Llegar a la playa después de las 8:00 de la mañana puede convertirse en una auténtica odisea. La carrera por ocupar la primera línea de playa ha convertido la arena en un verdadero campo de batalla, donde la colocación temprana de sombrillas se ha vuelto una costumbre para asegurar un buen sitio cerca del mar durante todo el día.
Sin embargo, esta práctica puede tener consecuencias. Sillas vacías y sombrillas prácticamente al borde del agua molestan a quienes llegan más tarde, y en algunos municipios ya se están tomando medidas.
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