- hace 5 meses
- #vallesalvaje
Valle Salvaje Capítulo 222 || Luisa enfrenta al bandido en el bosque [AVANCE] #vallesalvaje
Categoría
🎥
CortometrajesTranscripción
00:00Es guapa, pero guapa, guapa, guapa. Como ese hijo suyo. ¿Cómo se llama? ¿Evaristo?
00:06Déjame en paz.
00:07Luisita, tranquila, ¿eh? Es lo que tengo que hacer para que te vayas del valle.
00:14El capítulo 222 de Valle Salvaje marcó un punto de quiebre irreparable en el universo de los Galvez de Aguirre
00:22y las casas que rodean su poder, lo que durante años fue un reinado de control, miedo y manipulación, empieza a tambalearse.
00:32Impulsado por la dignidad de los oprimidos, la lealtad de los valientes y la voz de quienes ya no temen hablar,
00:39Luisa, símbolo de resistencia y coraje, pagó un precio alto por atreverse a amar a lejos.
00:44Su cuerpo golpeado no solo denunció la violencia del poder, sino también dejó al descubierto el odio ciego de un sistema,
00:53incapaz de aceptar lo diferente.
00:55Su recuperación física va de la mano con el nacimiento de un nuevo tejido de alianzas,
01:01entre casas, clases y generaciones.
01:04Alejo, al romper con su padre, rompió también con una herencia de sumisión.
01:09Por primera vez en su vida, habló desde el alma, desde el amor y no desde el apellido.
01:15Su enfrentamiento con José Luis no fue solo un acto de justicia personal,
01:20sino la declaración pública de que los hijos ya no obedecen por miedo,
01:25sino que eligen por conciencia, Amanda emerge como un pilar estratégico y humano.
01:31Su llegada, lejos de ser protocolaria, se volvió disruptiva.
01:36Representa la nobleza auténtica, la que no teme confrontar, que escucha, que actúa.
01:43Ella une lo que parecía, irreconciliable, y prepara el escenario para una caída que no será violenta,
01:51sino moral.
01:52José Luis, hasta ahora intocable, comienza a perder lo único que lo sostenía.
01:58El respeto silencioso de los suyos, su castillo, se resquebraja desde adentro.
02:04En el umbral de una nueva guerra, ya no se enfrentan armas ni revólveres,
02:09sino palabras, gestos, convicciones, y es ahí, entre el dolor y la esperanza,
02:16donde nace la posibilidad real de un nuevo valle.
02:20Las secuelas del enfrentamiento entre Alejo y José Luis no tardaron en expandirse por todo el valle
02:26como un incendio sin control.
02:28Los rumores se propagaban de casa en casa, entre criadas, jornaleros y vecinos,
02:34que Alejo había renunciado a su apellido, que José Luis lo había expulsado,
02:39que Luisa había sido agredida por orden del propio duque.
02:42Nadie sabía con exactitud los detalles, pero todos intuían que algo grave había estallado
02:48en la cima de la jerarquía.
02:50En la casa pequeña, la noticia no fue recibida con sorpresa.
02:54Mercedes, que apenas ocultaba su satisfacción,
02:58no hizo ningún comentario público, pero su mirada hacia Alejo lo decía todo.
03:03Bienvenido a nuestro lado, Luisa, aunque aún débil,
03:07pidió que la ayudaran a sentarse en el porche, quería ver el sol,
03:11respirar el aire del valle que había aprendido a amar.
03:15A pesar de todo, Alejo se sentó junto a ella.
03:19En silencio, ¿no hacían falta palabras?
03:21¿Te arrepientes? Preguntó ella, con voz suave.
03:25No respondió él sin dudar.
03:28Solo lamento no haberlo hecho antes.
03:30¿Y ahora qué harás?
03:32Lo que debía hacer desde el principio.
03:34Cuidar de ti y de nuestro hijo.
03:37Buscar trabajo fuera del dominio de mi padre.
03:40Con Rafael, quizás, o en las tierras que aún no están bajo su poder.
03:45Luisa apoyó la cabeza en su hombro.
03:47No necesito riquezas, solo quiero paz.
03:51Entonces, eso es lo que tendrás, dijo él, besándola en la frente.
03:57En el palacio, Victoria se enteró de lo sucedido.
04:00Mientras estaba dando órdenes sobre los arreglos florales de la boda,
04:05Isabel le trajo la noticia con el mismo tono con que informaría que faltaban velas.
04:11A lejos se ha ido, y dicen que enfrentó directamente al duque.
04:15Victoria dejó caer una flor al suelo.
04:18¿Dónde está José Luis?
04:20En su despacho.
04:22No ha salido desde ayer.
04:23Victoria caminó por los pasillos con paso firme.
04:27Golpeó la puerta una sola vez antes de entrar.
04:30Lo encontró de pie, mirando por la ventana.
04:34¿Es cierto?
04:35José Luis no respondió.
04:37Su silueta parecía más encorvada de lo habitual.
04:39¿A lejos se fue?
04:41¿Por culpa tuya?
04:42¿Por culpa de su debilidad?
04:44Respondió él, sin girarse.
04:47No, por tu tiranía.
04:49José Luis giró lentamente, con el rostro descompuesto.
04:53¿También tú?
04:54Victoria cruzó los brazos.
04:57Si querías mantener tu linaje, lo has destruido tú solo.
05:02Has perdido a tu hijo, a su hijo, a la única posibilidad de continuidad real.
05:08José Luis apretó los labios.
05:10Ese niño nunca será un Galvez de Aguirre.
05:13Nació fuera de todo.
05:15Ese niño interrumpió Victoria con frialdad.
05:17Es el único que te mirará con compasión cuando estés viejo y solo.
05:22Porque alejo no volverá.
05:24Por primera vez, José Luis pareció verdaderamente afectado.
05:28No por el reproche, sino por la certeza.
05:32Victoria salió sin decir más.
05:33Sabía que sus palabras habían golpeado en el lugar exacto.
05:38Al día siguiente, Amanda reunió a Mercedes, Bernardo y Rafael.
05:43Estaban sentados en la galería de la casa pequeña.
05:46Con una jarra de agua fresca y un par de tazas vacías.
05:51La situación es insostenible, dijo Amanda.
05:55José Luis está fuera de control.
05:57No podemos esperar que el sistema lo corrija.
06:00¿Tendremos que hacerlo nosotros?
06:02¿Y cómo se enfrenta a un hombre como él?
06:05Preguntó Bernardo.
06:06Tiene poder, dinero, influencias y enemigos, respondió Amanda.
06:12Muchos más de los que cree.
06:14Si se descubre lo del bandolero, añadió Mercedes.
06:18Si logramos pruebas, las conseguiremos, intervino Rafael.
06:22Pero, Atanasio está con nosotros.
06:25Sabe más de lo que aparenta.
06:27Y si lo presionamos bien, hablará.
06:30Amanda asintió.
06:32Entonces tenemos que reunir todo.
06:35Testimonios, cartas, cualquier cosa que lo exponga ante los duques invitados a su boda.
06:42La caída de José Luis debe ser pública y definitiva.
06:45Y Alejo, preguntó Luisa, que acababa de salir a la galería,
06:50¿qué papel tendrá él?
06:52El más importante, respondió Amanda.
06:54Él es la prueba de que José Luis destruye, incluso a los suyos, su testimonio.
07:00¿Será el clavo final?
07:02Luisa bajó la vista.
07:04No quería arrastrar a Alejo a una guerra, pero sabía que ya no había retorno.
07:09Aurora caminó con paso firme por los pasillos del palacio.
07:13La comadrona, conocida por su severidad y experiencia,
07:17no había sido bien recibida por Adriana.
07:20Pero eso no le impedía cumplir con su deber.
07:23Tras el desmayo de la joven, Aurora había sido llamada por órdenes de José Luis
07:28y ahora, bajo la vigilancia de Victoria y Julio,
07:32iba a realizar una evaluación exhaustiva del estado de la futura madre.
07:36Adriana se encontraba en su habitación, sentada en el borde de la cama.
07:41Cuando Aurora llegó, su rostro seguía pálido,
07:44pero la tensión en sus ojos demostraba que no estaba dispuesta a ser tratada como una inválida.
07:51¿Vienes a decirme que guarde cama?
07:53Preguntó sin rodeos.
07:55Antes siquiera de que la mujer hablara,
07:57vengo a decirte cómo proteger la vida que llevas dentro.
08:01Respondió Aurora con serenidad profesional.
08:04Es si, en pleza reposó, mucha reposó, Adriana.
08:08Se cruzó de brazos.
08:11No puedo quedarme en esta cama, viendo cómo el mundo se desmorona.
08:15Hay cosas que hacer, decisiones que tomar.
08:19Este embarazo no me convierte en rehén.
08:21Aurora no discutió.
08:23La examinó con precisión,
08:25conociendo bien el tipo de paciente que tenía delante.
08:28Al concluir, salió sin agregar más palabras y se dirigió directamente a Julio.
08:34Está agotada.
08:35El cuerpo le está pidiendo descanso.
08:38Y si no lo consigue, podría tener complicaciones graves.
08:43¿Tips convénzala?
08:44El bebé está bien, pero no lo estará.
08:47Si ella sigue con ese ritmo, Julio asintió con gesto contenido.
08:52No podía darse el lujo de que algo malo ocurriera con el hijo que,
08:57aunque no suyo, nacía bajo su apellido.
09:00Fue hasta Adriana.
09:02Y la encontró otra vez en pie.
09:03Ojeando documentos y listas de la boda,
09:07otra vez de pie, dijo con tono bajo.
09:10Tengo que repasar los cambios en la organización.
09:13Victoria ha modificado los asientos de invitados tres veces.
09:17Y si yo no superviso.
09:19Aurora dice que necesita reposo.
09:21Y por una vez, estoy de acuerdo con ella.
09:24Julio, no tengo tiempo para quedarme quieta.
09:27No ahora, Adriana, no es un capricho.
09:32No es solo por ti, es por el niño.
09:35Ella lo miró con dureza.
09:37Pero en sus ojos también había temor, no por la autoridad de Julio,
09:41sino por la verdad que no podía negar.
09:44Su cuerpo no era el mismo y cada día sentía más el peso del embarazo.
09:49Pero, aún así, no se dio.
09:51Estoy bien.
09:52Julio apretó los dientes.
09:54¿Y si no lo estás mañana?
09:56¿Y si algo le pasa al bebé?
09:57¿Podrás vivir con eso?
09:59El silencio se hizo denso.
10:01Adriana bajó la mirada, pero no respondió.
10:05Mientras eso ocurría, en otro rincón del palacio,
10:08José Luis mantenía una conversación secreta con el bandolero.
10:13Acordaban los siguientes pasos para presionar a Luisa,
10:16convencidos de que una nueva amenaza bastaría para que huyera del valle.
10:20Atanasio, fiel secretario del duque,
10:24presenció parte del encuentro desde detrás de una puerta entreabierta.
10:28No escuchó toda la conversación,
10:30pero si vio a José Luis despedir al mismo hombre
10:33que días atrás había irrumpido en la casa pequeña,
10:37Atanasio sintió que la sangre le hervía,
10:40sabía lo que había visto.
10:41Y más aún, ¿sabía que ese hombre había tocado a Evaristo?
10:46Horas después, se reunió con Matilde en la despensa.
10:50Ese hombre es el mismo.
10:52Lo vi con mis propios ojos.
10:55El que tuvo en brazos al bebé.
10:57¿Estás seguro?
10:58¿Totalmente?
10:59Y José Luis lo recibió como si fuera un viejo amigo.
11:03Matilde se llevó las manos al rostro.
11:07Horrorizada, tenemos que decírselo a Alejo.
11:10¿Él debe saber la clase de monstruo que es su padre?
11:14Sí.
11:15¿Y que Luisa está en peligro más de lo que pensamos?
11:19Atanasio no tardó en actuar.
11:22Esa misma mañana, con la preocupación pesándole en el pecho,
11:26se dirigió a la casa pequeña.
11:28Allí encontró a Matilde en la cocina, y tras asegurarse de que nadie más escuchara,
11:34le repitió todo lo que había visto.
11:37El bandolero saliendo del despacho del duque, la mirada cómplice, el apretón de manos,
11:43no sé qué planea, dijo en voz baja.
11:46Pero ese hombre no está aquí por accidente, está siguiendo órdenes, y ya lo hemos visto demasiado cerca de Luisa.
11:54Matilde asintió con gravedad.
11:57Entonces decidieron que lo mejor era advertir a Alejo.
12:01Incluso si eso implicaba un conflicto abierto con su padre, el joven tenía derecho a saber.
12:08No fue difícil encontrarlo.
12:10Alejo estaba en los establos, cepillando a su caballo.
12:15Cuando los vio llegar, con el rostro tenso y la voz apremiante,
12:20entendió de inmediato que algo no andaba bien.
12:23¿Qué pasa?
12:24Preguntó, soltando el cepillo.
12:27Es tu padre, empezó Atanasio.
12:30Lo vimos con el intruso, el mismo que estuvo en la casa pequeña,
12:34el que tomó a Evaristo.
12:36Alejo sintió un vacío en el estómago.
12:39¿Estás seguro?
12:40Lo vi con mis propios ojos.
12:42No escuché todo, pero se estaban despidiendo.
12:46Con familiaridad, como si tuvieran un trato, Alejo cerró los puños.
12:51Su padre había cruzado la línea una vez más.
12:55Esta vez, involucrando a un inocente, su hijo.
12:59¿Dónde está Luisa?
13:01En cama.
13:02No se ha levantado en toda la mañana, respondió Matilde.
13:05Pepa la cuida, pero dice que no quiere hablar con nadie.
13:09Alejo no esperó más.
13:11Corrió hacia la casa pequeña y subió las escaleras dos en dos.
13:15Entró sin tocar y la encontró recostada, con el rostro demacrado y el cuerpo cubierto por mantas.
13:22¿Qué pasó?
13:23Preguntó, arrodillándose junto a ella.
13:26Luisa no respondió de inmediato.
13:28Parecía haber estado llorando, pero lo disimulaba.
13:32Nada.
13:33Solo estoy cansada.
13:34No me mientas.
13:36Sé que algo te ocurrió.
13:37Pepa, que estaba en la puerta, se adelantó.
13:41La encontramos así esta mañana.
13:43Dice que fue al bosque a despejarse, pero volvió temblando.
13:48¿No ha querido decir qué ocurrió?
13:50Alejo tomó la mano de Luisa con delicadeza.
13:53Por favor, necesito saber la verdad.
13:56Luisa lo miró por fin, con los ojos enrojecidos.
14:00Fue él, el hombre, el mismo de la cocina.
14:04Me lo encontré en el bosque.
14:06Alejo se quedó helado.
14:08¿Te hizo daño?
14:09Ella sintió apenas.
14:11Me habló, me llamó guapa.
14:13Dijo cosas horribles.
14:15Cuando lo enfrenté, me empujó, me tiró al suelo.
14:19Me pateó, me gritó que me fuera del valle, que no me convenía estar aquí.
14:25Alejo apretó los dientes.
14:28El dolor en su rostro se volvió rabia.
14:30¿Te violó?
14:32Preguntó con voz quebrada.
14:34Luisa negó con la cabeza.
14:36No, solo fue una paliza, pero temí por mi vida.
14:41¿Estás segura de que fue solo eso?
14:43Sí, pero me dijo que si no me iba, la próxima vez sería peor.
14:49Alejo se levantó de golpe.
14:51No dijo nada más.
14:53Su rostro era una mezcla de furia y desconsuelo.
14:57Bajó las escaleras, montó su caballo y galopó sin dirección fija,
15:02sabiendo que el momento de la confrontación con su padre estaba más cerca que nunca.
15:07Mientras tanto, en el palacio, Isabel recibía una mala noticia.
15:11La cocinera reputada que Victoria había contratado para la boda no podría asistir.
15:18Por problemas logísticos, su llegada se había cancelado.
15:22Eva, al enterarse, apenas pudo disimular su satisfacción.
15:26¿Y ahora qué harán sin mí?
15:29Se burló, revolviendo un guiso con arrogancia.
15:33Amadeo, su hermano, intervino.
15:35No cantes, Victoria.
15:38No tienes idea de cómo montar un banquete nupcial para más de 100 personas.
15:43Necesitarás ayuda.
15:45Eva lo miró de reojo.
15:47¿Y tú propones a quién?
15:49¿A esa mujer?
15:50Sí, dijo Amadeo.
15:52Luisa es la mejor cocinera de la comarca.
15:55Y todos lo saben.
15:56Hasta Victoria tendría que reconocerlo.
15:59Eva bufó.
16:00Victoria jamás aceptaría algo así.
16:04Preferiría que le envenenaran el pastel, entonces que se prepare para un desastre, porque, sin Luisa, ese banquete será un desastre.
16:14La posibilidad quedó flotando en el aire, inevitable, incómoda y quizás necesaria.
16:21Victoria estaba en el salón principal, dando indicaciones a los empleados con su habitual tono altivo.
16:27Cuando Amanda hizo su aparición, la marquesa entró con paso decidido.
16:33Acompañada de su abanico cerrado y una mirada afilada que ya había provocado incomodidad más de una vez desde su llegada,
16:42Victoria dijo a Amanda sin rodeos.
16:44¿Quería saber si los duques de Miramar asistirán finalmente a la boda?
16:48Victoria, que no se esperaba esa pregunta, vaciló por un momento antes de componer su sonrisa más diplomática.
16:55Ya han sido invitados.
16:58Sí, José Luis lo hizo durante la reunión con Bernardo.
17:02Amanda alzó una ceja.
17:04Vaya, que anticipado por su parte, él quiso asegurar que no faltarán personalidades importantes al enlace, respondió Victoria.
17:13¿Vaya, intentando no perder el control de la conversación?
17:17Claro, claro.
17:18Aunque de haberlo sabido antes, yo misma me habría encargado de gestionar esa invitación.
17:24Siempre es mejor cuando viene de alguien que sabe cómo tratar a la alta sociedad.
17:28La verdad, soltó Amanda con una voz tan dulce como envenenada.
17:32Victoria mantuvo la sonrisa, pero sus ojos centellaban.
17:37Estoy segura de que harán acto de presencia por cortesía.
17:41Después de todo, será una ceremonia memorable.
17:44Eso espero, dijo Amanda.
17:47Para bien o para mal, el valle recordará esta boda.
17:52La conversación fue interrumpida por Isabel, que llegó con expresión preocupada.
17:57Señora, lamento interrumpir, pero hay un asunto urgente.
18:03La cocinera que íbamos a traer para el banquete no podrá asistir.
18:07Victoria parpadeó.
18:08¿Cómo que no podrá?
18:10Se ha complicado su agenda.
18:12¿No podrá viajar?
18:14Y nos quedamos sin chef principal.
18:17Por un instante, la expresión de Victoria se quebró.
18:21Amanda no tardó en notar el cambio.
18:24Vaya, dijo la marquesa.
18:26¿Qué contrasiempó?
18:28Y ahora, Isabel miró a Eva, que casualmente pasaba con un cuenco de masa en las manos.
18:34Bueno, Eva está más que dispuesta a encargarse del banquete.
18:38Con la ayuda adecuada, por supuesto.
18:41La ayuda adecuada, repitió Amanda, cruzando los brazos.
18:46¿A quién se refiere?
18:48Isabel tragó saliva antes de responder.
18:50Cuida a Luisa.
18:52Un silencio pesado.
18:54Se apoderó del salón.
18:56Victoria entrecerró los ojos.
18:58Luisa, la cocinera de la casa pequeña, es la mejor de la región.
19:03Señora intervino Eva a regañadientes.
19:06Y con un evento tan grande, no vendría mal.
19:10Amanda sonrió.
19:12Bueno, Victoria, si tu objetivo es que esta boda sea recordada por su calidad, quizá sea el momento de tender puentes.
19:21¿Quién sabe?
19:22Podría ser una oportunidad para enmendar cosas con Alejo.
19:26Victoria no respondió.
19:28¿Se limitó a girarse y salir del salón con paso rígido?
19:32Mientras tanto, en el ala norte del palacio, Mercedes y Bernardo analizaban esta nueva actitud de Victoria.
19:41¿Invitar a sus sobrinos a vivir con ella?
19:44Dijo Mercedes con escepticismo.
19:47¿Desde cuándo esa mujer piensa en la familia?
19:50Dice que quiere mantenernos unidos.
19:53Que lo prometió a Pilara.
19:55Las promesas de Victoria valen lo que el papel mojado respondió Mercedes, cruzando los brazos.
20:00A Ogüi está tramando.
20:03Lo pensé al principio, pero ¿y si realmente está cambiando?
20:08No lo creo.
20:09La conozco demasiado bien.
20:11Y más aún, cuando las cosas empiezan a irle mal, siempre finge redención para protegerse en ese momento.
20:19Rafael entró a la habitación con el rostro sombrío.
20:23Hay que tener cuidado con ella.
20:25Y también con Úrsula.
20:26¿Qué ha pasado ahora?
20:28Preguntó Bernardo.
20:29Úrsula me ha amenazado otra vez.
20:32Dice que si no me alejo de Adriana, lo contará todo.
20:37Que revelará la relación.
20:39Pero esta vez ya no me importa.
20:41Mercedes se levantó de su silla.
20:44¿Qué hiciste?
20:45Le dije que lo hiciera.
20:47¿Que se atreviera?
20:48Estoy cansado de vivir con miedo.
20:51Si vamos a caer, que sea con la verdad.
20:54Bernardo asintió con lentitud.
20:56Eso cambiaría todo.
20:58Lo sé.
20:58Respondió Rafael.
21:00Pero ya.
21:01No podemos vivir a merced de sus chantajes.
21:04En su habitación, Úrsula caminaba de un lado a otro.
21:08Furiosa.
21:10Nadie la escuchaba ya.
21:11Nadie la respetaba.
21:13Y el castillo de poder que había construido, piedra por piedra, comenzaba a desmoronarse.
21:19Úrsula sentía que perdía el control de la situación.
21:22La conversación, la conversación con Rafael la había dejado temblando.
21:27Su seguridad, su seguridad, basada en secretos y amenazas, se resquebrajaba como un cristal al borde del abismo, caminaba por los pasillos del palacio.
21:36Con los labios apretados, con los labios apretados y el rostro encendido de furia, los sirvientes la esquivaban.
21:42Sabían que cuando caminaba así, no era prudente interrumpirla.
21:47Cerró la puerta de su habitación con violencia, se acercó al espejo y se miró fijamente.
21:53No van a deshacerse de mí tan fácilmente, dijo en voz baja.
21:58No después de todo lo que he hecho, en ese momento, tocaban la puerta.
22:04Era Julio, ¿puedo pasar?
22:06Entra, dijo ella, sin girarse.
22:09Julio entró con paso calculado.
22:12Había oído rumores sobre el nuevo estallido de Úrsula.
22:16Y no podía permitir que provocara un escándalo mayor.
22:20¿Qué hiciste esta vez?
22:21Le dije a Rafael que, si sigue así, contaré la verdad, que revelaré su relación con Adriana.
22:28¿Julio cerró la puerta con fuerza?
22:30¿Estás loca?
22:32Eso no solo los destruye a ellos.
22:34También nos arrastra a ti y a mí, y lo sabes.
22:38Estoy cansada, Julio, gritó ella.
22:41Cansada de ser ignorada, de ser vista como una amenaza y no como lo que soy.
22:46Yo también tengo derecho a sentir, a luchar, a luchar, respondió ella con su arzashmo.
22:54Lo tuyo no es lucha, es destrucción.
22:58¿Acaso crees que si haces estallar todo, Rafael volverá a ti, lo perderás para siempre?
23:04Úrsula lo miró con los ojos llenos de lágrimas que no derramaba.
23:09Las palabras de Julio eran ciertas, pero también lo eran sus heridas, su soledad, su rencor.
23:17Entonces dime, ¿qué debo hacer?
23:19¿Seguir fingiendo que no pasa nada mientras ellos se miran con amor y yo me consumo?
23:25Julio se acercó a ella, bajando la voz.
23:28Lo que debes hacer es irte antes de que te destruyas del todo.
23:33Tienes dinero, tienes contactos, vete.
23:37No voy a huir.
23:39No es huir, dijo él.
23:41Es sobrevivir.
23:42Ella giró el rostro, evitando su mirada.
23:46Por dentro, el terremoto emocional era incontrolable, pero por fuera volvió a erguirse.
23:53¿Aún no he terminado?
23:54En ese mismo instante, lejos del palacio, Luisa caminaba por el bosque, necesitaba despejarse.
24:02Tras tantas tensiones, el aire puro entre los árboles le ofrecía el único respiro posible,
24:08pero no estaba sola. Una sombra se movía entre los troncos, un crujido de ramas secas, un paso que no era suyo.
24:17¿Quién anda ahí? preguntó, deteniéndose.
24:21De pronto, el bandolero apareció.
24:24Era el mismo hombre que había irrumpido en la casa pequeña y que había sostenido a Evaristo en brazos,
24:30esta vez sin disfraz, sin intención de ocultarse.
24:33—Vaya, vaya —dijo con voz burlona—, qué coincidencia encontrarte aquí, solita.
24:41Luisa retrocedió un paso, aparta chismicamieno.
24:45—Tranquila, solo quiero hablar. Eres muy bonita, igual que tu hijo.
24:51Luisa sintió como el pánico le apretaba el pecho, pero no iba a mostrarlo.
24:56No tienes idea de con quién te estás metiendo.
24:59—Escupió. —Si das un paso más, te arrepentirás.
25:04El hombre rió. Luego, sin aviso, se abalanzó sobre ella.
25:09Luisa intentó defenderse.
25:11Le golpeó con una rama caída, pero él fue más rápido.
25:14La empujó contra el tronco de un árbol.
25:17La inmovilizó y comenzó a gritarle amenazas.
25:21—Te quiero fuera del valle.
25:22—Hoy mismo.
25:24—O la próxima vez no me contendré.
25:25Con violencia, la tiró al suelo, le dio dos patadas en las costillas y se marchó sin mirar atrás.
25:34Luisa quedó tendida, jadeando de dolor, con la ropa rasgada y el alma hecha pedazos.
25:40Horas después, Pepa la encontró caminando tambaleante por el sendero que conducía a la casa pequeña.
25:47Al verla en ese estado, gritó de horror y corrió hacia ella.
25:51—Luisa, Dios mío, ¿qué te han hecho?
25:55Luisa no podía hablar.
25:57Solo se dejó caer en sus brazos, sabiendo que esta vez no podría ocultar nada.
26:03Luisa despertó al día siguiente con todo el cuerpo dolorido.
26:07Las costillas le ardían con cada movimiento.
26:10Y tenía el labio inferior partido a su lado.
26:14Pepa le cambiaba un paño húmedo por otro, mientras intentaba ocultar su angustia.
26:19No era fácil ver así a su hermana, siempre tan fuerte, tan orgullosa.
26:25Ahora, rota por dentro y por fuera, Mercedes entró en la habitación, seguida de Bernardo.
26:32Al verla, contuvieron la respiración.
26:35La gravedad del ataque era evidente.
26:37—¿Quién fue? —preguntó Mercedes, sentándose junto a la cama.
26:42Luisa apenas logró responder.
26:44La voz quebrada, el mismo, el que entró a la cocina, el que tomó a Evaristo.
26:51—¿El bandolero? —exclamó Bernardo.
26:54—Sí, me dijo que debía irme del valle.
26:57Que si no lo hacía, la próxima vez sería peor.
27:01Pepa no pudo contenerse.
27:03Esto es obra de José Luis, todos lo sabemos.
27:06Él lo mandó.
27:07Bernardo bajó la mirada.
27:09No podía negarlo.
27:11Ya eran demasiadas coincidencias, demasiadas señales.
27:16Mercedes se levantó y comenzó a caminar por la habitación.
27:20Visiblemente alterada, esto no puede quedar así.
27:24No podemos permitirlo.
27:25—Hay que decírselo a lejos —murmuró Pepa.
27:29—¿Tiene que saberlo?
27:30—¿Tiene de regió?
27:32Luisa sintió con dificultad.
27:34—Sí, pero que venga él.
27:37No quiero que vaya a enfrentarlo sin saber todo.
27:40Si se entera de golpe, será peor.
27:43Esa misma tarde, Alejo llegó tras recibir un mensaje urgente.
27:48Subió a toda prisa las escaleras de la casa pequeña.
27:52Cruzó la habitación sin pedir permiso.
27:54Y se arrodilló junto a la cama de Luisa.
27:57—¿Qué te ha pasado?
27:59Ella lo miró con ternura triste.
28:01—Fue en el bosque, me lo encontré, me golpeó.
28:05Me advirtió.
28:07Alejo apretó los dientes.
28:09—¿Quién?
28:10—El hombre, el bandolero, el mismo de Evaristo.
28:14—¿Y quién lo envió?
28:16—No lo dijo.
28:17—Pero no hace falta.
28:18—¿Tú lo sabes, Alejo?
28:20—Fui tu padre.
28:21Alejo se puso de pie como un resorte.
28:24Caminó por la habitación, con las manos en la cabeza,
28:27como si buscara una forma de contener la rabia.
28:31—No, no puede ser.
28:34—Sí puede, intervino Mercedes.
28:36Y lo ha hecho, porque para José Luis, el poder está por encima de todo,
28:42incluso por encima de su propio hijo.
28:45Alejo se detuvo en seco.
28:47—Ya está.
28:48Se acabó.
28:49No pienso permitirlo.
28:51Esta vez, no hay marcha atrás.
28:53Esa noche, Rafael encontró a su hermano caminando de un lado al otro por el jardín de la casa grande.
29:00Alejo tenía los ojos encendidos.
29:03La mandíbula tensa.
29:05—¿Qué pasa?
29:06—preguntó Rafael.
29:08—Fue a él.
29:09—¡Opa!
29:10—mandó a ese hombre a golpear a Luisa.
29:12—¿Para asustarla?
29:14—¿Para que se fuera?
29:15Rafael no respondió de inmediato.
29:18Cerró los ojos y respiró hondo.
29:21—¿Estás seguro?
29:22—Sí.
29:23—Ella me lo contó.
29:24—Ipsolo, no tengo dudas.
29:26—¿Y qué vas a hacer?
29:28—Enfrentarlo.
29:29—Mirarlo a los ojos.
29:30—Y decirle que esta vez.
29:32—Se acabó.
29:34—Alejo.
29:35—No intentes detener, mi hermano.
29:37—No esta vez.
29:38—Rafael lo tomó por el brazo.
29:40—Sólo te pido que esperes.
29:42—Que pienses.
29:44—Él no se va a rendir así como así.
29:45—Y tú no puedes acabar con él solo.
29:48—Tienes que tener un plan.
29:50—Mi plan es simple.
29:51—Decirle que perdió a su hijo.
29:53—Y si no te escucha, entonces me irá, Peuromi.
29:57—Pero al menos lo habré intentado.
29:59—Mientras tanto, en el palacio, José Luis se encontraba en su despacho.
30:04—Revisando unos documentos, todo parecía en orden.
30:08—Había ordenado lo que creía que era una solución definitiva.
30:13—Eliminar el problema de raíz.
30:16—Aunque esa raíz fuera una mujer y madre de su nieto, no sabía que Alejo ya lo sabía todo.
30:23—Ni que el enfrentamiento era inevitable.
30:25—Al día siguiente, los rayos del sol apenas asomaban sobre las colinas, cuando Alejo se presentó en la casa grande, entró sin anunciarse, sin saludar a los sirvientes, sin quitarse siquiera el polvo del camino.
30:39El silencio reinaba en la galería principal, cuando empujó con fuerza las puertas del despacho de su padre.
30:46José Luis, sentado tras el escritorio, levantó la mirada con gesto severo.
30:52—Vaya, qué honor tener a mi hijo madrugando, dijo con sarcasmo.
30:57—No estoy aquí por cortesías, respondió Alejo, sin rodeos.
31:02—Estoy aquí para hablar de Luisa.
31:05José Luis cerró el portafolio que tenía frente a él.
31:07—¿Otra vez con eso?
31:09—No otra vez.
31:11—Esta vez.
31:12—La última vez.
31:14—Habla claro, Alejo.
31:16Alejo dio un paso adelante.
31:18—Con los ojos clavados en los de su padre, tú enviaste a ese hombre, el mismo que entró a la casa pequeña, el que tomó a mi hijo en brazos, el que golpeó a Luisa, fue tu odn.
31:30José Luis no dijo nada, solo ladeó la cabeza, como quien evalúa la fuerza del oponente antes de moverse, y si así fuera, respondió al fin.
31:41—¿Qué harías?
31:42—¿Cómo puedes decir eso?
31:44—estalló Alejo.
31:45—¿Cómo puedes hablar con esa frialdad, sabiendo que mandaste a golpear a la mujer que amo?
31:50—Lo hice para protegerte.
31:53—Esa mujer te está arrastrando lejos de tu familia, de tu deber, de tu sangre.
31:58—Esa mujer es mi familia ahora.
32:00—gritó Alejo.
32:02—Evaristo es tu nieto.
32:03—Y lo pusiste en peligro.
32:05José Luis se levantó con lentitud, cruzando los brazos a la espalda.
32:10Tu madre estaría avergonzada de verte así, rindiéndote a una campesina.
32:15Mi madre me enseñó a amar con el corazón, no con la nariz en alto, y si estuviera viva, se avergonzaría de ti, de lo que te has convertido.
32:25El silencio que siguió fue espeso, como un mar contenido.
32:30José Luis apretó los dientes.
32:32—¿Y qué harás?
32:34—¿Te irás con ella?
32:35—¿Renunciarás a tu nombre?
32:37—No necesito tu apellido para ser quien soy.
32:40—Me llamo Alejo, porque tú me engendraste.
32:42—Pero el hombre que me crió, que me dio valores, ya no está aquí.
32:47Tú lo enterraste con tus órdenes, cobardes.
32:50José Luis, herido en su orgullo, avanzó hacia él.
32:54—Cuidado con cómo me hablas, muchacho.
32:56—¿O qué?
32:57—¿Vas a mandarme un matón a mí también?
33:00La tensión subió hasta el límite.
33:03Por un instante, José Luis alzó la mano, pero la dejó caer a medio camino.
33:08—Eres un ingrato.
33:10—¿Y tú un tirano?
33:11—replicó Alejo.
33:13—Se dio la vuelta y caminó hacia la puerta.
33:16Antes de salir, se detuvo.
33:19—No volveré a este palacio mientras tú estés aquí.
33:22—Ni Eluisa, ni Averisto, ni yo necesitamos tu denano.
33:26—Has perdido a tu hijo.
33:28—Y pronto perderás todo lo demás.
33:30José Luis quedó solo en el despacho, respirando con dificultad por primera vez en mucho tiempo, sintió una punzada de derrota.
33:40Horas más tarde, Amanda se enteraba del enfrentamiento por boca de Isabel.
33:45La marquesa, lejos de sorprenderse, suspiró con resignación.
33:50Era inevitable, dijo.
33:52—José Luis cree que se puede controlar el mundo desde un escritorio, pero olvidó que los corazones no siguen órdenes.
34:00Amanda fue a buscar a Leonardo y le pidió que la acompañara a la casa pequeña.
34:05Allí encontraron a Luisa aún en cama, cuidada por Pepa y Mercedes.
34:10—¿Cómo te sientes, querida?
34:12—preguntó Amanda, acercándose con dulzura.
34:15—Mejor, pero muy cansada.
34:18—Tómate todo el tiempo que necesites.
34:20—Ya no estás sola.
34:22Amanda se giró hacia Mercedes.
34:24—Hay que unir fuerzas.
34:26Esto ya no es solo una cuestión de poder, es de justicia.
34:30Mercedes asintió.
34:32Por fin, una aliada con quien podía hablar de igual a igual esa tarde.
34:38Rafael recibió noticias de lo ocurrido.
34:41Fue al encuentro de Alejo, que estaba en el campo, dando instrucciones a unos trabajadores.
34:47—¿Todo bien?
34:48—No, pero ya está hecho.
34:51Le dije todo a nuestro padre.
34:52Y me marché.
34:54Y ahora, ahora, luchamos desde fuera.
34:58El valle ya no le pertenece.
35:01No por completo.
35:02Ambos sabían que lo que comenzaba era una guerra más grande.
35:06Pero también sabían que estaban del lado correcto de la historia.
35:11La semana terminó con un clima tenso y cargado de expectativas.
35:15En el valle salvaje, todos sabían que algo grande estaba por suceder.
35:19La figura del duque José Luis, que durante años había dominado con puño de hierro tanto la casa grande como las tierras vecinas, comenzaba a mostrar grietas, grietas profundas, grietas irreparables.
35:34La alianza entre Amanda, Mercedes, Rafael y Bernardo era más sólida que nunca.
35:40Y con la ayuda silenciosa de Atanasio, que comenzaba a mostrar dudas de lealtad hacia su patrón, se gestaban movimientos que podían marcar el fin de una era.
35:51Mientras tanto, Alejo se preparaba para declarar.
35:55Había pasado los últimos días en casa de Mercedes, acompañando a Luisa y cuidando de Evaristo.
36:02Sus heridas con su padre no eran sólo emocionales.
36:05Eran heridas de linaje, de identidad, de pertenencia.
36:09Pero también eran cicatrices que le otorgaban fuerza.
36:14Esa mañana, Rafael se le acercó.
36:16Vamos a dar el paso.
36:18¿Estás listo?
36:19Alejo asintió.
36:21No hago esto sólo por mí.
36:23Lo hago por Luisa.
36:25Por mi hijo.
36:26Por todos los que han sufrido en silencio, tu testimonio será decisivo.
36:31José Luis no puede escapar de esto.
36:34No lo hará, afirmó Alejo.
36:36No esta vez.
36:37En el otro extremo del valle, José Luis aún no sospechaba la magnitud de la tormenta que se avecinaba.
36:44Había notado la ausencia de Atanasio, pero lo atribuyó a la atención generada por la discusión con Alejo.
36:51No sabía que su propio secretario se había reunido esa misma mañana con Amanda, entregándole documentos, cartas, apuntes, pruebas.
37:01Yo no quiero ser parte de esto, había dicho Atanasio.
37:05Pero tampoco puedo seguir callando.
37:08Amanda había aceptado el sobre sin una palabra.
37:12Su expresión lo decía todo.
37:13Al mismo tiempo, Victoria continuaba intentando recuperar el control sobre la organización de su boda.
37:21Sin embargo, cada decisión suya era cuestionada.
37:25Cada orden revisada, cada gesto vigilado, su cambio repentino de actitud, su aparente generosidad con los sobrinos, su propuesta de unidad,
37:36todo comenzaba a parecer forzado, artificial.
37:39—¿Por qué te empeñas tanto en esta boda? —le preguntó Isabel.
37:43—Porque es mi último bastión —respondió Victoria, con un susurro.
37:48Si pierdo esto, si pierdo esto, lo pierdo todo.
37:51Pero ya era demasiado tarde. Amanda había empezado a mover los hilos con una precisión milimétrica.
37:58La boda de José Luis y Victoria sería el escenario perfecto para la caída del duque.
38:03En la casa pequeña, se respiraba una calma expectante.
38:08Mercedes preparaba una mesa con comida sencilla pero abundante.
38:12Luisa, aunque aún convalesciente, se levantaba a ratos para ayudar.
38:17Rafael escribía cartas.
38:19Bernardo afinaba detalles logísticos.
38:23Todos sabían que el momento se acercaba.
38:25—¿Estás segura de esto? —le preguntó Mercedes a Amanda.
38:29Mientras compartían un té, más segura que nunca, José Luis no puede seguir imponiéndose por miedo.
38:36—Ya no.
38:37Y si intenta escapar, lo enfrentaremos con palabras, con verdad.
38:42Y si eso, no basta.
38:44Con todos nosotros unidos, al anochecer, Alejo se quedó a solas con Luisa en el patio trasero.
38:51Pero, Evaristo, dormía en una cuna improvisada, bajo el canto suave de los grillos.
38:57—¿Tienes miedo? —preguntó ella.
39:00Mucho respondió él, pero también.
39:03—¿Esperanza? ¿Esperanza en qué?
39:05¿En que después de todo esto?
39:07—¿Podamos vivir?
39:09—No sobrevivir.
39:11—Vivir.
39:12Luisa le tomó la mano.
39:13—Yo ya estoy viviendo, Alejo, desde que te tengo a ti y a él.
39:18Y en ese gesto silencioso, en ese cruce de miradas cómplices, se selló el verdadero triunfo,
39:25no el de la venganza, no el del escándalo, sino el de quienes, aún heridos, eligen el amor por encima del poder.
39:34—Gracias.
39:35—Gracias.
39:36—Gracias.
39:37—Gracias.
40:07—Gracias.
40:08—Gracias.
Sé la primera persona en añadir un comentario