¡Atrapé a mi papá con otra mujer y tuve que salvar a la familia!

  • hace 5 años
Hola, me llamo Claire y tengo una historia que contarles. Es acerca de algo que me impactó mucho en su momento, no sabía muy bien cómo debía reaccionar frente a una situación así. Apuesto a que muchos de ustedes se habrán sentido de la misma manera si han atrapado a su padre siendo infiel.

Unos meses atrás, fuimos a jugar a los bolos para celebrar el cumpleaños de mi mejor amiga. Una vez que salimos, nos quedamos afuera esperando a que su mamá viniera por nosotras.
Noté una figura familiar al otro lado de la calle. Miré con más atención, y no pude creer lo que veían mis ojos, o quizá no quería creerles. Era mi papá caminando con una mujer que nunca había visto antes, pero lo más chocante fue que iban de la mano… Sentí que algo se sacudía dentro de mí y dejaba un enorme agujero de dolor en mi pecho… Aún estaba con mis amigas, y no quería que lo vieran, así que intenté regresar a la conversación. Pero lo mejor que pude hacer fue poner la mirada en blanco y asentir de vez en cuando. No lograba pensar en otra cosa… “¡¿Qué significa todo esto?! ¿Esto es lo creo que es?”. Esas frases pasaban por mi cabeza una y otra vez.

Cuando regresé a casa, encontré a mamá leyendo en la sala. Le pregunté como si nada: “¡Hola, mamá! ¿Sabes dónde está papá?”. “¡Hola, cariño!”, respondió. “Sí, sigue en la oficina, dijo que tenía mucho papeleo que terminar para mañana. ¿Por qué preguntas? ¿Querías hablar con él?”. Claramente papá le había mentido, y yo ni siquiera quería imaginar dónde estaría realmente. Su respuesta tranquila y genuina fue aún más dolorosa que haber visto a papá con otra mujer. Sentí que las lágrimas se asomaban, así que contesté rápidamente “Oh, no es nada, le hablaré más tarde…”, y subí a mi cuarto. Decidí que no le diría nada hasta estar segura de lo que ocurría.

Me quedé en la cama con todo tipo de pensamientos que se deslizaban por mi cabeza. En un momento comencé a pensar que no había nada de qué preocuparme y que lo que había visto no significaba nada. Pero pronto me molesté conmigo misma por intentar cubrir lo obvio. Aparecieron imágenes de mi familia desmoronándose… ¿De verdad se amaban entre sí? ¿Y si se divorciaban? ¿Con quién me quedaría? ¿Serían capaces de ser felices juntos?

El tiempo pasó y, unas horas después, oí que papá entraba por la puerta principal. Mi corazón se detuvo, la respiración se aceleró… Sabía que debía hablar con él, pero mamá no debía involucrarse ni sospechar nada. Así que le envié un mensaje y le pedí que fuera a mi habitación.

Apareció relajado, como si no ocurriera nada… Lo vi y no pude contenerme más, estallé en lágrimas y le conté todo lo que había visto horas atrás… Su expresión cambió de pronto y se sentó a mi lado, parecía muy triste… Durante un minuto no dijo nada, pero sus ojos también se humedecieron. Me abrazó, me dijo que lo lamentaba mucho, que nu