Estas cosas sucedían antes, pero se contaban de boca en boca pero hoy existe la documentación del hecho que consta que realmente sucedió. La invasión de la intimidad que persiste desde hace unos quince años, condiciona a que este fenómeno se reproduzca sin parar. Ni siquiera hay posibilidad de tergiversación, porque cada uno lo está viendo. Según los expertos se debe a los cambios tecnológicos pero sobre todo a los cambios culturales y al morbo presente en todas las etapas de la historia del ser humano. El psicólogo Robero Balaguer, especialista en redes sociales, explicó que el fenómeno de viralización del video de Santa Teresa responde a un gran cambio cultural que fue, en parte, determinado por las tecnologías que tenemos al alcance de nuestras manos. Explicó que desde hace 15 o 20 años ya no solo están los ojos de los que participan, sino también de los celulares que permiten documentar y son potenciales viralizadores del material. Nada sucede si la persona que tiene la grabación no tiene la intención de divulgarla, pero según Balaguer el morbo humano está presente en todas las etapas de la historia del hombre.