Los niños mayores con autismo profundo no pueden comunicarse verbalmente, aparentan un aislamiento total, aparentan no entender lo que pasa en su entorno o alrededor, y tienen una expresión y mirada “ida”. Tienden a autolesionarse, y los padres o familiares no asimilan facilmente el verse ante “un extraño”.Al presentarse violentos berrinches, gritos desmedidos, mordiscos, escupitajos, destrozos, es difícil interactuar con ellos o apaciguarlos; muchas veces estas conductas llegan a extremos insoportables. autismo trata de un importante desorden en el desarrollo del cerebro que deteriora el habla, la interacción social y sexual y causa comportamiento repetitivo, restringido y a veces, agresivo en el afectado. Suele detectarse entre los dos y tres años de edad, y dura de por vida. Normalmente, quienes sufren de autismo severo se vuelven bastante agresivos, realizan acciones de forma mecanizada, y no interactúan con muchas personas de su entorno más que con sus padres o tutores.