Un equipo internacional de astrónomos ha puesto en jaque la teoría estelar al descubrir que la mayoría de las estrellas no pasan por una fase final explosiva como se creía, sino que se enfrían gradualmente durante miles de millones de años.
Según un comunicado del Observatorio Austral Europeo (ESO) difundido hoy, los científicos han constatado además que las que acaban explotando suelen tener un alto nivel de sodio, aunque desconocen por el momento la relación entre ambos hechos.
"Parece que las estrellas necesitan tener una 'dieta' baja en sodio para alcanzar la fase de AGB en su edad anciana", explica el líder del equipo de astrónomos, Simon Campbell, del Centro de Astrofísica de la Universidad de Monash (Australia).
La fase AGB, o de rama gigante asintótica en jerga científica, es aquella, hacia el final de la vida de las estrellas de un tamaño similar al sol, en la que explota el núcleo de estos cuerpos celestes y gran parte de su masa e