El aniversario de la Carta Magna ha dejado definitivamente de ser un día para la concordia, el entendimiento y el consenso. El clima de enfrentamiento domina la tradicional celebración en el Congreso, donde las formaciones políticas se encargan de que así sea. Este sábado, la jornada conmemorativa del 47º aniversario de la Constitución se ha convertido en una plataforma para el agrio cruce de acusaciones entre el Gobierno y la oposición. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reivindicó la Carta Magna a su llegada al palacio de San Jerónimo, al tiempo que tildó de "profetas del desastre" a quienes aseguran que "España camina hacia la dictadura y se rompe",. Sánchez escaló sus críticas señalando directamente a la oposición de derecha y ultraderecha, afirmando que "son herederos de la dictadura o pactan con sus nostálgicos",. El presidente defendió que "España vive uno de los mejores momentos de su historia democrática", un argumento que respalda señalando los buenos datos macroeconómicos. Además, celebró la situación actual del país, comentando la paradoja de las críticas opositoras: "No deja de ser paradójico también que hablen de que España se hunde y en cambio los presidentes autonómicos celebren los buenos datos de empleo en cada uno de sus territorios". Sánchez también acusó a la "internacional ultraderechista" de extender discursos "reaccionarios y peligrosos" y defendió la posición de España respecto a los derechos humanos (artículo 10) ante el genocidio de Gaza y la invasión de Ucrania. En la otra trinchera, el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, acompañado de los presidentes autonómicos de su partido, insistió en que su formación estará "siempre con la Constitución" para defender "la concordia". Sin embargo, el popular lanzó la acusación de mayor calado de la jornada, afirmando que Sánchez preside "el gobierno que más ha atacado la Constitución durante 47 años". Feijóo aseguró que el Ejecutivo, lejos de defender la Carta Magna, "la ataca y degrada las instituciones, la separación de poderes y la igualdad de los españoles ante la ley",. De cara al futuro, Feijóo se comprometió, si llega al Gobierno, a dejar atrás "una época decadente de la política española, una década insolvente", para ofrecer una era "restituyente" de la política y del texto constitucional,. Finalmente, el líder del PP se mostró confiado en que el 50 aniversario de la Constitución, en 2028, se celebrará con un "gobierno constitucionalista" que "se sienta orgulloso de la Constitución, de defenderla, de practicarla".
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