El gobierno de Nayib Bukele acaba de implementar un nuevo régimen disciplinario que se deberá aplicar en todas las escuelas públicas de El Salvador.
Un nuevo memorándum que reviste carácter obligatorio contempla que los estudiantes asistan a las instituciones con el uniforme limpio, cabello prolijo y limpio y un afectuoso saludo a los docentes.
Las extremas medidas no tardaron en generar polémica.
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