El fantasma de la trata vuelve a sacudir al noroeste de nuestro país.
En este caso, un hombre residente en la localidad misionera de Loreto denunció que su pequeña hija fue secuestrada tras la promesa de un trabajo y trasladada hacia la ciudad de San Ignacio.
El hombre, que es trabajador de las fuerzas policiales de la provincia, inmediatamente acudió al rescate y cuando llegó al lugar encontró a su hija encerrada y rodeada de tres adultos desnudos.
Según trascendió, uno de los depravados sería comisario y trabajaría como chofer del intendente.
Para conocer los aberrantes detalles dialogamos con el periodista Enrique Ortiz quien trabaja en la zona.
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