El empresario Justo Ferreira y su hija Patricia, imputados por contrabando, producción de documentos no auténticos y asociación criminal en el caso de la estafa de los insumos chinos a través de las empresas Imedic y Eurotec, se abstuvieron de declarar hoy durante una visita al Ministerio Público.
Sé la primera persona en añadir un comentario