Londres, 25 may (EFE).- La plantilla del Barcelona, que el sábado jugará la final de la Liga de Campeones contra el Manchester United, salió de su hotel para dirigirse en autobús hacia la ciudad deportiva del Arsenal, en St. Albans, una población distinta a donde el equipo de Pep Guardiola se encuentra alojado.
En torno a una decena de niños británicos, de entre cinco y diez años, aguardaban especialmente a la salida de Lionel Messi, al que gritaron cuando apareció con la esperanza de conseguir un autógrafo o una fotografía de su ídolo.
Entre los aficionados presentes en las inmediaciones del hotel "The Groove", rodeado por campos de golf, un canal con embarcaciones y enormes extensiones de vegetación, se distinguieron algunas camisetas azulgrana, vestidas por británicos.
El Barcelona salió con tiempo, dado el congestionado tráfico que sufre la ciudad de Londres cada día a estas horas, para cumplir su plan del día, que está previsto que se celebre a puerta cerrada, al igual que el de mañana.
Sé la primera persona en añadir un comentario