Este pasaje es una doxología, es decir, una expresión de alabanza a Dios. Pablo concluye una de sus oraciones elevando la mirada de los creyentes hacia la grandeza y la capacidad ilimitada de Dios.
Versículo 20: Pablo afirma que Dios es “poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos”. Esto nos enseña varias verdades clave:
La omnipotencia de Dios: Él no solo puede hacer lo que le pedimos, sino que su poder excede nuestras más altas expectativas y pensamientos.
La acción de su poder en nosotros: Pablo recalca que este poder no es lejano ni abstracto; es el mismo poder que actúa en los creyentes, fortaleciéndolos y transformándolos por medio del Espíritu Santo.
Versículo 21: Aquí Pablo redirige toda la gloria a Dios:
La gloria en la iglesia y en Cristo Jesús: La iglesia es el instrumento mediante el cual se manifiesta la gloria de Dios en la tierra, y esto es posible únicamente en Cristo Jesús, quien es la cabeza de la iglesia.
Por todas las edades: Este reconocimiento no es temporal; es eterno, atravesando todas las generaciones y perdurando “por los siglos de los siglos”, subrayando la eternidad del propósito y la alabanza a Dios.
Aplicación: Este pasaje nos recuerda que nuestras oraciones y sueños más grandes son limitados en comparación con la inmensidad del poder y la bondad de Dios. Nos anima a confiar plenamente en Él, sabiendo que su obra en nosotros y a través de nosotros tiene un propósito eterno para su gloria. #poderoso #cosas #abundante #cristo #jesus #edad #siglo #amen #gloria