Un fenómeno natural espera que la UNESCO lo declare patrimonio de la humanidad

Los rayos y el relámpago del río Catatumbo, al sur del lago de Maracaibo en el occidente de Venezuela, prácticamente podrían describirse como un espectáculo cuya luminosidad semeja a la de los fuegos artificiales pero sin sonido, salvo que se presagie tormenta. Su duración puede ser larga porque pueden comenzar antes de la medianoche y extenderse hasta el amanecer, de allí que hay que estar preparados para el trasnocho; y pueden tener un espectro de 360 grados si el cielo está despejado.
Este fenómeno meteorológico tiene su origen en la confluencia de corrientes de aire frío provenientes de la corrillera de Los Andes y la serranía de Perijá, junto a los de vientos propios de una cuenca lacustre y la continua formación de nubes debido al calor que predomina en el día, no así en la noche cuando puede registrarse temperaturas hasta por debajo de 20 grados centígrados.