Viven de alquiler en viviendas que eran públicas, destinadas a familias con pocos recursos, que el Gobierno de Ignacio González vendió en 2013 a Encasa Cibeles, la filial del fondo de inversión Goldman Sach. Son veintiséis familias de Parla que están en riesgo extremo de desahucio. Con la venta cambiaron las condiciones de alquiler y ahora no pueden asumirlo. Pero no son los únicos. La Comunidad de Madrid vendió cerca de tres mil viviendas vendidas con los inquilinos dentro. Todos están recibiendo un aviso: su contrato termina este año.
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