Las impresionantes imágenes, que fueron registradas con teléfonos celulares y cámaras de seguridad, muestran la furia con la que el fenómeno azotó a la ciudad china provocando la suspensión de todas las actividades.
Según los reportes locales, unos catorce individuos resultaron heridos y se cree que la cifra podría aumentar con el correr de las horas.