Mariana, de 26 años, dejó de comunicarse con su familia desde que viajó a España el 6 de octubre para comenzar un trabajo que, según versiones, aún no estaba del todo claro. Su último contacto fue el 14 de octubre, y desde entonces borró sus redes sociales y bloqueó todos los números de WhatsApp e Instagram, generando preocupación en sus familiares.
La joven había conseguido empleo a través de una aplicación y, de acuerdo a la familia, se trataba de un trabajo tipo niñera para una familia extranjera, similar a experiencias previas en Inglaterra. Se le ofrecía alojamiento, comida y un curso de idioma, con una jornada de cuidado de niños de ocho horas diarias.
La familia comenzó a investigar y a realizar las denuncias correspondientes, temiendo que alguien pudiera estar suplantando su identidad en comunicaciones recientes. La búsqueda continúa mientras se intenta esclarecer su paradero.
Sé la primera persona en añadir un comentario