Al parecer, el trabajo a distancia ahorra a los trabajadores de Manhattan 12.400 millones de dólares al año en gastos.
Esto se debe a que los trabajadores pasan un 30% menos de días en la oficina, según Bloomberg.
El trabajador medio gasta 4.661 dólares menos al año en comidas, compras y ocio cerca de sus oficinas en Nueva York.
Esta cifra contrasta con los 3.040 dólares de San Francisco y los 2.387 dólares de Chicago.
Sin embargo, esta es una mala noticia para los restaurantes, comercios minoristas y otras empresas que impulsan el motor económico de Nueva York.
Las oficinas vacías suponen un grave problema para la ciudad, ya que las finanzas del sistema de transporte están en caída libre.
"Si hay menos viajeros, eso significa menos ingresos", afirma José María Barrero, profesor del Instituto Tecnológico Autónomo de México.