Será una medida factible en aquellos aeropuertos que cuenten con escáneres de última generación, pero Bruselas está decidida a aplicar esta medida "lo antes posible". A ser posible antes de que acabe el verano según algunas fuentes a las que ha accedido este periódico. El límite de 100ml es una de las restricciones más incómodas para los viajeros, junto con tener que sacar el ordenador de la maleta.