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00:00Bueno, hola, traje un libro de Miguel Briante, que se llama Almar, es un libro póstumo,
00:13donde se recopilan algunos cuentos, o pequeñas crónicas, podría decirse, sobre algunos
00:19de ellos también, que quedaron fuera de todos sus libros, que tampoco eran tantos, con lo
00:28cual para mí es un material súper preciado y precioso al mismo tiempo, justamente por
00:34eso, porque es algo más de alguien que no tiene una obra muy grande, y siempre está
00:43bueno tener un poquitito más de ese autor.
00:50Bueno, traje una cita, voy a leer la cita y nada más, porque creo que es bastante contundente,
00:55para mostrar lo que él hacía, lo que él hace, con la arquitectura, del cuento que se llama
01:03Almar, precisamente, que es el de Cierre del Libro, es un cuentazo, y dice así.
01:09Así que miro la barranca, allá enfrente, que es como mirar lo de Arispe, aunque no
01:17se vea, y más allá del pueblo, aunque no se vea.
01:21Yo sé que de ahí, de la gente es que me acuerdo, y del río, se hacen algunos sueños,
01:27otras es del río y lo que trae, como el de los alambres de púas y su suerte de opositor.
01:33A veces, para olvidarme de esos ruidos que veo, me pongo a pensar qué podría soñar
01:38alguno del pueblo, qué podría querer olvidarse para siempre.
01:42Pero eso es mucho para mi cabeza, que ya tiene suficiente, y encima el mar, que no vi.
01:48Era más fácil cuando, en lo de Arispe, había ventana para el lado del pueblo,
01:52y en la leña, que iba ardiendo en ese hueco, donde ahora que llegó la luz,
01:56pusieron el televisor, en el fuego.
01:58Uno iba pudiendo ver la historia que quería, estaba la ventana, y uno veía prenderse
02:04primero todas las luces de las calles, y después las de las casas, y podía identificar.
02:10Ahora me lo tapan las barrancas, al pensamiento, o me lo retuercen con esas raíces
02:15que asoman del barro, de la barranca de allá, donde hay filas de pinos,
02:19casuarinas y plantas más petizas, otra eternidad en la que me puedo caer
02:24tratando de distraerme de la cabeza.
02:25Ver raíces de qué son, cada una, a cada una de las que alcanzo a mirar.
02:33Y alcanza a compensar todo esto, acordarse de la ventana y del fuego,
02:37en el hueco donde ahora brilla nada más que la televisión.
02:40Así las historias ya vienen contadas, y no nos andamos peleando
02:44porque tal tronco sea tal cosa, y tal otro, tal otra,
02:48de acuerdo a lo que quiere cada uno, y para que nos amarguemos
02:51apostando a ver qué tronco cae para qué lado, y si entonces el tronco
02:56era mujer, mujer de alguien, y si se encimaba al otro,
03:00que podría ser uno de nosotros, o el loco Toledo.
03:05Alcanza con decir antes, para que todo se complique,
03:08y no haya modo de escapar.
03:10Puede ser media tarde, o venirse el mediodía, y ahí está uno
03:16con ese entrevero de figuritas.
03:19Arispe sirve la ginebra, con ese ruido que raspa el alma,
03:23antes no más, de ese cimbrón en la garganta y el calor en los cuerpos.
03:27Y por ahí se debe entrar a un hombre que al rato dice,
03:31por algo que ha sido dicho, odio a los velorios, no voy a ir al de mío.
03:35Y ya está, ya empezó.
03:40Bueno, eso.
03:43Lo encontré en la biblioteca, hoy, a la mañana.
03:46Y me acordé del momento en el que compré ese libro,
03:52de la librería en donde lo compré,
03:55de lo que me impactó cuando leí el primer cuentito que tiene,
04:00que no es este, sino que es otro,
04:02como mucho más urbano y mucho menos así rural como el que acabo de leer.
04:09Y ese día me enamoré de Miguel Briante, no lo conocía.
04:13Llegué tarde a la obra de Miguel Briante.
04:16Llegué cuando ya estaba muerto.
04:17Llegué a un libro publicado después de su muerte, incluso,
04:21que nunca había podido publicar.
04:25Y bueno, nada, es un poco lo que tiene la literatura.
04:30Como se puede llegar en cualquier momento y va a estar bien.
04:35Como la conexión se puede dar igual, con esa distancia.