Mi hermano o mi papá irán a prisión, y debo elegir quién

  • hace 5 años
Hola, amigos, me llamo Chris. Recientemente tuve que elegir quién iría a prisión: mi papá o mi hermano. Pero tengo 13 años, ¿cómo puedo tomar una decisión como esa?

Teníamos una vida normal. Pero, cuando cumplí 10 años, mamá murió, y nuestra familia cambió mucho. Sufrimos su pérdida por mucho tiempo… Papá se estaba desmoronando, no lograba superarlo, así que comenzó a beber. Desde entonces, todo empeoró. Lo despidieron de su trabajo, apenas ganaba dinero. Y lo poco que ganaba lo gastaba en alcohol. Era terrible cuando se embriagaba, su humor era una montaña rusa. Al principio lloraba, luego gritaba y se ponía furioso. Finalmente, mi hermano Bruce ocupó el rol de padre de la familia. Siempre me protegía y me cuidaba. Pasamos tres años de mucha desgracia, pero las cosas mejoraron. Hablamos mucho con papá, y él comenzó a beber menos. Bruce llegó a los 18 y consiguió un trabajo que pagaba bien. Teníamos la esperanza de un futuro normal. Hasta que, una noche, todo se puso de cabeza.

Un día, en un fin de semana, papá nos hizo una sorpresa. ¡Había comprado boletos para un juego de béisbol! Nos llevó al estadio y pasamos un gran momento. ¡Bruce y yo estábamos tan felices! Pero, por supuesto, no podía terminar bien. Papá encontró a sus amigos y nos dejó solos para ver el juego con ellos. Acordamos encontrarnos en el auto dos horas después. Cuando terminó todo, papá no apareció. Intentamos llamarlo, pero no respondía. Nos quedamos otra hora cerca del auto, hasta que por fin apareció. ¡Casi no podía sostenerse! Se había embriagado con sus amigos. Bruce estaba más que molesto, había arruinado nuestra tarde. Tomó las llaves de papá y dijo que conduciría. Pero papá estaba agresivo, le decía a Bruce cómo conducir, era muy irritante. Peleaban y se gritaban mutuamente. Yo no quería escucharlos, así que cerré los ojos y me tapé los oídos. De pronto, sentí que el auto saltaba. Abrí los ojos, y lo último que vi fue que el parabrisas estallaba.

Desperté. No sabía dónde estaba. Levanté la vista y encontré a mi hermano. Estaba sentado a mi lado, cubierto de rasguños y moretones. Habíamos sufrido un accidente, aunque tuvimos suerte, salimos casi intactos. Respiré aliviado. Y entonces pregunté dónde estaba papá. Bruce me dijo que estaba bien, que se encontraba en otra habitación. De pronto recordé su pelea. Dije: “Nos estrellamos porque él te distrajo, ¿cierto?”. Mi hermano se quedó pensando un momento. Finalmente respondió: “Escucha, Chris. La policía llegó… Me preguntaron por el accidente, y les dije que papá estaba detrás del volante, no yo”. Agregó que papá podría tener problemas con eso, pero que lo mejor para todos era que la policía creyera eso. Quizá lo obligarían a ir a rehabilitación o algo así. Había algo extraño en su propuesta, pero creí en mi hermano y decidí apoyarlo.

Después de la conversación, Bruce estaba aliviado. Dijo que podríamos r

Recomendada