Una persona que padece hipermnesia posee una memoria autobiográfica prácticamente perfecta. No hay muchos casos documentados, pero los pacientes con este mal son capaces de recordar todos los detalles de cualquier día de su vida, incluso los más insignificantes como la hora exacta y todos los eventos que sucedieron minuto a minuto. Un cerebro normal solo registra, a largo plazo, aquellos eventos que resultan importantes -por una u otra razón- a su dueño. La memoria de corto plazo va siendo “borrada” constantemente, y solo unos pocos recuerdos son almacenados definitivamente en la memoria de largo plazo. La mayoría de nosotros solo podemos recordar una decena de hechos relevantes por cada año de nuestra vida, el resto solo “aparece” si son estimulados por una fotografía o el reencuentro con alguna persona u objeto relacionado.