#Sinapsis | Las arcillas, suelos finos llamados “barro”, se vuelven pegajosas al mojarse y se agrietan al secar. Retienen agua y nutrientes, ayudan a las plantas y limpian contaminantes. Se usan en cerámica, ladrillos, cosméticos, medicina, filtros y hasta en petróleo y papel.
Aprende más de este tema con Rosa Icela Beltrán Hernández, investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, nivel 1 reconocida por el Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores (SNII).
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