UN CURSO DE MILAGROS.LAS RECOMPENSAS QUE SE DERIVAN DE ENSEÑAR CAPÍTULO 16-SECIÓN-III. Las recompensas que se derivan de enseñar 1. Ya hemos aprendido que todo el mundo enseña, y que enseña continuamente. 2Es posible que hayas enseñado bien, pero que no hayas aprendido a aceptar el bienesar que te produce enseñar. 3Si examinases lo que has enseñado, y cuán ajeno es a lo que creías saber, no podrías por menos que darte cuenta de que tu Maestro tuvo que proceder de más allá de tu sistema de pensamiento.
Sé la primera persona en añadir un comentario