10 años han transcurrido desde que el dorso de la estatua de la diosa María Lionza sufrió una fractura en la autopista Francisco Fajardo. Su restauración le tomó 2 años al escultor Fernando de Tovar. Desde entonces, la escultura que mide 7 metros y medio de largo con un peso de 15 toneladas aproximadamente, permanece en los galpones de la UCV esperando ser trasladada a su sitio de origen. Hoy, cuando cumple 8 años de estar encerrada, la directora del Consejo de preservación y Desarrollo de la UCV, Luisa Palacios, considera que La Reina debe ser trasladada a la autopista para respetar la memoria de la ciudad