- hace 2 días
Maria Teresa Montilla, una mujer joven, refinada, culta y gran ejecutiva es la unica heredera de un grupo empresarial muy poderoso pero que lamentablemente va a la quiebra. Cuando ella cree que todo esta perdido su padre, muy enfermo, le confiesa que son propietarios de una finca en el Llano que es la unica alternativa para sacarlos de la ruina. La hacienda La Tormenta esta dirigida por su ahijado Santos Torrealba, un hombre sensato, fiel a sus amigos pero algo rudo y bruto. Desde que Maria Teresa deba hacerse cargo de la hacienda su vida cambiara para siempre al conocer a Santos, una persona que en principio es un polo opuesto para ella. Por su lado, Santos es un mujeriego empedernido que nunca creyo que pudiera sentir nada igual por una persona tan refinada. Pero para Maria Teresa la vida dura en el campo no sera lo mßs dificil de resolver. La hacienda es un lugar desesado por mucha gente ya que en sus limites se esconde petroleo y sirve para muchos como zona de contrabando.
Encuentra todos los capitulos en https://sites.google.com/view/cyberhome-nicaragua
Encuentra todos los capitulos en https://sites.google.com/view/cyberhome-nicaragua
Categoría
📺
TVTranscripción
00:00Hicimos lo que pudimos, pero fue inútil.
00:13Lo lamento, señora Bernarda.
00:16No, no es verdad, no.
00:21Perdimos su rastro, señora.
00:24Nos cayó la noche y ya no pudimos seguir.
00:25Pero mañana, mañana vamos a seguir muy temprano, te prometo.
00:32Santos, por Dios, tú no puedes, tú no puedes dejar de buscar a Trinidad, tú tienes que salvarla.
00:40Tú tienes que ayudarme, tú tienes que hacerlo.
00:42Ya le dije que mañana vamos a seguir, ahora no podemos.
00:47Mañana, señora.
00:48Dios mío.
00:51Santos, perdí a mi hija.
00:54Dios mío, la perdí.
00:55Dios mío, la perdí.
01:02Yo voy a encontrar a su hija.
01:05Sí.
01:06Se lo juro.
01:08Así tenga que mover cielo y tierra.
01:11Yo le voy a traer a su hija, sana y salvo.
01:14Se lo juro.
01:15El secuestro de esa condenada ciega es lo peor que nos pudo haber pasado.
01:28Ahora todos nuestros planes se fueron al infierno, Simón.
01:31Ah, ya, ya, ya, quieres calmarte, por favor.
01:33¿Y cómo quieres que me calme con lo que está pasando?
01:36No entiendo cómo tú estás tranquilo, sabiendo que todo este maldito pueblo está pendiente de la embarcación y del puerto.
01:43Si descubren nuestro negocio, Simón, todo esto se acabó.
01:47¿Dónde va a quedar el contrabando?
01:49¿Qué va a pasar con las drogas, eh?
01:51¿Qué quieres que haga?
01:53Cualquier movimiento mío en este momento puede levantar sospechas.
01:56Pero tú eres amigo del traficante ese.
02:01Yo no soy amigo de nadie.
02:04Ya les había advertido a estos tipos que no robaran mujeres aquí.
02:07Que toda esta zona está prohibida para ellos.
02:09Sí, pero tú los conoces y sabes dónde encontrarlos.
02:12Así que búscalos y diles que nos devuelvan a esa niña.
02:16Exigales que lo hagan hoy mismo.
02:18A mí, nadie me grita.
02:24Y menos en mi propia casa.
02:27Sí.
02:28Yo solo estoy preocupado por nuestro negocio, Simón.
02:32Sin contar los planes que teníamos con el viejo Montilla.
02:35Sí, lo sé.
02:36Lo sé, yo no he dejado de pensar en eso.
02:39Tengo una persona vigilando el trapiche.
02:40Había pensado decirle que se regrese.
02:42Que nuestros planes habían cambiado.
02:45Pero ahora ya no sé qué hacer.
02:46¿Y tú crees que todavía podemos mandar a matar al viejo?
02:49Tenemos que hacerlo.
02:51Y va a ser esta misma noche, como lo habíamos planeado.
02:55Tú habías arreglado una cita del viejo con Santos en el trapiche, ¿verdad?
02:59Sí, sí, sí.
03:00Pero ahora con este secuestro, no sé, no sé si el viejo quiera ir.
03:03Pues tendrás que convencerlo.
03:05El viejo tendrá que ir al trapiche a encontrarse con Santos.
03:08Pero lo que va a encontrar es otra cosa.
03:13Va a encontrar el camino al infierno.
03:17El viejo Ernesto Montilla va a morir esta noche.
03:23Y Santos va a pagar por esa muerte.
03:26Pobre criatura del señor, Dios mío.
03:33Debes estar muerto del frío, animalito.
03:37Ven, gatito, ven.
03:38Yo te voy a salvar, te voy a proteger.
03:41Ven, ven, gatito.
03:42Ven para acá.
03:43¿Qué pasa, Lirio?
03:47Solita.
03:47¿Tú qué haces por aquí?
03:50Deberías estar en tu casa descansando.
03:52No, con todo lo que ha pasado hoy, no he podido.
03:56Además, tengo que ir a comprar el pan para la cena.
03:58Te acompañaría, pero...
04:01no puedo dejar a este pobre animalito en defensa aquí abandonado.
04:04¿Quieres que te ayude?
04:05No, no, no te molestes, gracias.
04:08Además, con todas las impertinencias de mi parte en el pasado,
04:11creo que es suficiente, ¿no?
04:13No, si no es ninguna molestia.
04:15No sabía que te gustaban los animales.
04:18La verdad, ni siquiera yo lo sabía, Solita.
04:21Andaba tan alejado de las maravillas de nuestro señor.
04:26Que ahora que lo encontré, sí puedo disfrutar de cada una de sus creaciones.
04:31¿Sabes algo?
04:33Desde que encontré a Dios en mi vida,
04:36puedo mirar al cielo y darme cuenta de mi pequeñez.
04:40Y también me doy cuenta que he desperdiciado mucho tiempo,
04:43así que tengo que recuperarlo para entregárselo a mi padre celestial.
04:46Claro, claro.
04:48Pues, ¿qué te digo, Alirio?
04:50Dios te ha tocado.
04:52Sí, eso es cierto.
04:54Tanto que en este preciso momento me han dado unas ganas terribles
04:58de irme a la iglesia a orar.
05:00Pipe, háganme un favor.
05:03Váyanse a mi casa y le dicen a Gisela
05:05que por favor le dé de comer a este gatito.
05:07Y a ustedes también.
05:10Chao.
05:11Como te he estado diciendo, Solita,
05:16la llegada de Dios a mi vida
05:17ha sido lo mejor que me ha sucedido.
05:21Que el señor te proteja, hermana mía.
05:26¿Será verdad?
05:30¿O será que me estás jugando una broma?
05:33Eso tengo que ver.
05:36Permítame ayudarle, padre Benito.
05:38A ver.
05:38Perdóname, Damián.
05:41Se me cayeron al piso sin darme cuenta.
05:43No se preocupe, padre.
05:44No pasa nada.
05:46Absolutamente nada.
05:50Vaya, vaya, jovencito.
05:52Veo que eras bastante loquito antes de que mi Dios te llamara.
05:56Ese no soy yo, padre.
05:58Ese es mi hermano gemelo.
05:59¿Un hermano?
06:03Pero si es que son igualiticos.
06:07¿Y por qué no me hayas hablado de él?
06:09¿Dónde vive tu hermano?
06:11Lo que pasa, padre, es que hace mucho tiempo no sé nada de él y...
06:15por eso no se lo había mencionado.
06:17Lo último que supe de Cosme es que andaba por aquí en el llano.
06:22¿Cosme?
06:23Sí.
06:25Mi madre era una mujer muy católica y a ambos nos puso el nombre de dos santos mártires que también eran gemelos.
06:32Cosme es mi otra mitad, padre.
06:37Y aunque estuvimos al tiempo en el seminario, ambos tomamos caminos distintos.
06:41Él siguió por el camino de la ambición y la bajeza humana, mientras que yo seguí fiel a nuestro señor.
06:49Ah.
06:51Por eso es la ansiedad que te invade a veces.
06:55Sí.
06:56Tengo una tarea por terminar.
06:58Señor, siento que si no logro salvar a mi hermano, estoy fracasando como sacerdote.
07:05Que mi Dios te ilumine el camino, Damián.
07:08No hay nada más hermoso que salvar a un hermano de sangre.
07:12De alguna u otra manera lo voy a encontrar.
07:14Porque Dios, que hace milagros, me lo va a conceder.
07:18Manco, ¿ya le diste de comer a las mujeres?
07:21No quiero que la mercancía llegue estropeada a Puerto Vergel.
07:25Sí, mi capitán.
07:26Yo les di comida, pero no la tocaron.
07:30No hacen sino chillar.
07:33Todas esas desgraciadas son iguales.
07:38Eso les pasará mañana.
07:41Cuando les empiece a doler el estómago van a querer comer.
07:44Se van a pelear hasta por un pedazo de pan.
07:47Disculpe, mi capitán, pero...
07:54Yo creo que deberíamos alejarnos de esta zona por un buen tiempo.
08:00¿Tienes miedo?
08:05El miedo no sirve para nada, Manco.
08:08Confía en mí.
08:12Sí, mi capitán.
08:15Nos quedamos aquí.
08:20Este lugar es una mina.
08:23En ningún lugar hay tantas mujeres.
08:24Ni tantos compradores.
08:28Además, tengo otro motivo para seguir aquí.
08:34Cosme, ¿dónde estarás?
08:36Si eras el más fervoroso, ¿con qué pasión hablabas de Dios?
08:39¿Por qué caíste, mi querido hermano?
08:56Manco.
08:59Tráeme a la ciega.
09:01Dile que se ponga esto.
09:03Que esta noche va a cenar con el capitán.
09:04Pero, señor, usted nunca antes había hecho esto.
09:11Siempre dice que la mercancía no se puede...
09:13Ella no es mercancía, Manco.
09:20Ella es un ser muy especial.
09:24Que nunca podrá ver el rostro de la maldad.
09:30Y esta noche, Trinidad tendrá el honor.
09:34De estar conmigo.
09:39Mañana iré contigo, Santos.
09:43¿Conmigo, señora? Pero...
09:44No acepto...
09:46Un no como respuesta.
09:50Es mi hija.
09:51Mi hija que está en manos de esos hombres.
09:55Así que mañana iré a buscarla.
09:57Contigo.
09:59Recorreré todos los caminos.
10:01La buscaré debajo de las piedras.
10:06Me volveré vieja buscando a mi muchacha.
10:10Pero yo a esta casa no regreso.
10:12Sin ella.
10:13Y así será, señora.
10:16Y mantenga esa rabia que tiene,
10:17que es la fuerza que necesita para lograrlo.
10:19Gracias, Santos.
10:22Gracias.
10:23La vendré a buscar por la madrugada.
10:26Permiso.
10:37Perdóname, Trinidad.
10:38Déjeme decirle que este asunto se complicó con la hija de Bernarda Ayala,
10:46secuestrada en el mismo lanchón que nos trae la mercancía.
10:49La verdad.
10:50Esa es una jugarreta que nos hizo el destino.
10:53No veo en qué nos puede afectar a nosotros.
10:56Estoy seguro de que esto va a traer la atención de mucha gente.
10:59Y lo que más me preocupa es que los Montilla puedan dar aviso al gobernador.
11:04Usted no sabe la cantidad de problemas que me ha traído a mí la ciega hecha.
11:09¿A usted?
11:10¿Por qué?
11:12Porque mi hijo se enamoró de ella y Bernarda se la negó.
11:17Haciendo que el muchacho se volviera loco.
11:19Esas ayalas son como una maldición.
11:21Por eso hay que acabar con esto.
11:24Saber a quién le tocan las tierras y empezar a eliminar gente.
11:28Yo creo que a las primeras que hay que eliminar es a las ayala.
11:33Esas niñas van a heredar.
11:36Cipriano, ¿usted por qué no se encarga de eso?
11:42Un momento.
11:43¿Por qué yo?
11:45Simón siempre se ocupa de esas cosas.
11:48Yo soy el jefe civil, la autoridad máxima de este pueblo y no me puedo arriesgar.
11:52Simón está obsesionado con Bernarda Ayala.
11:55En cambio, Ernesto Montilla sí vale.
12:00Y Simón se está encargando de eso.
12:06Esta misma noche Ernesto Montilla muere.
12:12Simón va a cumplir con su parte.
12:16Usted debería cumplir con la suya.
12:18Encárguese de la sayala.
12:25¿Qué hace usted de aquí?
12:28Cálmate, cálmate.
12:29Sé que las cosas están un poco alteradas por la desaparición de...
12:33de tu cuñada, pero...
12:36venía a recordarte que esta noche tienes un asunto pendiente.
12:39¿Qué asunto?
12:40Bueno, lamentablemente no tiene que ver conmigo.
12:42Es don Ernesto quien me pidió que te citara en el viejo trapiche.
12:48¿Por qué no me lo pidió él mismo?
12:50Ah, eso sí, no lo sé.
12:53Pero la verdad, Santos, es...
12:54es una lástima que hayas caído en desgracia con el viejo.
12:58Ibas a heredar parte de estas tierras, pero ahora...
13:00¿Qué me importa?
13:03Mientras tenga estas dos manos para trabajar, tengo una gran fortuna.
13:05Con palabras bonitas, Santos, no le vas a darte comer...
13:11ni a tu esposa, ni a tus hijos.
13:14Yo de ti trataría de arreglarme con él.
13:18No voy a hablar de tierras, ni de dinero con mi padrino.
13:22Pero sí le voy a reclamar.
13:23¿Por qué obligó a su hija a casarse con usted?
13:27Yo no pienso discutir contigo, Santos.
13:31¿Entonces irás?
13:33Dígale que ahí estaré.
13:35Perdóname si soy inoportuno, Bernarda.
13:45Claro que no.
13:49Usted siempre será bienvenido a esta casa, don Ernesto.
13:52Gracias.
13:57¿Qué pasó?
13:59¿Supo algo de Trinidad?
14:01No.
14:02Todavía no sabemos nada.
14:05Ahora solo podemos esperar.
14:08Y rezar para que no le haya pasado nada a mano.
14:13Esperar.
14:16Esperar para mí es una tortura, don Ernesto.
14:19de solo sentir que mi niña está en manos de esos desgraciados.
14:29Cada minuto que pasa,
14:32cada segundo,
14:34es como si me clavaran un puñal aquí en el pecho.
14:37llora, Bernarda.
14:41Llora, Bernarda.
14:43Saca todo lo que tienes adentro.
14:51Perdóneme.
14:55Yo no debo llorar.
14:57Yo...
14:57Yo tengo que ser fuerte.
14:59Y lo eres, Bernarda.
15:02Siempre lo has sido.
15:04Yo te he visto luchar como una leona
15:06para levantar esas hijas que son tu bendición.
15:09Eres una luchadora, Bernarda.
15:14Siempre superaste todos los obstáculos.
15:17Usted...
15:19ha sido como un padre para mis hijas.
15:23Y ha sido mi protector.
15:26Y lo seguiré siendo, Bernarda.
15:29Quiero que sepas que en lo más hondo de mi corazón
15:32estás tú.
15:35Y tus hijas.
15:36Gracias.
15:42Gracias, don Ernesto.
15:44Usted siempre ha sido un hombre muy bondadoso.
15:47No, no es solo bondad.
15:50Yo siempre te he...
15:53admirado.
15:55Y te he respetado.
15:59Y siento un gran cariño.
16:03Yo te quiero, Bernarda.
16:04a ti
16:07y a tus hijas.
16:18Tú, toma.
16:21¿Para qué?
16:24Es para la ciega.
16:26Ayúdala a vestirse.
16:28El jefe la quiere ver
16:29ahora mismo vestida con esos trapos.
16:32No, no, no.
16:33No dejes que me lleve a Tibisay.
16:36Ese hombre es el demonio.
16:38Me va a lastimar, me lo dijo.
16:41No te la lleves.
16:42Ella está muy mal.
16:43Mírala.
16:46Ayúdala a vestir que ya vengo por ella.
16:53Ven, Trinidad.
16:54¿Qué?
16:54¿Qué?
16:54Tienes que ponerte este vestido.
17:00Es mejor no pelear con ellos.
17:03Hice todo lo que pude.
17:06¿Qué?
17:07¿Qué me van a hacer?
17:09Tenía, tienes que ser fuerte.
17:19Ay, Terjecita, ayúdame.
17:22No me abandones.
17:25No permitas que ese hombre me haga daño.
17:27Padre nuestro que estás en los cielos,
17:36santificado sea tu nombre.
17:38Venga.
17:38Ay, Dios mío, ¿es verdad?
17:40Hágase, Señor, tu voluntad.
17:42Esto es un milagro.
17:44Danos hoy nuestro pan de cada día.
17:47Perdona nuestras ofensas.
17:48Alirio, ¿puedo acompañarte a orar?
17:54Claro que sí, Solita.
17:55¿A nuestro Señor le gusta que oremos como hermanos?
18:01Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.
18:04Entonces, si es verdad que te dedicas al sacerdocio, ¿ah?
18:10¿Qué otro camino me puede quedar a mí, Solita?
18:13No, no.
18:14Yo solo preguntaba.
18:17No tengo a quién más entregarle este corazón ardiente.
18:21Sino a Cristo.
18:23Claro, claro.
18:23Tienes toda la razón.
18:26Es solo que, pues, yo pensaba que de pronto entre tú y yo...
18:33¿Entre tú y yo qué, Solita?
18:39Nada, olvídalo.
18:41Me parece milagrosa tu vocación y pienso apoyarte.
18:46Gracias.
18:47Gracias.
18:49Y esta es la mayor muestra de amor que puede tener una persona hacia otra.
18:53Oremos, ley.
18:56Oremos juntos.
18:58Pidámosle al Señor.
19:00Dios te salve, María.
19:02Y la madre de gracias.
19:04El Señor es con su voluntad de tu vientre, Jesús.
19:07Santa María.
19:08Todos estamos muy consternados, don Ernesto.
19:13Ya lo sé, Nani.
19:16Vengo de ver a Bernarda.
19:18Y está muy mal.
19:21Bernarda es una mujer muy fuerte.
19:23Y nunca la había visto así.
19:26A punto de derrumbarse.
19:30Me imagino por lo que está pasando esa pobre mujer.
19:33Claro, y yo pienso en María Teresa.
19:36Si algo le llegara a pasar,
19:38yo no lo soportaría.
19:41Me moriría, Nani, me moriría.
19:43Yo también me moriría, don Ernesto.
19:45No, porque María Teresa para mí es como si fuera mi hija.
19:50Sangre de mi propia sangre.
19:53Ven acá, Natividad.
19:54Siéntate.
19:59Tú siempre has estado conmigo.
20:02Aún en los momentos más difíciles.
20:06Siempre me has dado consejos.
20:08Y me has regañado.
20:10Y me has preparado esos cosimientos tuyos
20:16que me vuelven el alma al cuerpo.
20:18¿Qué es lo que le pasa, don Ernesto?
20:20Porque usted cuando me habla así
20:21es porque tiene el corazón cargado de tristeza.
20:24Sí.
20:26Y es por Bernarda.
20:29Yo fui a verla para consolarla.
20:32Y resulta que ahora el que necesita consuelo soy yo.
20:36No, me duele tanto verla así
20:40y no poder hacer nada por ella.
20:44Ella es una mujer muy fuerte, don Ernesto.
20:47Pero es mujer Natividad.
20:49Y necesita un hombre a su lado.
20:53¿Sabe qué?
20:53Hace años yo pensé que ese hombre podía ser usted.
20:57¿Dani?
20:59Qué bueno que te encuentro.
21:01¿Qué pasa, Enrique?
21:03Es Santos.
21:04Está en el trapiche.
21:07Insiste en hablar contigo.
21:09Hablarme.
21:11Bueno, permisito.
21:12Voy a traerle ese cosimiento que tanto le gusta.
21:17Tú sabes que él está muy resentido
21:20y no sé quién hablarte.
21:22¿Por qué primero no se preocupa
21:23de su matrimonio de Valentina
21:24y después cualquier otro día hablamos?
21:27Ernesto,
21:29yo creo que lo mejor es que sea esta noche.
21:31Él está empeñado que sea hoy mismo
21:33y yo creo que es lo mejor.
21:35Está bien.
21:38Voy a hablar con él.
21:41Te advierto que está molesto.
21:43Muy molesto.
21:45Pues tiene dos trabajos.
21:48Molestarse
21:48y después tranquilizarse.
21:58Bueno.
21:59Ya cumplí con mi parte.
22:03Ahora solo falta que la muerte haga el resto.
22:05¿Marino?
22:15¿Marino?
22:16No, ni modo.
22:21Habrá que esperar.
22:27¿Viste algo?
22:31No, no, tranquilo.
22:32No hay nadie aquí.
22:32Solamente somos tú y yo.
22:33Nadie más.
22:34Eh, eh, eh.
22:35Nadie más.
22:42¿Qué pasa, Lirio?
22:46Nada.
22:48Mosquito que anda por aquí.
22:50Te quiere picar.
22:51Pero no es su culpa.
22:52Él simplemente es una creación de nuestro Señor.
22:56Igual que nosotros.
22:59Ay, Lirio, increíble que seas tú de verdad.
23:02Y pensar que fui yo la que despertó esos sentimientos tan nobles.
23:08Me hace llenar de mucha fe.
23:10Pero sobre todo, me hace sentir responsable por ti.
23:14Y por tu vocación.
23:16Gracias, Solita.
23:18No sabes cuánto te lo agradezco.
23:21Pensar que...
23:23Que tú has sido mi inspiración.
23:24El pilar de mi fe.
23:27¿Esto?
23:28Quietos, los dos.
23:29O los temo.
23:32¡Respeta la casa de Dios!
23:34¡Dalea!
23:35¡Dalea!
23:36¡Al suelo!
23:38¿Qué vamos a hacer?
23:40Ya, cálmate.
23:40Hagamos caso.
23:41Ya, ya.
23:41¡Al suelo!
23:42Ya, ya, ya.
23:45¡No mire para acá!
23:48Ese señor que está buscando.
23:50Dios mío, un ladrón está saqueando tu casa, señor.
23:54Cálmate, cálmate.
23:55Si eres un ladrón, pero...
23:56Un ladrón con muy mala suerte.
23:58Porque aquí lo único que hay es un cáliz y una copa de cristal.
24:02Nada más.
24:03¡Usted!
24:04¡Ya!
24:04Son solos a mí.
24:06¡No!
24:06Les di una orden.
24:08¡Se casan!
24:10Los de la casa de Dios.
24:12Los mando a derechito al encarno.
24:14¡No!
24:27Está bien, Santos.
24:29¿Querías hablar conmigo?
24:30Pues bueno, aquí estoy para que aclaremos todo de una vez.
24:38Parece bien, padrino.
24:40¿Usted irá?
24:43¿Qué te traes ahora, Santos?
24:46¿Qué me traigo?
24:47Sí.
24:49¿Qué es lo que quieres decirme?
24:51¿Qué es lo que quieres hablar?
24:53Nunca pensé que tú eras de los que matan al tigre y se asustan con el cuero.
24:59No, si yo no siento miedo.
25:02Lo que siento es rabia.
25:05Siento un rencor que me están arcomiendo el pecho contra usted, padre.
25:13Muy bien.
25:14Ahora sí empiezas a soltar el veleno.
25:17¿Y no es gratis?
25:17No.
25:18Yo siempre le fui leal.
25:22Yo siempre lo respeté a usted y a todos en su familia.
25:25Siempre le creí ese cariño que me tenía.
25:27Le creí hasta cuando decía que yo era ese hijo que le hubiera gustado tener.
25:30Y es cierto, Santos.
25:31Yo siempre fui sincero contigo.
25:34¿Sincero?
25:35Usted me usó.
25:37Me usó hasta que ya no le hice falta.
25:39Y luego me echó a la calle como si fuera un perro viejo y sarnoso.
25:44¿De qué hablas?
25:46De usted.
25:48Y de mí.
25:52Y de mis sentimientos hacia su hija.
25:54¿Cómo te atreves a mezclar a María Teresa en esto?
25:56¿Cómo pudo burlarse de esos sentimientos que yo tenía?
25:59Ese amor tan puro que le traía a su hija.
26:04Eso no se lo voy a perdonar nunca, padre.
26:07Nunca.
26:09Un momento, Santos.
26:11Yo pensé que ese asunto tuyo con María Teresa
26:15estaba aclarado entre nosotros.
26:18Que creí que querías hablar conmigo para reclamarme por las tierras.
26:22¿Tierras?
26:23¿Qué tierras, padrino?
26:25¿A mí cuándo me han interesado sus tierras?
26:28Usted puede hacer con sus tierras lo que le dé la gana.
26:32Usted me paga tiempo por mi trabajo.
26:34Y para mí eso es suficiente.
26:36Yo no necesito más.
26:37Santos, creo que aquí hay un malentendido.
26:45Enrique me dijo que tú querías a...
26:46Enrique.
26:54Creo que Enrique va a tener que aclarar muchas cosas.
26:57Gracias.
27:02Papá no va a comer con nosotras.
27:04Tu papá no está, María Teresa.
27:05Salió hace rato.
27:06¿Y para dónde fue hasta ahora?
27:09Solo sé que fue a reunirse con Santos Torreal, padre.
27:15¿Tú sabes algo de eso, Enrique?
27:18Ay, María Teresa, no me mires así.
27:21Lo único que sé es que tenían un asunto que hablar.
27:23Se trata de la herencia, seguramente.
27:27Santos está muy disgustado porque tu papá lo iba a desheredar.
27:30¿Eso es todo?
27:32No, eso no puede ser cierto.
27:34Ay, María Teresa, por favor.
27:36Ese capataz pensó que se ganó esas tierras y que tiene derecho,
27:39pero en últimas es...
27:40Sí, es un campesino.
27:42¿Y tú sabes cómo es esa gente?
27:43Yo no entiendo por qué ellos tenían que hablar
27:45y muchísimo menos fuera de la casa.
27:48No sé, pero a mí esto no me está gustando nada.
27:51Permiso.
27:51¿Y qué vas a hacer ahora?
27:52Voy a buscar a papá.
27:53Ay, María Teresa, estamos comiendo.
27:55Deja que esos dos hombres arreglen sus diferencias a solas, ¿sí?
27:58Nani, ¿para dónde fueron?
28:00Al trapiche, María Teresa.
28:03Bueno, está bien, voy contigo.
28:04¿Está bien, María Teresa, ¿crees que iba a ser tan fácil ocultarlo?
28:28Lo que yo tengo.
28:31¿Ustedes dos?
28:32¡No me miren!
28:33¡No me miren!
28:35Se levanten.
28:36Quietos ahí.
28:44No es posible, Enrique.
28:46La verdad no entiendo por qué dejaste ir a papá solo al trapiche.
28:49Es que no recuerdas que él y Santos están enojados.
28:53La verdad no entiendo por qué sientes que debí acompañarlos.
28:56No entiendo tu actitud, María Teresa.
28:59¿Acaso desconfías de Santos?
29:00Ay, no, no es eso, Enrique.
29:04Lo que pasa es que los dos tienen un carácter muy fuerte
29:06y no quiero que se peleen más.
29:08¿Pero por qué estás tan intranquila?
29:11¿Acaso temes que Santos pueda agredir a tu papá?
29:14No.
29:15No.
29:16No es eso.
29:18¿Entonces?
29:21Bueno, ya te dije.
29:22Quiero impedir que sigan discutiendo.
29:25Yo sé que los dos se quieren,
29:26pero son muy orgullosos.
29:27Y cuando empiezan a pelear, ya saben.
29:29Ay, sí, pero perdóname.
29:30Cuando hay tierras de por medio,
29:32las cosas son a otro nivel.
29:34La gente de este pueblo es capaz de...
29:36de matar por un pedazo de tierra.
29:37Ay, por favor, Enrique, ¿qué tonterías estás diciendo?
29:40Ninguno de los dos es capaz de hacer algo tan horrible.
29:43¿Qué ocurre, Enrique?
29:46No sé.
29:47¿Por qué se detuvo el coche?
29:48No tengo ni idea, se apagó.
29:51Enrique, tenemos que llegar cuanto antes al trapiche.
29:54Por favor, haz algo.
29:55¿Y qué quiere que haga?
30:00Por favor, haz algo.
30:01Intenta hacer algo, arréglalo.
30:02Ya, ya, me voy a bajar, pues.
30:04Tengo que dar tiempo para que se me salgan del pie.
30:25Yo siempre desconfié del marido de su hija,
30:27pero eso de decirle a usted
30:30que yo quería verlo
30:31o decirme a mí que usted quería hablar conmigo,
30:34eso es de vieja chismosa.
30:37Pero no entiendo por qué lo hizo.
30:41Si Enrique nos hace hablar a los dos,
30:44sabe que vamos a aclarar muchas cosas.
30:48Tiene que tener una explicación.
30:49Y ojalá sea una explicación muy buena.
30:52Ah, no se haga ilusiones, padrino.
30:55Seguramente le sale con un cuento.
30:56Porque ese es más mañoso que burro viejo.
31:01Bueno.
31:05Buenas noches, padrino.
31:19Enrique no me gustan ni los chismes,
31:37ni las intrigas, ni las mentiras.
31:42Pero ¿por qué lo hizo?
31:44Enrique no ganó.
31:49¿Quién eres?
31:59¿Qué quieres?
32:10Un momento.
32:12¿Tú eres empleado de Simón Guerrero?
32:15Sí, señor.
32:16Mi nombre es Abel Caín.
32:19Y mi señor don Simón
32:20me envió para entregarle este regalito.
32:25Don Ernesto,
32:26si sabe rezar,
32:28comience
32:29ahora.
32:32Ahora mismo.
32:38El testamento.
32:40Por fin tengo el testamento.
32:42¿Azalea?
32:52¿Qué hace usted aquí?
32:55Simón,
32:56¿por qué me abandonaste en la fiesta?
32:59¿No te imaginas el trabajo que tuve para regresar?
33:04Eres malo.
33:06Malo.
33:06Usted dirá
33:08qué puedo hacer para remediar mi falta.
33:12Lo primero
33:13es que no me hables como si fuera una señora
33:18porque no lo soy.
33:21Podrías
33:21acercarme un poco más a ti, por ejemplo.
33:25¿Háblame de tú?
33:29Claro que sí.
33:31Tú me agradas.
33:33Resultas una mujer
33:35muy interesante.
33:38Alirio.
33:39Alirio,
33:40el ladrón ya se fue.
33:43Alirio.
33:44Silencio, Solita.
33:45Ese hombre nos puede hacer un daño.
33:48Váyate.
33:49Pero yo escuché cuando se fue.
33:53¿Por qué no te tranquilizas?
33:54A lo mejor puede estar por allí escondido
33:55esperándonos.
34:04¿Tú no estás segura
34:05que escuchaste que se fue?
34:11¿Me disculpas un segundo?
34:15Tú eres una mujer hermosa.
34:25Hermosa.
34:27Sensual.
34:28Y muy,
34:30muy interesante.
34:35Eso me gusta más, Simón.
34:38Mucho más.
34:41Estás aprendiendo
34:42cómo se conquista
34:43a una mujer.
34:45Padre Damián.
34:52Padre, abra, por favor.
34:53Padre.
34:54Padre, es urgente.
34:56Ya voy, ya voy.
35:00¿Qué pasa?
35:02¿Por qué golpean hasta ahora?
35:04Padre,
35:06teníamos que venir a decirle
35:07que algo ha ocurrido en la iglesia.
35:09¿En la iglesia hasta ahora?
35:10Sí.
35:11Estábamos orando con Alirio
35:12cuando de pronto
35:13entró un señor
35:14con la cara tapada
35:15y casi nos mata.
35:17Sí, padre.
35:18Mire,
35:19ese hombre nos amenazaba
35:20para que no lo miráramos.
35:22Por supuesto,
35:22yo no le di su merecido
35:23porque no quería
35:24que le ocurriera nada solita.
35:26Pero estaba como loco,
35:27como si estuviera buscando algo.
35:29Sí,
35:29después vimos el desastre
35:30que dejó en la iglesia.
35:31Pero qué extraño,
35:32en la iglesia no hay nada de valor.
35:33a menos que sea
35:36lo que estoy pensando,
35:38¿no?
35:41No llores más,
35:42Trinidad.
35:45Dios mío,
35:46ayúdame.
35:48No me abandones.
35:50Dame fuerza,
35:51por favor.
35:51vamos.
35:57Vamos.
36:01Por tú,
36:02la maldita ciego.
36:04Vamos.
36:14Vamos.
36:15Vamos.
36:15Vamos.
36:15Vamos.
36:15Vamos.
36:16Vamos.
36:16Vamos.
36:16Vamos.
36:21Manco, lárgate
36:24Ya no te necesito
36:25Aquí tengo todo lo que me hace falta
36:27Trinidad
36:35Eres la mujer más bella que he visto en mi vida
36:38Tranquila
36:44No te va a pasar nada
36:46Te lo prometo
36:47Yo no confío en usted
36:50¿No?
36:51Te prometí que te convertiría en una reina
36:54Y estoy cumpliendo
36:55Y no existe una reina sin joyas
36:59Para adornar su esplendor
37:01Eres mía
37:07Me perteneces Trinidad
37:11Bueno ya Enrique
37:16¿Qué es lo que pasa con la camioneta?
37:19No sé, no entiendo
37:20Todo parece estar bien
37:22No hay ningún cable suelto
37:24No sé
37:25Bueno entonces ¿Por qué no arrancas?
37:26Vámonos por favor
37:27María Teresa
37:29Cálmate ¿Sí?
37:30Estoy tratando de arreglar la camioneta
37:32Mira ¿Sabes qué?
37:35Haz lo que te dé la gana Enrique
37:36Yo me voy caminando
37:38María Teresa
37:39María Teresa por favor
37:40¿Crees que te voy a dejar sola por aquí?
37:42Bueno entonces vámonos de una vez
37:44Ya, ya, yo creo que ya está listo
37:45Ya
37:45Enrique, date prisa
37:51Por Dios
37:51¿Sí ves?
37:57Mariglín
37:57Nos podemos ir
37:59¿Qué te pasa bestia?
38:05Si prefiere ponerse a hablar en vez de ponerse a rezar
38:08Eso es asunto suyo
38:09¿Cómo te atreves a hablarme así?
38:12No me conoces
38:12Yo soy Ernesto Motilla
38:14Y te ordeno que te larguen de mi propiedad
38:17El patrón ordena
38:19Y el indio va a estar
38:20Pero antes
38:22Tengo que entregarle un regalito que le encomendó mi patrón Simón
38:26Le llegó su hora Ernesto Motilla
38:30Nos vemos en el infierno
Recomendada
41:31
|
Próximamente
42:11
40:26
36:52
47:27
39:56
41:06
41:38
47:28
19:59
40:01
39:13