00:00Mucho ya, pero habíamos ya logrado, íbamos a hacer el canje el día jueves, el miércoles en la madrugada estábamos reunidos con usted y de repente aparecieron una, era muy, era, cuando ya estábamos listos aparecía alguna cosa loca que se les ocurría a los gringos, entonces no era, hacía imposible la posibilidad de hacer ese canje.
00:23De todos modos, el jueves no se pudo hacer, el viernes a primera hora de la mañana comenzamos las conversaciones con McNamara, mantuvimos las conversaciones durante todo el día, solamente como una anécdota, cada media hora, cada hora el presidente, bueno, ¿cómo vamos? ¿Cómo vamos?
00:40¿Cómo vamos? Y además a veces es muy difícil desde el punto de vista anímico porque a veces, bueno, no lo voy a decir aquí, pero las cosas que dicen, que uno sabe que son mentiras sobre nuestros migrantes, sobre estos muchachos, sobre las madres, es una cosa que de verdad, a veces uno era presa de la ira por las cosas que decían.
01:08Al final, lo logramos después de las conversaciones y el día viernes a las 8 de la mañana estábamos en una parte del aeropuerto, los representantes de Estados Unidos, nosotros, pero también estábamos viendo que cerquita, a metros, estaban Silvia y Osdado esperando
01:30a los primeros siete niños que regresaban ese día viernes. El proceso es como una especie de danza, una especie de tango, porque todo tenía que hacerse de manera compasada, todo tenía que hacerse de manera sincrónica.