La Batería neuropsicológica de Luria-Christensen] está basada en la gran tarea teórica que Luria desarrolló. En ella están presentes sus tres unidades funcionales: unidad que regula el tono y la vigilia; unidad que obtiene, procesa y almacena información del mundo exterior y unidad que programa, regula y verifica la actividad mental. Christensen la presenta aportando la ordenación y sistematización imprescindible en toda batería neuropsicológica e intenta respetar en lo posible las ideas de Luria. La batería viene compuesta por once secciones fundamentales, comenzando por la que contempla la importancia de la dominancia: 1 dominancia cerebral; 2 funciones motoras; 3 organización acústico-motora; 4 funciones cutáneas superiores y cinestésicas; 5 funciones visuales superiores; 6 habla afectiva; 7 funciones del habla superiores; 8 escritura y lectura; 9 habilidades aritméticas; 10 memoria; 11 procesos intelectuales.