Un grupos de investigadores de Canadá examinó los hábitos alimentarios y patrones de sueño 1082 estudiantes durante un periodo de 4 meses, los resultados son bastante llamativos.
00:00Ve este dato, la próxima vez que disfruta de un queso antes de dormir, podría estar preparando el terreno para una noche de pesadillas.
00:09Un grupo de investigadores en Canadá examinó los hábitos alimentarios y los patrones de sueño de 1,082 estudiantes durante un periodo de cuatro meses.
00:18El estudio, publicado en Frontiers in Psychology, indicó que el 40% de los participantes consideró que su dieta afectaba su sueño y el 5,5% señaló que influyó directamente en sus sueños.
00:31Entre los alimentos mencionados con mayor frecuencia como posibles causas de sueños extraños o perturbadores, se encontraron los productos lácteos y los dulces.
00:40Un 20,6% de los encuestados identificó los lácteos como factor de alteración onírica.
00:45Los investigadores observaron que quienes padecían intolerancia a la lactosa reportaron pesadillas con mayor frecuencia.
00:52El neurofisiológico Thor Nielsen, de la Universidad de Montreal, explicó que las señales digestivas durante el sueño, como hinchazón o calambres, podrían reflejarse en el contenido de los sueños, incluso antes de que se manifiesten síntomas físicos.
01:06También propuso que las emociones negativas, vinculadas con estos malestares, podrían influir en el contenido emocional de los sueños.
01:13El estudio no detectó relación entre la intolerancia al gluten y las pesadillas.
01:18Los autores sugirieron ampliar la investigación con otras poblaciones y diseñar ensayos controlados que midan la relación entre consumo nocturno de lácteos y alteraciones oníricas.
01:28Con información de Manuel González, Milenio Noticias, Fernanda Pérez Gallegos.