00:00¿Qué te genera esto de decir, mi hijo y mi esposa están en la cárcel, tú habías tramitado un amparo junto a Otón, que les permite hoy estar en libertad?
00:12Se habló mucho de que hubo lágrimas de tu hijo, y pues, ¿cómo no? Por estar dentro de prisión.
00:18Vicente, no lloró mi hijo.
00:20Ok.
00:21¿Sabes qué?
00:21Ok.
00:22Hablamos, este, perdón, hablamos esto antes de entrar al reclusorio porque vivimos un infierno.
00:28¿No? Desde, desde Cancún, desde al aeropuerto, desde cómo nos trataron, o sea, no somos delincuentes, ¿sabes?
00:38Cuando íbamos a entrar al reclusorio, yo les di mucha fuerza. Hablamos, seamos fuertes, ¿sabes?
00:45¿Qué pensaste en ese momento?
00:47Fíjate que, no es que haya pensado, realmente me preocupaba porque imagínate, mi señora y mi hijo, yo como sea, ¿sabes?
00:56Pero un chavo de 30 años que apenas está saliendo a la vida, está formando su vida para adelante, y ya con esos problemas de reclusorio, pues es muy delicado.
01:07Una señora ama de casa, dedicada al deporte, dedicada a apoyar a los chavos.
01:12Y imagínate, en el reclusorio, y de verdad, es muy difícil.
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