Mi papá estudia en mi universidad y todos piensan que salimos

  • hace 5 años
¡Hola! Mi nombre es Cassidy, soy una estudiante universitaria... y allí solo estoy un año por delante de mi papá. Sí, sé que actualmente no hay nada sorprendente en que las personas mayores vayan a la escuela. Pero cuando tu padre resulta ser más interesante para tus compañeros universitarios que tú, eso es patético.

Todo comenzó cuando yo solo era una estudiante de primer año. Al principio, todo para mí era como para todos los demás: un poco aterrador, un poco molesto, pero, en general, emocionante. A pesar de que siempre había sido difícil para mí acercarme a la gente, logré hacerme amiga de un par de chicas, e incluso decidimos intentar unirnos a la hermandad más popular.

Pero luego descubrí que mi madre había contraído una enfermedad muy grave y que estaba a punto de morir. Por supuesto, quería estar con ella durante sus últimos meses. Además, mi papá necesitaba ayuda. Así que tuve que abandonar la universidad apenas había completado mi primer semestre allí y, ¿sabes?, llevar a mi mamá a su viaje final. No quiero hablar en detalle de lo difícil que fue aceptar su muerte. Lo único de su fallecimiento que se relaciona con esta historia ahora mismo es que mi papá estaba completamente devastado, tanto que no podía dormir o comer bien, y yo terminé cuidando de él. Y, para empeorar las cosas, tuvimos algunos problemas para pagar nuestra hipoteca, así que tuve que encontrar un trabajo.

Lo que intento decir es que ni siquiera tuve la oportunidad de continuar mis estudios en la universidad hasta el próximo año y medio. Pero el tiempo pasó, y la vida con mi papá mejoró. En algún momento comenzó a insistir en que volviera a la escuela. Tengo que decir que fue aún más difícil convertirse en una estudiante de primer año la segunda vez. Todos los demás parecían ser muy jóvenes y muy diferentes de mí, a pesar de que solo tenía dos años más que ellos. Sentí que había algo, como una brecha generacional, entre mis compañeros y yo. Claro, había algunas personas con las que hablaba durante los almuerzos o trabajos en equipo, pero no puedo decir que de verdad nos habíamos hecho amigos. Estaba bastante sola.

Es por eso que quería obtener mi título lo antes posible, así que, en algún momento decidí quedarme en la universidad durante todo el verano y tomar algunas clases adicionales. Sabía que esa noticia haría que mi papá en verdad se molestara, porque me extrañaba mucho, especialmente ahora que mi madre ya no estaba allí. Imagina lo sorprendida que estaba cuando el primer día del semestre de verano, en una de mis primeras clases, noté que mi papá estaba sentado en la última fila.

Nos miramos a los ojos y actuó como si no me conociera. Me quedé completamente sin palabras. Revisé mi teléfono y encontré un mensaje de texto de él en el que decía que debíamos vernos después de clase y que más valía que no me viera como una tonta con la cara llena de perplejidad. Una hora más ta