Kabul (Afganistán), 10 jul (EFE/EPA).- Badar Amar, un joven estudiante de 15 años en una de las escuelas de Kabul, dejó de acudir al colegio para no hacer frente a las burlas de sus compañeros después de que un profesor le infligiese un humillante trasquilón como castigo, una práctica corriente en Afganistán que ha sido prohibida este mes.