El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, mantuvo este martes por la mañana una conversación con el líder de Vox, Santiago Abascal, para analizar la situación política en la Comunidad Valenciana y tratar de encontrar una solución que evite la convocatoria de nuevas elecciones tras la dimisión de Carlos Mazón. Así lo confirmaron fuentes de la dirección nacional del PP en Génova, que señalaron que ambos dirigentes coincidieron en "la necesidad de garantizar la estabilidad en un territorio que aún atraviesa un complejo y doloroso proceso de reconstrucción tras las riadas del año pasado". Desde el Partido Popular explican que tanto el PPCV como Vox iniciarán en los próximos días una ronda de contactos con el objetivo de alcanzar un acuerdo que permita una nueva investidura. Este entendimiento se basará en los compromisos firmados entre ambas formaciones el pasado mes de mayo, que sirvieron como marco para la aprobación de los actuales presupuestos autonómicos. Con este movimiento, el PP busca preservar la gobernabilidad en la región y mantener la colaboración institucional con Vox, pieza clave en el equilibrio político valenciano. La renuncia de Carlos Mazón, sin ir acompañada de un adelanto electoral, ha colocado a Vox en una posición decisiva. El partido de Santiago Abascal asume ahora tanto el poder como la responsabilidad de definir el rumbo político inmediato de la Comunidad Valenciana. Sin mayoría suficiente en Les Corts, el Partido Popular necesita su respaldo para poder investir a un nuevo presidente que ocupe el Palau de la Generalitat hasta 2027. La estabilidad de la legislatura, por tanto, depende de la sintonía entre ambas formaciones. Si ese entendimiento no se materializa, el territorio se verá abocado a una convocatoria electoral forzosa, un horizonte incierto que podría reconfigurar por completo el equilibrio político valenciano.
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