Felipe, un vecino de 82 años, vive una pesadilla diaria a causa de su inquilina, una mujer de 55 años de nacionalidad venezolana, que lleva más de tres años sin pagar el alquiler de su vivienda y acumula una deuda de casi 40.000 euros.
La situación va mucho más allá del impago. Según relata Felipe, la inquilina lo amenaza de muerte, le arroja ratas muertas y hasta restos fecales envueltos en servilletas. Además, afirma ser víctima de ritos de brujería y comportamientos intimidatorios por parte de esta mujer, que continúa ocupando el inmueble.