemente presentar las acusaciones mañana.
34:57Primero necesitamos asegurar nuestras alianzas, fortalecer nuestras posiciones, cerrar cualquier
35:02escape que Victoria o José Luis puedan usar.
35:05Mercedes asiente.
35:06Tiene razón.
35:07José Luis podría intentar usar su amistad con el capitán de la Santa Hermandad para
35:12interferir con la investigación.
35:14Por eso necesitamos ir más arriba, dice Damaso.
35:17Necesitamos llevar esto directamente a la capital.
35:19A autoridades que estén fuera del alcance de José Luis.
35:23Necesitamos que la corona misma ordene la investigación.
35:26Eso requerirá influencia considerable.
35:28Observa Mercedes.
35:29Que es donde entran las conexiones de su esposo Bernardo, responde Damaso.
35:33Él tiene, según mis informes, un primo que sirve en la Corte Real.
35:38Un primo con considerable influencia en asuntos de justicia.
35:41Mercedes se sorprende.
35:42Ha investigado exhaustivamente.
35:45No dejo nada al azar, dice Damaso simplemente.
35:48Cuando uno busca venganza, debe asegurarse de que sea completa y definitiva.
35:53No puede haber errores.
35:54No puede haber escapatorias.
35:56Entonces, resumiendo, dice Mercedes, organizando mentalmente toda la información.
36:01El plan es, primero, asegurar a los testigos y recopilar toda la evidencia posible.
36:06Segundo, construir una red de aliados que nos apoyen públicamente.
36:10Tercero, usar las conexiones de Bernardo para escalar esto a nivel de la corona.
36:14Y cuarto, golpear con todo cuando estemos completamente preparados.
36:19Exactamente, confirma Damaso.
36:21Y mientras tanto, usamos mi capital para expandir el poder económico de la casa pequeña,
36:26hasta el punto en que seamos indispensables para la economía del valle.
36:29De esa forma, cuando caigan Victoria y José Luis, nosotros estaremos posicionados para llenar el vacío de poder.
36:37Mercedes se pone de pie y camina hacia la ventana, mirando hacia la casa grande.
36:41Puede ver las torres, las chimeneas, el símbolo del poder que José Luis ha ejercido durante tanto tiempo.
36:47Poder construido sobre mentiras, crímenes y sangre inocente.
36:51Poder que está a punto de ser desafiado como nunca antes.
36:54Hay algo más que debes saber, dice Mercedes sin voltear.
36:57Adriana Salcedo, la nuera de José Luis, tiene evidencia de que Pedrito, su hermano menor,
37:03es el verdadero dueño legal de todas las tierras de Valle Salvaje.
37:07José Luis no es más que un ocupante ilegal.
37:10Damaso se levanta bruscamente.
37:11¿Qué? ¿Cómo es eso posible?
37:13Mercedes se vuelve hacia él.
37:15El padre de Adriana, Evaristo Salcedo, compró todas las propiedades para saldar las deudas de José Luis.
37:20Las tierras, la casa grande, todo, legalmente pertenece a Pedrito Salcedo.
37:25Damaso comienza a reír.
37:27Es una risa genuina, llena de deleite malicioso.
37:30Esto es perfecto.
37:31Mejor de lo que podría haber imaginado.
37:33José Luis no solo es un adúltero y encubridor de asesinatos, sino que también es un usurpador de tierras.
37:39¿Cómo usamos esta información?
37:41Pregunta Mercedes.
37:42Con mucho cuidado, responde Damaso, su mente claramente trabajando a toda velocidad.
37:47Esta es nuestra carta definitiva.
37:48El golpe final que asegurará que José Luis nunca se recupere.
37:52Pero debemos esperar el momento perfecto para jugarla.
37:55Adriana planea eventualmente hacer pública esta información, advierte Mercedes, para asegurar el futuro de Pedrito.
38:02Entonces necesitamos coordinarnos con ella, dice Damaso.
38:06Necesitamos asegurarnos de que cuando se revele esta verdad, sea en el contexto de todas las otras acusaciones.
38:12De esa forma, José Luis no tendrá ninguna defensa.
38:15Será destruido completamente en todos los frentes, legal, moral, social y económico.
38:21Mercedes sonríe con satisfacción.
38:23Me gusta como piensa Damaso.
38:25Y todavía hay más que discutir, dice Damaso, sentándose nuevamente.
38:29Necesitamos hablar sobre la distribución de poder después de que caigan Victoria y José Luis.
38:33Necesitamos tener un plan claro para evitar un vacío de poder que podría llevar al caos.
38:38¿Qué propone?
38:39Pregunta Mercedes, volviendo a sentarse frente a él.
38:42Propongo que usted y su esposo Bernardo se conviertan en los nuevos señores de Valle Salvaje, dice Damaso directamente.
38:49Ustedes ya son duques de Miramar.
38:51Ya tienen legitimidad nobiliaria.
38:53Ya controlan gran parte de la economía local.
38:56Sería una transición natural.
38:58Mercedes lo considera.
38:59¿Y usted?
39:00¿Qué papel jugaría en esta nueva estructura de poder?
39:02Yo sería su socio silencioso, responde Damaso.
39:06No tengo interés en gobernar Valle Salvaje.
39:08Mi venganza es personal, no política.
39:11Una vez que Victoria esté en prisión y José Luis esté arruinado, mi trabajo aquí estará completo.
39:17Pero mantendría mis inversiones económicas en la región, por supuesto.
39:20Seguiríamos siendo socios comerciales.
39:22Y el 35% de las propiedades recuperadas que mencionó, añade Mercedes.
39:27Exacto.
39:28Esa sería mi compensación por el capital invertido y los riesgos asumidos.
39:32Mercedes extiende su mano.
39:34Entonces creo que tenemos los términos de nuestra sociedad claramente establecidos.
39:38Damaso estrecha su mano firmemente.
39:40Sellamos este pacto entonces.
39:42Juntos vamos a destruir a Victoria y José Luis.
39:45Juntos vamos a traer justicia a Valle Salvaje.
39:48Justicia, repite Mercedes, saboreando la palabra.
39:51Y venganza.
39:52Dos caras de la misma moneda, dice Damaso con una sonrisa.
39:55Los dos conspiradores se miran.
39:57Y en ese momento, el destino de Victoria y José Luis queda sellado.
40:01No lo saben todavía.
40:02Pero su reino de terror está llegando a su fin.
40:05Las fuerzas se están alineando contra ellos.
40:07Y esta vez, no habrá escape.
40:09Mientras esta alianza oscura se forma en la casa pequeña.
40:13En la casa grande se desarrollan otros dramas igualmente intensos.
40:17Alejo está en su habitación.
40:19Completamente destrozado.
40:20Ha intentado ver a Luisa tres veces ya.
40:23Y las tres veces le han dicho lo mismo.
40:25Ella no quiere verlo.
40:26No quiere sus visitas.
40:28Ha ordenado explícitamente que no lo dejen pasar.
40:31Leonardo está con él, intentando consolarlo.
40:33Pero las palabras suenan huecas, incluso para sus propios oídos.
40:37Sacar a Luisa de esa celda lo considero imposible.
40:40Dice Alejo con voz rota, hundiendo su rostro entre sus manos.
40:44La Santa Hermandad tiene evidencia.
40:47Encontraron la talla en su habitación.
40:49Y ella confesó.
40:51¿Cómo puedo luchar contra eso?
40:53Leonardo pone una mano en el hombro de su amigo.
40:55¿Tan peliaguda es la situación?
40:57Me temo que sí.
40:58Alejo levanta la cabeza.
41:00Y Leonardo puede ver las lágrimas que corren libremente por su rostro.
41:03Y lo peor no es la evidencia.
41:05Lo peor es que ella me rechaza.
41:07¿Por qué, Leonardo?
41:08¿Por qué no quiere verme?
41:09Leonardo no sabe qué responder.
41:11Él tampoco entiende la decisión de Luisa.
41:13Si estuviera en su lugar, si fuera Bárbara la que estuviera en esa celda,
41:18él haría cualquier cosa.
41:20Absolutamente cualquier cosa por verla.
41:22Por estar con ella, aunque fuera solo unos minutos.
41:25Tal vez tiene miedo, sugiere Leonardo.
41:28Miedo de que la veas en esa situación.
41:30Miedo de que cambies de opinión sobre ella.
41:33¿Cambiar de opinión?
41:34Alejo suena genuinamente sorprendido.
41:36¿Cómo podría cambiar de opinión?
41:38La amo.
41:39La amaré siempre.
41:40Sin importar dónde esté.
41:41Sin importar de qué la acusen.
41:43Entonces debes decírselo, dice Leonardo con firmeza.
41:46Tienes que encontrar la manera de hacerle saber que tu amor es incondicional.
41:50Alejo asiente lentamente.
41:51Tienes razón.
41:52No voy a rendirme.
41:54Iré mañana otra vez.
41:55Y pasado mañana.
41:56Y el día siguiente.
41:57Iré todos los días hasta que me reciba.
42:00Ese es el espíritu, dice Leonardo, intentando animar a su amigo.
42:03Pero incluso mientras lo dice, Leonardo siente el peso de su propia hipocresía.
42:08Porque él está lidiando con su propio dilema del corazón.
42:11Uno que amenaza con destruir la felicidad de dos mujeres que ama, aunque de formas diferentes.
42:17Más tarde ese mismo día, Leonardo se encuentra en una habitación privada con Irene.
42:21Ella está curándole una herida en la mano.
42:24Una pequeña cortada que se hizo trabajando en el establo.
42:26Es solo una excusa.
42:28Ambos lo saben.
42:29Una excusa para estar cerca.
42:31Para tener unos momentos a solas.
42:33Señorita curandera, bromea Leonardo, intentando aligerar el ambiente.
42:37Irene sonríe mientras examina la herida.
42:39Veo que tan solo son dolores.
42:41¿Cree que sobreviviré?
42:42Diría yo que sí.
42:44Sus miradas se encuentran.
42:45Y el aire entre ellos se carga de tensión.
42:48Leonardo puede sentir el calor que emana de ella.
42:50Puede oler el suave perfume de lavanda que siempre usa.
42:53Está tan cerca que podría besarla solo inclinándose unos centímetros.
42:58Pero no lo hace.
42:59Porque piensa en Bárbara.
43:00En su Bárbara que confía en él.
43:02Que lo ama con todo su corazón.
43:05Irene termina de vendar la mano y se aleja, rompiendo el momento.
43:08Deberías tener más cuidado, Leonardo.
43:10Estos pequeños accidentes pueden infectarse.
43:13Tendré más cuidado.
43:14Promete Leonardo.
43:15Pero ambos saben que no está hablando solo de las heridas físicas.
43:18Irene se sienta en una silla cercana, jugando nerviosamente con sus manos.
43:22Leonardo, sobre lo que pasó durante nuestro viaje.
43:25No podemos hablar de eso.
43:27Interrumpe Leonardo rápidamente.
43:28No podemos, Irene.
43:30No está bien.
43:31Lo sé.
43:31Irene baja la mirada.
43:33Pero necesito decir algo.
43:34Y después nunca más lo mencionaré.
43:36Lo prometo.
43:37Leonardo asiente lentamente.
43:39Está bien.
43:40Pasamos unos días realmente divertidos.
43:42Disfrutamos.
43:43Las palabras salen en un susurro.
43:45Y yo...
43:46Yo me sentí más viva durante ese viaje de lo que me he sentido en mucho tiempo.
43:49Leonardo cierra los ojos, sintiendo el dolor en su pecho.
43:53Yo también, Irene.
43:54Y ese es el problema.
43:56Por lo que veo, te avergüenzas de ello.
43:58Las palabras de su hermano Rafael resuenan en su mente.
44:01Porque sí, se avergüenza.
44:03Se avergüenza de haber sentido lo que sintió durante ese viaje.
44:06Se avergüenza de haber deseado los momentos a solas con Irene.
44:10Se avergüenza de haber pensado, aunque fuera por un segundo,
44:13que tal vez podría haber algo más entre ellos.
44:16No me avergüenzo de ti, aclara Leonardo rápidamente.
44:20Nunca podría, pero me avergüenzo de mí mismo, de lo que sentí.
44:24Porque amo a Bárbara, Irene.
44:25La amo de verdad.
44:27Lo sé, dice Irene.
44:28Y hay lágrimas en sus ojos.
44:30Y ella te ama a ti.
44:31Y yo, yo solo estoy confundiendo las cosas.
44:34Leonardo se levanta y se acerca a ella,
44:36arrodillándose frente a su silla para mirarla a los ojos.
44:39Irene, tú eres importante para mí.
44:41Mucho.
44:42Pero no de la manera que ambos sabemos que desearías.
44:44Y no porque no seas maravillosa, porque lo eres.
44:47Sino porque mi corazón ya le pertenece a alguien más.
44:50Irene asiente, limpiándose las lágrimas.
44:52Lo entiendo.
44:53Y voy a respetar eso, Leonardo.
44:55Voy a alejarme.
44:56Voy a darte el espacio que necesitas para ser feliz con Bárbara.
45:00No quiero que te alejes, dice Leonardo con sinceridad.
45:03Eres mi amiga, Irene.
45:04Una de mis mejores amigas.
45:05Pero necesitamos establecer límites.
45:07Por el bien de todos.
45:08Tienes razón.
45:09Irene respira profundamente, componiendo.
45:11Entonces, a partir de ahora, solo amigos.
45:15Nada más.
45:15Leonardo toma sus manos.
45:17Solo amigo.
45:18Nada más.
45:19Sellan su acuerdo con un apretón de manos.
45:21Pero ambos saben que será difícil.
45:23Porque los sentimientos no desaparecen solo porque uno decida ignorarlos.
45:26Pero al menos, están intentando hacer lo correcto.
45:29Cuando Leonardo se va, Irene se queda sola en la habitación, sintiendo cómo su corazón se rompe en silencio.
45:36Ha perdido a Leonardo antes de siquiera tenerlo realmente.
45:39Y ahora tiene que encontrar la manera de seguir adelante, de verlo feliz con Bárbara, de sonreír y pretender que no duele.
45:46Pero duele.
45:47Dios, cómo duele.
45:48Mientras tanto, en otra parte de la casa, Matilde está teniendo su propia crisis.
45:53Mercedes la encuentra en su habitación, trabajando en un hermoso vestido de novia.
45:58Las telas son exquisitas, claramente costosas, y el diseño es elaborado y elegante.
46:03¿Está confeccionando un vestido?
46:05Pregunta Mercedes con curiosidad.
46:07Sí, sí.
46:08Así es, responde Matilde, intentando sonar casual, aunque su corazón late con fuerza.
46:13Mercedes examina la tela más de cerca.
46:15Las telas parecen elegidas para un vestido de novia.
46:18¿Se casa alguien?
46:19Matilde duda solo un segundo antes de responder.
46:22Sí.
46:23Mercedes arquea una ceja.
46:24Y puedo preguntar quién es la afortunada novia.
46:27Matilde siente cómo el pánico comienza a crecer en su pecho.
46:30No puede decirle a Mercedes que el vestido es para Bárbara, un encargo especial que la joven le hizo.
46:35No todavía.
46:36Es un secreto, algo que Bárbara quiere mantener privado hasta que esté lista para revelarlo.
46:41Es...
46:42Es una sorpresa, dice finalmente.
46:44La novia quiere mantenerlo en secreto hasta el momento apropiado.
46:47Mercedes sonríe, aunque hay algo calculador en esa sonrisa.
46:51Ya veo.
46:51Bueno, es un trabajo hermoso, Matilde.
46:54Estoy segura de que quien sea que se lo ponga, se verá radiante.
46:58Gracias, doña Mercedes.
47:00Cuando Mercedes se va, Matilde exhala con alivio.
47:03Pero su alivio es de corta duración, porque apenas unos minutos después, Bárbara entra corriendo a la habitación.
47:09Su rostro pálido de preocupación.
47:11Ayer vino mi tía Victoria de visita justo cuando Don Atanasio se marchaba, dice Bárbara sin preámbulo.
47:17Matilde siente cómo su estómago se hunde.
47:19¿Cree que sabe algo?
47:21No lo sé, admite Bárbara.
47:23Pero la forma en que lo miró, la forma en que me miró a mí y después...
47:26Matilde, creo que está sospechando de tu relación con él.
47:30Esto es un desastre.
47:30Si Victoria descubre la relación secreta entre Matilde y Atanasio, podría usar esa información para causar problemas.
47:37Podría chantajear a Matilde.
47:39Podría usar a Atanasio como peón en sus juegos de poder.
47:42Tenemos que ser más cuidadosos, dice Matilde con firmeza.
47:46Atanasio y yo no podemos vernos en la casa pequeña por un tiempo.
47:49Es demasiado arriesgado.
47:51Pero Victoria también va a la casa grande, señala Bárbara.
47:54¿Dónde podrán encontrarse?
47:56Es una buena pregunta.
47:57Y Matilde no tiene una buena respuesta.
48:00Ya encontraremos la manera, dice finalmente, aunque no está segura de creerlo ella misma.
48:05Más tarde ese día, Victoria efectivamente aparece en la casa pequeña.
48:08Y su primera parada es la habitación de Matilde.
48:11¿Qué telas tan hermosas, Matilde?
48:13Dice Victoria, su voz dulce como la miel, pero con un filo de veneno.
48:17Y se antojan de buena calidad.
48:19¿De dónde las has sacado?
48:20Matilde siente cómo el miedo se apodera de ella.
48:23Fueron...
48:24Fueron un regalo.
48:25¿Un regalo?
48:26Victoria sonríe.
48:27Y es una sonrisa de depredador.
48:29¿De quién?
48:30¿De algún admirador secreto, tal vez?
48:32Solo un amigo generoso.
48:33Ya veo.
48:34Victoria se pasea por la habitación, tocando las cosas de Matilde con fingida casualidad.
48:39¿Y este amigo generoso no tendría por casualidad el nombre de Atanasio?
48:43El corazón de Matilde se detiene.
48:45Yo...
48:46No sé de qué habla, doña Victoria.
48:48Oh, creo que sí lo sabes, dice Victoria, volviéndose para mirarla directamente.
48:52He visto cómo lo miras.
48:54He visto cómo él te mira.
48:55Y ayer lo vi saliendo de esta casa, a una hora bastante inusual.
49:00Matilde no sabe qué decir.
49:01Negar parecería demasiado obvio, pero admitir sería darle a Victoria exactamente lo que quiere.
49:07Información que puede usar en su contra.
49:09Don Atanasio es el secretario de su esposo, dice finalmente Matilde, eligiendo sus palabras cuidadosamente.
49:15Tiene asuntos que atender en toda la propiedad, incluyendo la casa pequeña.
49:20Por supuesto, dice Victoria con ese tono que indica que no cree ni una palabra.
49:25Pero ten cuidado, querida Matilde.
49:27Los secretos en Valle Salvaje tienen la mala costumbre de salir a la luz.
49:31Y cuando lo hacen, las consecuencias pueden ser devastadoras.
49:34Con esa amenaza velada, Victoria se va, dejando a Matilde temblando de miedo y rabia.
49:41En la casa grande, Rafael está lidiando con sus propias dudas y conflictos.
49:45Se encuentra con Adriana en su habitación.
49:47Ella puede ver la preocupación en su rostro, la tensión en sus hombros.
49:51Estás empezando a dudar, ¿verdad?
49:54Pregunta Adriana suavemente.
49:56Rafael suspira profundamente.
49:58La talla la encontraron en su alcoba.
49:59Pero no solo eso.
50:01Ella misma confesó que fue la sola culpable del robo.
50:03No, Adriana se acerca a él, tomando sus manos entre las suyas.
50:07Rafael, tú conoces a Luisa.
50:09La has visto con Alejo.
50:11Has visto cómo cuida a su hermana.
50:12Cómo trabaja honestamente.
50:14¿Realmente crees que es capaz de robar?
50:16No quiero creerlo, admite Rafael.
50:18Pero la evidencia, la evidencia puede ser plantada, interrumpe Adriana.
50:23Alguien podría haber puesto esa talla en su habitación.
50:25Y su confesión.
50:27¿No te parece extraño que alguien que es inocente confesaría tan rápidamente?
50:31Rafael la mira con intensidad.
50:32¿Qué estás diciendo?
50:34Estoy diciendo que creo que Luisa está protegiendo a alguien.
50:37O tal vez fue chantajeada para confesar.
50:39Pero mi instinto me dice que ella no robó esa talla.
50:42¿Y quién lo hizo entonces?
50:44No lo sé todavía, admite Adriana.
50:46Pero voy a averiguarlo.
50:47Por Luisa.
50:48Por Alejo.
50:49Por la justicia.
50:50Rafael la abraza.
50:52Sintiendo una oleada de amor por esta mujer increíble.
50:55¿Qué haría yo sin ti?
50:56Afortunadamente, nunca tendrás que averiguarlo, responde Adriana con una pequeña sonrisa.
51:01Pero su sonrisa se desvanece cuando piensa en Luisa.
51:04En esa celda fría.
51:05En Pepa sacrificándose por su hermana.
51:07En la injusticia de todo esto.
51:09Y se hace una promesa silenciosa.
51:11Va a encontrar al verdadero culpable.
51:14Cueste lo que cueste.
51:15Mientras el día avanza hacia la noche, todos los personajes de Valle Salvaje están lidiando
51:21con sus propios dramas y decisiones.
51:23Mercedes está en su despacho, revisando papeles.
51:25Pero su mente está en otra parte.
51:28¿Está pensando en la alianza que acaba de formar con Damaso?
51:31¿Hizo lo correcto?
51:32¿O acaba de hacer un pacto con el diablo?
51:34Bernardo está ausente.
51:36Lo cual hace que esta decisión sea aún más difícil.
51:40Normalmente consultaría con él.
51:41Confiaría en su consejo.
51:43Pero ahora está sola.
51:44Tomando decisiones que podrían afectar el futuro de su familia por generaciones.
51:48Un golpe en la puerta la saca de sus pensamientos.
51:51Es Adriana.
51:51Mercedes, necesito hablar contigo sobre Luisa.
51:55Dice Adriana sin preámbulo.
51:56Las dos mujeres se sientan.
51:58Y Adriana le cuenta todo lo que Luisa le reveló en la prisión.
52:01El nombre de Tomás.
52:02El chantaje.
52:03El robo.
52:04Mercedes escucha con atención.
52:05Su mente ya trabajando en un plan.
52:07Entonces necesitamos encontrar a este Tomás y hacerlo confesar.
52:12Exactamente.
52:13Dice Adriana.
52:14Pero no tengo idea de dónde podría estar.
52:16Alejo lo expulsó del valle hace días.
52:18Pero no puede haber ido muy lejos.
52:20Razona Mercedes.
52:21Especialmente si todavía tiene la talla.
52:23Necesitará venderla.
52:25Y para eso necesita encontrar un comprador.
52:27¿Y dónde encontraría un comprador?
52:29Mercedes sonríe.
52:30Conozco algunos lugares.
52:31Déjamelo a mí.
52:33Adriana siente una oleada de esperanza.
52:35Si alguien puede encontrar a Tomás, es Mercedes.
52:38La duquesa de Miramar tiene conexiones en todos lados.
52:41Recursos que Adriana no puede ni imaginar.
52:44Gracias, Mercedes.
52:45Dice Adriana con sinceridad.
52:46Esto significa mucho para mí.
52:48Luisa es parte de nuestra familia.
52:50Responde Mercedes simplemente.
52:52Y protegemos a los nuestro.
52:53Mientras Adriana se va, Mercedes se queda pensando.
52:56Encontrar a Tomás será el primer paso.
52:59Pero también necesita empezar a trabajar en su plan con damas.
53:02Necesita empezar a reunir evidencia contra Victoria.
53:05Necesita preparar el terreno para la caída de los galves de Aguirre.
53:08Es un trabajo peligroso.
53:09Pero Mercedes nunca ha sido una mujer que rehúya el peligro.
53:13En la prisión, la noche cae sobre las dos hermanas.
53:17Pepa y Luisa están acurrucadas juntas en el catre, tratando de mantenerse calientes en la celda fría.
53:23Han hablado durante horas, compartiendo recuerdos de su infancia, de los tiempos antes de que todo se volviera tan complicado.
53:29¿Recuerdas cuando vivíamos en aquel pequeño cuarto sobre la panadería?
53:33Pregunta Pepa suavemente.
53:35¿Cómo olvidarlo?
53:36Responde Luisa con una sonrisa triste.
53:39Hacía tanto frío en invierno que teníamos que dormir con toda la ropa puesta.
53:43Pero el olor del pan recién horneado por las mañanas.
53:46Pepa suspira.
53:46Eso era lo mejor.
53:48Aunque nunca pudiéramos permitirnos comprarlo, añade Luisa.
53:52Cierto, pero soñábamos con él.
53:54Planeábamos cómo algún día seríamos ricas y comeríamos todo el pan que quisiéramos.
53:59Las dos ríen suavemente.
54:01El sonido extrañamente fuera de lugar en la sombría celda.
54:04¿Crees que alguna vez saldremos de aquí?
54:06Pregunta Pepa después de un momento.
54:08Sí, responde Luisa con convicción.
54:11Adriana lo prometió.
54:12Y ella siempre cumple sus promesas.
54:14Cuando salgamos, dice Pepa.
54:16Quiero hacer las cosas bien.
54:18Quiero casarme con Martín.
54:19Tener una familia.
54:21Vivir una vida honesta.
54:22Y lo harás, le asegura Luisa.
54:25Todo eso y más.
54:26¿Y tú?
54:27¿Qué harás tú?
54:28Luisa piensa por un momento.
54:30Voy a dejar que Alejo me ame.
54:31Voy a dejar de tener miedo.
54:33Voy a construir una vida con él.
54:35Si todavía me quiere después de todo esto, te querrá.
54:38Dice Pepa con certeza.
54:39Un hombre no ama como él ama.
54:41Sí es un amor que se puede quebrar tan fácilmente.
54:44Luisa espera que su hermana tenga razón.
54:47Con todo su corazón espera que tenga razón.
54:49En la casa grande, la última escena del día, se desarrolla en el despacho de José Luis.
54:55El duque está solo, bebiendo brandy y mirando el retrato de Julio que cuelga en la pared.
55:00Ha perdido a su hijo primogénito.
55:02Ha perdido el respeto de muchos.
55:04Y ahora, con el regreso de Damaso, está a punto de perder aún más.
55:08Rafael entra sin tocar.
55:09Los dos hombres se miran, y hay un entendimiento silencioso entre ellos.
55:13Han perdido mucho, ambos, pero todavía tienen el uno al otro.
55:17Padre, dice Rafael suavemente, necesitas descansar.
55:20No puedo, responde José Luis.
55:22Cada vez que cierro los ojos, veo a Julio.
55:25Lo veo tal como era cuando era niño, lleno de vida y promesa.
55:29Rafael se acerca y pone una mano en el hombro de su padre.
55:33Él nunca nos dejará realmente.
55:34Vivirá siempre en nuestros recuerdos.
55:36No es suficiente, dice José Luis, su voz quebrándose.
55:40Nunca será suficiente.
55:42Lo sé.
55:43Rafael abraza a su padre, y el orgulloso duque finalmente se permite llorar,
55:47sollozando en los brazos de su hijo.
55:49Es un momento de pura humanidad, de puro dolor.
55:52Y mientras los dos hombres se consuelan mutuamente,
55:55el resto de Valle Salvaje duerme, ajeno a las tormentas que se están gestando.
55:59Porque mañana traerá nuevos desafíos, nuevas revelaciones, nuevos giros en esta saga,
56:05que parece no tener fin.
56:07La búsqueda de Tomás comenzará en serio.
56:09La alianza entre Damaso y Mercedes empezará a dar sus primeros frutos.
56:13Las dudas de Rafael sobre Luisa continuarán creciendo.
56:17Y Pepa y Luisa tendrán que encontrar la fuerza para sobrevivir otro día en esa celda horrible.
56:22Pero por ahora, mientras las estrellas brillan sobre Valle Salvaje, hay una pequeña esperanza.
56:28Esperanza de que la verdad finalmente saldrá a la luz.
56:32Esperanza de que la justicia prevalecerá.
56:35Esperanza de que incluso en la oscuridad más profunda, el amor puede encontrar una manera de brillar.
56:41Y ahí lo tienen, queridos espectadores.
56:44Qué capítulo tan intenso, tan lleno de emociones desgarradoras y alianzas peligrosas.
56:49Primero, esa escena entre Pepa y Luisa en la celda.
56:53Dios mío.
56:54¿Pudieron sentir el dolor?
56:56¿La rabia?
56:57¿El amor entre esas dos hermanas?
56:58Pepa sacrificándose confesando un crimen que no cometió.
57:02Y luego esa pelea explosiva donde finalmente se dijeron todo lo que llevaban guardado por años.
57:07Pero al final, al final, el amor de hermanas prevaleció.
57:11¿No les rompió el corazón?
57:13Y luego esa alianza entre Damaso y Mercedes.
57:15Esto va a cambiar todo.
57:17Los dos se están uniendo para destruir a Victoria y José Luis.
57:20Y tienen los recursos y el conocimiento para hacerlo.
57:23¿Creen que lo lograrán?
57:25¿O Victoria encontrará una manera de defenderse?
57:27¿Y qué me dicen de Rafael dudando de Luisa?
57:30Eso tiene que estar destrozando a Alejo.
57:32Ver cómo su propio hermano empieza a creer que la mujer que él ama es realmente una ladrona.
57:38¿Creen que Rafael cambiará de opinión cuando sepan la verdad sobre Tomás?
57:41Y ese momento, entre Leonardo e Irene.
57:44Ustedes pueden sentir la tensión, la atracción innegable entre ellos.
57:49Pero Leonardo está tratando de hacer lo correcto, de ser fiel a Bárbara.
57:53¿Creen que podrá resistir?
57:55¿O eventualmente cederá a sus sentimientos por Irene?
57:57Y no olvidemos a Matilde, viviendo con el miedo constante de que Victoria descubra su relación con Atanasio.
58:04Esa mujer es como una serpiente.
58:06Siempre observando.
58:08Siempre esperando el momento perfecto para atacar.
58:10Pero la pregunta más importante de todas, ¿encontrarán a Tomás?
58:14¿Podrán hacerlo confesar y liberar a Luisa y Pepa?
58:17¿O las dos hermanas están condenadas a pudrirse en esa celda por un crimen que no cometieron?
58:22Quiero escuchar sus opiniones.
58:23Del 0 al 10, ¿qué calificación le dan a Pepa por su sacrificio?
58:27¿Fue valiente o fue imprudente?
58:29¿Y qué piensan de la alianza entre Damaso y Mercedes?
58:32¿Es una alianza de conveniencia?
58:33¿O hay algo más oscuro detrás?
58:35¿Creen que Leonardo realmente puede mantenerse fiel a Bárbara?
58:39¿O el corazón quiere lo que quiere?
58:41¿Y Victoria?
58:42¿Cómo creen que reaccionará cuando se dé cuenta de que Mercedes y Damaso están conspirando contra ella?
58:47Déjenme sus comentarios.
58:49Quiero leer cada una de sus teorías.
58:51¿Qué creen que pasará en el próximo capítulo?
58:53¿Quién saldrá victorioso en esta guerra de poder que se está desarrollando en Valle Salvaje?
58:58Y si les gustó este resumen dramático y emocionante, no olviden darle like y suscribirse al canal.
59:04Activen la campanita para no perderse ni un solo detalle de esta saga increíble.
59:09Porque créanme, lo que viene es aún más intenso, más dramático, más impactante.
59:15Nos vemos en el próximo capítulo de Valle Salvaje, donde descubriremos si Adriana logra encontrar a Tomás,
59:21si la alianza de Damaso y Mercedes comienza a dar frutos,
59:24y si Luisa finalmente acepta ver a Alejo.
59:27Hasta la próxima, mis queridos espectadores.
59:30Y recuerden, en Valle Salvaje, la verdad siempre sale a la luz,
59:35aunque a veces el precio de esa verdad sea más alto de lo que cualquiera podría imaginar.
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