El tribunal de la ONU que investiga el asesinato en 2005 del ex primer ministro libanés, Rafik Hariri, dijo que había suficiente evidencia para implicar a Hezbolá. El juez que examina el caso, dio a conocer pruebas que involucran a cuatro sospechosos del Líbano, algunos vinculados a Hezbollah. Según fuentes particípes, los cuatro sospechosos habían huido a Irán para escapar de la persecución, liderados por un funcionario de Hezbollah que habría coordinado y planificado el asesinato. Según la acusación, los cuatro miembros del grupo terrorista jugaron un papel importante en el ataque del 14 de febrero de 2005 y por lo tanto, tienen la responsabilidad penal de los resultados del ataque. Mientras tanto, el líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, ha negado cualquier implicación en la muerte del ex primer ministro.