Kim Jong-un llora por sus soldados caídos que lucharon por Putin. El evento reunía al líder de Corea del Norte y a la ministra de Cultura rusa, Olga Lyubimova, también emocionada.
Hace un año desde que Putin visitara Pyongyang y se firmara el acuerdo de defensa entre los dos países. Tres meses después Kim Jong-un mandaría más de 10 mil soldados al Kursk ruso.