De cuentos y fábulas está hecha la política mexicana. Y esta es la historia del Magnate y el Rey del país de Nunca Jamás (Pasa Nada)
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00:00Era se que se era un magnate rico, muy rico, que dominaba en el país del nunca jamás,
00:16sí, del nunca jamás pasa nada. Ese poderoso personaje odiaba al rey en turno porque se
00:25atrevió con sus reformas a trastocar sus vastos y muy lucrativos intereses. Y por eso el potentado
00:33se fijó tres propósitos. Uno, destruir a quien lo desafió. Dos, financiar a los rivales políticos
00:42más temidos por su gobierno. Y tres, dejar el mensaje a quienquiera que fuera el próximo rey
00:49que con él, con el magnate y sus intereses, no se jugaba.
00:57Para cumplir su propósito, armó una sofisticada red de inteligencia, aprovechando que un jefe
01:04de la seguridad nacional operaba desde hacía dos gobiernos bajo su nómina y protección.
01:09Y fue haciéndose uno a uno de los secretos más sensibles del reino, que podrían poner
01:15en jaque al gobierno que lo desafió, para emplearlos en el momento oportuno, en beneficio
01:21de sus crecientes y desbordados intereses.
01:25Para diversificar sus áreas de influencia, el magnate creó una constructora y una corporación
01:31petroera que comenzaron a ganar algunas licitaciones de las obras más codiciadas del reino, aunque
01:37en otras tantas se quedó en el camino. Fue por su red de inteligencia que en una investigación
01:43sobre por qué había perdido la asignación de una importante carretera, el magnate se
01:50topó con los oscuros intereses de una constructora de otro reino.
01:55A lo largo de los últimos tres gobiernos, esta constructora extranjera fue convirtiéndose
02:01en una de las favoritas, sin importar el partido en el poder.
02:05Su red de relaciones y su capacidad de concretar negociaciones privilegiadas, en algunos casos
02:11muy cuestionables, le dieron a esa constructora extranjera una ventaja competitiva sobre la
02:18del reino, incluida por supuesto la del magnate.
02:22Pero ese hombre poderoso hizo copio de abundante información hasta que en el momento oportuno
02:28la detonó.
02:30Él sabía que sería un escándalo internacional cuando se conociera que los sobornos que esa
02:37constructora extranjera pagó a duques y condes de su país, salieron de las cuentas de su
02:44filial nacional.
02:46El escándalo daba al magnate la ocasión perfecta para hacer una carambola de cuatro
02:51bandas.
02:52La primera, sobre el rey que se atrevió a desafiarlo, pues las obras principales de esa
02:57constructora extranjera se ejecutaron no solo en el condado de origen del soberano, sino
03:03que algunas se pactaron en los años en que el rey era apenas su comendador.
03:10Sería el escándalo.
03:11La segunda, el magnate exhibiría el nivel de corrupción de su constructora rival, lo
03:17que le inhabilitaría de la obra pública, al ser exhibidos los detalles de sus cuestionables
03:23negociaciones.
03:24La tercera, inhabilitado el rival por muy justos motivos, las posibilidades de que la
03:32constructora del magnate se fortaleciera crecían y tendría acceso a las obras monumentales
03:38con escasa competencia, aliada con otras constructoras nacionales con intereses políticos y económicos
03:45afines.
03:46Y la cuarta, al exhibir el descalabro de ese gobierno y su colusión con la constructora
03:52extranjera, el escándalo colocaría bajo la lupa al rey y a su partido, despejando todavía
03:58más el camino para favorecer a aquellos a quienes el magnate pensaba que con sus favores financieros
04:05le mantendrían intocable sus intereses cuando llegaran al poder.
04:10De poco sirvieron los coqueteos del soberano para con el magnate, a quien se le entregó
04:16sin reservas, la construcción de la obra insignia del reino.
04:21El plan estaba en marcha.
04:25¿Y colorín colorado?
04:26Para nada, este cuento apenas ha comenzado.
04:31Cualquier parecido con alguna realidad, no es coincidencia.
04:40Gracias.
04:41Gracias.
04:42Gracias.
04:43Gracias.