Andrés oficializa ante todos en el inquilinato Watergate su deseo de casarse con Rita, y la respuesta de ella no demora en llegar. Posteriormente, mientras se avecina la hora cero para la boda de Andrés y Rita, William reaparece tras varios meses en prisión y elige un lugar que se le hace familiar para reiniciar su desatinada vida. Finalmente, ni la sorpresiva aparición de William arruina los grandes planes de Andrés y Rita.