Saltar al reproductorSaltar al contenido principal
  • hace 7 años
Sirte, localidad natal de Gadafi, se vacía. Miles de libios huyen ante el que se supone asalto final. Y el panorama es desolador. Los últimos fieles al dictador abandonan la ciudad dejando atrás un drama humanitario. Una ciudad sin alimentos, sin medicinas, salpicada por los constantes bombardeos de la OTAN. Los fieles al régimen, bajo la sospecha de haber sido comprados con dinero y drogas, sin futuro, se motivan con mensajes como el de Saif Gadafi, hijo del dictador, ha sido en una televisión financiada por su padre. Saif, armado con un rifle automático y vestido de uniforme militar, anima a los suyos. "Ahora me voy, pero os mandaré armas", se escucha decir al hijo de Gadafi.  El gentío gritaba: "Dios, Muamar y, simplemente...Libia".

Categoría

🗞
Noticias
Sé la primera persona en añadir un comentario
Añade tu comentario

Recomendada