Xabi Alonso salió al paso de los rumores sobre su continuidad como entrenador del Real Madrid y negó rotundamente que tenga un ultimátum sobre la mesa antes del decisivo duelo frente al Manchester City. El técnico aseguró que mantiene una "comunicación constante" con la directiva, basada en "la confianza", y lanzó un mensaje claro a la afición: "calma, unidad y tranquilidad".
En una rueda de prensa marcada por la tensión y las preguntas sobre su futuro, Alonso respondió con firmeza y brevedad, tratando de rebajar la presión que rodea al banquillo blanco. El entrenador insistió en que mira al futuro con optimismo y que siente el respaldo total de los altos cargos del club, a pesar del delicado momento deportivo.
Además, evitó cualquier crítica hacia sus jugadores, subrayando que el equipo está comprometido y concentrado en revertir la situación. Su intervención busca despejar dudas y estabilizar el entorno madridista antes de un partido crucial que podría marcar la recta final de la temporada.
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