El comediante Lando Ibarra unió su energía con la del esotérico Yamarash, para realizar un poderoso ritual con el propósito de blindarse ante cualquier tipo de ataque energético y atraer prosperidad en su carrera artística. “Mi comedia es post-punk norteña —explicó entre risas Lando—. Soy de Sinaloa y ando de gira por todo el país, pero también hay que proteger la energía para que el camino siga fluyendo”. El ritual giró en torno a la Mano de Fátima, símbolo ancestral de protección y equilibrio espiritual, conocido también como Hamsa. Este amuleto, presente en distintas culturas, se considera un escudo contra las malas vibraciones y un imán de buena suerte. El ritual no sólo busca repeler lo negativo, sino también activar la Ley de Atracción mediante la intención, la palabra y la visualización. “Hay que conectar pensamiento y sentimiento para que el universo responda. Si lo ves, si lo sientes, sucede”, dijo el mago mientras guiaba los pasos del comediante. Lando escribió su nombre y deseos en un pequeño pergamino que fue sellado con extracto de garrapata, un elemento simbólico que, según el esotérico, ayuda a “atrapar” las oportunidades. Luego colocaron el rollo al centro de la Mano de Fátima, encendieron una vela blanca y abrieron el portal del fuego, pronunciando las palabras: “Me hago presente en palabra, pensamiento y acción”. El ritual concluyó con la recomendación de ungir las manos con el aceite de atracción antes de firmar contratos o subir al escenario, como símbolo de que “todo lo que se toca, se concreta”. “A veces uno no sabe cómo manifestar lo que desea, y este tipo de rituales te centran, te conectan, te recuerdan que también hay magia en lo que haces”, dijo Lando al finalizar la experiencia.
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