El Atlético de Madrid venció 5-2 al Real Madrid en el Metropolitano, logrando una de las goleadas más recordadas de los últimos años en el derbi.
La afición rojiblanca vivió una auténtica fiesta en las gradas, celebrando cada gol con intensidad y destacando la importancia de superar al eterno rival con autoridad.
El tanto final de Griezmann desató la euforia, mientras que Diego Simeone pidió calma en rueda de prensa, recordando que pese al marcador, en liga “son solo tres puntos”.
El resultado refuerza la confianza del equipo y consolida al Atlético en la lucha por el liderato, al tiempo que corta la racha triunfal del Real Madrid en la temporada.