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  • hace 7 meses
Transcripción
00:00Música
00:01Durante una conferencia ocuménica en Singapur, había misioneros y pastores del mundo entero compartiendo sus experiencias de vida.
00:23Un representante del mundo islámico mostró la gran dificultad para que el cristianismo penetrara a esa cultura tan enemistada con nosotros por tantos siglos.
00:33El único camino afirmaba, es hacerlo a través de signos, prodigios y milagros.
00:39De otra manera, no solo perdemos tiempo, sino hasta gente.
00:44Por otro lado, un delegado del mundo occidental agregó, para nosotros es aún más necesario ese método.
00:50Antes la gente oraba para que lloviera.
00:53Las presas y los sistemas de riego nos han ahorrado esa oración.
00:58Frente a las epidemias se hacían cruzadas de oración y penitencia.
01:02Hoy las vacunas y los seguros médicos nos hacen olvidarnos de levantar nuestros ojos al cielo.
01:08Nuestro mundo industrializado y secularizado necesita más y más de estas manifestaciones extraordinarias del poder de Dios.
01:15Entendidos de esta manera, los carismas no son opcionales.
01:21Por lo tanto, no es posible desechar los instrumentos que el mismo Jesucristo utilizó.
01:27Quienes desprecian los carismas dejan de lado el plan de Jesús que prometió señales que acompañarían la proclamación del reino de Dios.
01:35Un día lo objetaron al padre Emiliano Tardif.
01:40Hay obispos a quienes no les gustan los carismas y hasta cardinales que creen que son asuntos del pasado.
01:47El padre, con suma sencillez e irrefutable lógica, argumentó.
01:53Pero eso no depende si les gusta o no.
01:57Si leen el Evangelio, se darán cuenta de que Jesús, que es el mismo de ayer, hoy y siempre, se valía de ellos constantemente.
02:08Hemos de estar acompañados de los carismas en nuestra evangelización.
02:12Quizás, en ausencia de estos, no causa ausombro o mucho menos impulsa a llevarnos a la fe,
02:19reduciéndose su poder al mínimo de eficacia.
02:24Desgraciadamente, los carismas han estado ausentes tantas veces que ya hasta parece normal vivir sin ellos.
02:32En la ciudad de Nueva York, la gente ya no ve las estrellas, pero no porque ellas dejen de existir.
02:39Lo mismo pasa con los carismas.
02:41No porque no los hayamos visto por tanto tiempo significa que no existan.
02:46Si la palabra asegura que signos portentosos acompañan la proclamación y esos no se manifiestan,
02:55no habría que negar la existencia de los signos, sino revisar por qué han desaparecido de la nueva pastoral.
03:01La gloria de mi Padre está en que den mucho fruto y un fruto que permanezca.
03:14Aquí en este texto encontramos algo fundamental que delinea claramente nuestra meta.
03:25Nuestra misión es llegar a fructificar abundantemente.
03:29Estamos llamados a la obra más gigantesca de la historia, instaurar el reino de Dios en este mundo.
03:38Hecho más importante que el bim-bam que dio comienzo a las galaxias,
03:43valor más determinante que el descubrimiento de América
03:46y acción más trascendente que la expansión del imperio romano.
03:51Estamos llamados a lo grande.
03:54Nuestra vocación es sublime.
03:57Esto no va contra la auténtica humildad.
03:59Al contrario, la verdadera humildad no consiste en vivir pobre o escondido,
04:06sino en darle a Dios la gloria de todo cuanto hacemos,
04:10sino pensar y presumir que lo hemos logrado gracias a nuestras posibilidades o aptitudes.
04:15Si comparamos a Dios con el sol, nosotros podemos ser como la luna que ilumina la tierra.
04:24La humildad no consiste en ocultar la luz,
04:28sino en reconocer que esa luz que manifestamos no es propia, sino que nos viene del sol.
04:35El Señor no está de acuerdo con que escondamos los talentos que nos ha confiado,
04:39sino que seamos como lámparas encendidas que iluminan a todos los que están en la casa.
04:45Hemos de ser como ciudades edificadas en la cima de la montaña,
04:50luz del mundo y sal de la tierra.
04:53El Señor no nos pide poco.
04:55Espera que hagamos cosas más grandes que Él.
04:59San Juan 14, 12
05:00Cuidado con tener mayor interés en florecer que en fructificar.
05:06En el sentido de centrarse, que el grupo sea grande,
05:10que haya sólida economía para hacer muchas cosas, entre otras más.
05:14Muchas veces el trabajo apostólico se gradúa por elementos aparentes o triunfos creatificantes,
05:22más que por los frutos que produce.
05:25Se buscan éxitos gloriosos o recibir aplausos pasajeros,
05:29que se marchitan como los laureles de victoria.
05:33Generalmente, los que presumen éxitos pastorales se refieren sólo a las flores y no a las frutos.
05:41Los frutos no necesitan presumirse, se muestran por sí solos.
05:46San Pablo dice
05:48El fruto del Espíritu Santo es amor, alegría, paz, fortaleza, amabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio.
06:02Gálatas 5, 22-23
06:04Algunos piensan que estos elementos enumerados por el apóstol son los frutos del Espíritu.
06:12Otros, siendo más fieles a la traducción, afirman que Pablo habla en singular y, por tanto,
06:19el fruto es solamente el amor que encabeza la lista.
06:23Sin embargo, para fieles al pensamiento del apóstol,
06:28debemos entender que hay un solo fruto con nueve facetas diferentes.
06:32Se trata de un diamante polifacético que si lo miramos de un lado,
06:37contemplamos el amor de otro, la alegría y así todos los aspectos.
06:43Es como un arcoíris al que no le puede faltar ni un solo color porque quedaría incompleto.
06:49El fruto, por otro lado, no es algo forzado, sino que es lo más natural de un árbol.
06:57¿Qué hay de extraordinario que un manzano produzca manzanas?
07:02Un aranjo no tiene que hacer ningún esfuerzo para no dar agrios limones,
07:06sino que naturalmente ofrece frutos dulces y apetitosos.
07:11En la vida del Espíritu sucede lo mismo.
07:14Quien tiene el Espíritu de Cristo, corriendo como sangre vivificante,
07:20manifiesta espontáneamente el fruto del Espíritu.
07:24Quien no lo posee, por más esfuerzo que hiciera,
07:28no lograría expresar esa alegría, paz y amor que solo vienen del Espíritu de Dios en nosotros.
07:36La vid y la higuera.
07:37Por otro lado, Jesús habla muy claro del árbol que no da fruto.
07:44Si a la rama que da fruto se le poda para que dé más fruto,
07:48y la vid que no fructifica es arrancada para quemarla,
07:52al siervo que no capitaliza los talentos se le destituye,
07:57se le quita lo que tiene y se le echa fuera.
08:00Para aclarar más esta idea, encontramos un episodio que a todos impresiona.
08:09Este pasaje es tan duro que si Mateo y Marcos lo narran,
08:13el misericordioso Lucas lo suprime,
08:16en el caso de la maldición de la higuera estéril.
08:19Por el camino que sube de Betán y a Jerusalén,
08:23Jesús encontró una higuera silvestre que extendía su frondoso follaje,
08:27ofreciendo fresca sombra a los traseúntes y peregrinos.
08:32El maestro se acercó, buscó y rebuscó por todas partes sin encontrar fruto alguno.
08:38Luego se agachó y hurgó entre las ramas cargadas de hojas,
08:42pero nada encontró.
08:45Entonces, con inusitado y hasta injustificable enojo,
08:49maldijo la higuera,
08:50la cual inmediatamente se secó marchitándose las hojas.
08:54Las ramas se doblaron y el tronco se pudrió
08:58como si hubiera sido alcanzado por un rayo.
09:03Podríamos pensar que Jesús exageró,
09:06sobre todo si recordamos que no era tiempo de higos.
09:10Además, estando en el camino,
09:12tal vez otros se habían adelantado y comido todo cuanto tenía.
09:16Tal vez el dueño había recogido sus frutos en día anterior.
09:19En fin, podríamos encontrar mil excusas,
09:24pero el mensaje radica precisamente no poco sino mucho,
09:30no para algunos sino para todos, cuando lo precisen.
09:35No debe depender de la estación,
09:38sino de la necesidad de los demás.
09:39¡Gracias!
09:40¡Gracias!
09:41¡Gracias!
09:42¡Gracias!
09:43¡Gracias!
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