La víctima de la broma fue convencida para que durmiera en un refugio a los pies del monte Fuji y así poder despertar pronto para acudir a un trabajo cerca de allí. Lo que no sabía es que en verdad le estaban preparando un despertar que nunca olvidaría. Así son los japos, llevando las bromas al extremo.
Sé la primera persona en añadir un comentario