Este domingo, cientos de fieles se reunieron en Caracas para celebrar la canonización de un médico local llamado José Gregorio Hernández, conocido por tratar a los pobres durante la pandemia de gripe española hace un siglo, y de la madre Carmen Rendiles, conocida por su vida de devoción religiosa, declarados por el papa León como nuevos santos de la Iglesia católica romana.
Sé la primera persona en añadir un comentario