Pekín (China), 23 feb (EFE).- Cada día cuando abre su pequeña tintorería en el centro de Pekín se recuerda a sí misma por qué ella y su marido están a cientos de kilómetros de sus dos hijos pequeños. Hace once años que tuvieron que migrar para sacar adelante a su familia y ahora, con suerte, los ven dos veces al año.
 
Imagen: Jèssica Martorell.
Edición y locución: Laura Esteban.
 
Palabras clave: efe,internacional,china,migracion,economia,destacado,24h