El cobre ha forjado la historia de todo un pueblo azerí. En este último episodio de Azerbaiyán Life, les llevamos al encuentro de los artesanos de Lahic, uno de los más antiguos asentamientos azeríes, en el sur del Cáucaso.
Lahic, está a solo 200 kilómetros de Bakú, la moderna capital de Azerbaiyán. En este pueblo del sur del Cáucaso, el tiempo parece haberse suspendido y el ritmo de la aldea se marca a golpe de yunque y martillo.
Les presentamos a Kablemi Aliyev: séptima generación de artesanos del cobre en una familia con solera.
Él lleva uno de los cinco talleres que áun quedan en Lahic. Y que dieron renombre en el siglo XVIII, a unos herreros que proporcionaron calderos y armas de fuego a la región de Oriente Medio.
Poco parece haber cambiado desde entonces. Desde 1725, los ancestros de Kablemi han trabajado el metal. Su padre lo inició en el arte del cobre cuando él era solo un niño.
“Había mucha gente trabajando aquí y haciendo muchísimo ruido. Teníamos que taparnos los o